Twinkerbel

Peter Pan llegó a Neverland con la firme idea de no convertirse en adulto, nunca, jamás . Pero todo cuento tiene su moraleja y para Pan todo cambia cuando le arrebatan de forma injusta a su mayor y mas preciada posesión , Tinkerbell.

Todo pasó hace ya, haciendo la cuenta por lo bajo, más de cincuenta años. Después de que Peter Pan sacara a Wendy, John y Mikael de la cama y los llevara a Neverland junto a los niños perdidos y después de vencer al Capitán Hook y devolver a los niños a su casa mientras navegaban por el cielo con el Jolly Roger, Pan se quedó solo con Tinkerbell puesto a que sus leales amigos, los niños perdidos, se habían quedado en Londres junto a Wendy en la que seria su nueva casa. Durante varios días Pan y Tinkerbell surcaron el cielo alargando la vuelta a casa buscando nuevas aventuras, al no encontrar tan siquiera un niño que quisiera ir a Neverland giró el timón y puso rumbo a la segunda estrella a la derecha y todo recto hasta el amanecer, lo que no sabía es que albergaba un polizón no deseado.

Cinco días pasan desde que volvieran a la isla, las sirenas juegan y ríen en sí laguna, sus escamas reflejan la luz del sol haciendo patrones de colores iridiscentes en sus colas de pez, Pan las observa desde un risco tumbado, esperan su visita pero Pan no tiene ganas de bajar a jugar.

--- ¿Las ves Tinkerbell? Se acicalan para mi --- se quita el gorro y juguetea con el haciéndolo girar un dedo --- No saben que sus hermosos rostros no llaman mi atención, Wendy era más hermosa que ellas... --- el hada tintinea una respuesta furiosa volviendo su polvo de un rojo brillante --- Por supuesto tu Tinkerbell eres la más hermosa de todas

El hada volvía sus chispas a su tono amarillo habitual mientras tintineaba algo parecido a "eres un zalamero" "no te creo" "tonto" con un leve tono rosa en sus pequeñas mejillas. Si bien es sabido que las hadas son seres pequeños con alas y que las sirenas encantan con su voz, ambas, tienen ciertos días donde el mito se rompe, con la luna llena las sirenas cobran vida en tierra con piernas y las hadas dejan de volar en tamaño humano. Pan esperaba con ganas la luna llena, tan solo faltaban dos días y durante dos días mas podría gozar de la agradable compañía de su hada a tamaño real, pero no llegaría a verla en algún rincón del bosque donde había un pequeño claro, allí donde se conocieron y Pan había dispuesto una agradable velada.

El polizón que vino con  ellos se ocultó en la espesura del bosque y se movió de noche, una de ellas, la de la cuarta noche observó como Pan volaba por sobre la copa de los árboles con el hada a su lado y como esta hacia figuras caprichosas con su polvo que se volvían reales, recordó una idea que creyó olvidar "el polvo de hadas concede deseos", desde muy joven le negaron la posibilidad de resaltar, sus hermanos mayores y menores siempre eran mejor que él, un don nadie sin talento ni el amor de sus padres, un bueno para nada que vio el Jolly Roger, un barco de cuento, atracado en su tejado y no lo pensó dos veces se subió a él y se escondió temiendo que Hook lo pudiera atrapar, no le importaban demasiado, cualquier cosa seria mejor que su vida anterior.

Ese día los siguió vio el escondite de Pan, ese trozo de madera viejo hueco que llamaba hogar, por uno de los Huecos vio la casa de pájaros donde vivía el hada y oyó al joven emplazar la en cierto lugar cuando la luna estuviera en lo alto, camina por el bosque armando el plan perfecto para secuestrarla.

Era la ocasión perfecta, Pan se acababa de marchar y el sol estaba cayendo en el horizonte, esperó hasta que la oscuridad ocultará sus pasos y salió de la espesura del bosque, se acercó a la misma rendija por la que antes los espió la otra vez y pudo ver a Tinkerbell acicalándose frente a un espejo, una pequeña mota de polvo dorado. El gran reloj dio las doce y el brillo del hada se hizo más intenso hasta que cobró forma humana, su corto vestido verde hecho de hojas Le cubría poco pero lo suficiente, su pelo dorado recogido en un moño alto resaltando su esbelto cuello, y sus ojos, azules cual zafiros de una intensidad que lo dejó sin palabras. Cuando el hada inició el camino hacia la salida la esperó y en cuanto puso un pie en el bosque la amordazó, la ató y se la llevó a rastras de aquel lugar, Pan no volvería a verla, ella era la clave de su futuro y nadie se interpondría.

Pan esperó, esperó y esperó hasta que las velas se apagaron por falta de cera, en ese momento sintió tal desespero que su pecho dolió, dolió tanto que Le quemó, cayendo de rodillas maldice su suerte cuando la figura de una estrella se le dibuja a fuego en el pecho, lanzando al cielo un grito ve la figura inconfundible del Jolly Roger surcar los cielos, con esfuerzo se levanta e intenta volar con lágrimas en los ojos pero cae al suelo de golpe, no puede volar y tan sólo observa sin poder hacer nada como se llevan su alma. Horas después, aún dolorido y con el pecho en carne viva, camina hacia su refugio, no hay signos de lucha pero si encuentra un rastro, unos surcos en la tierra y al final de ellos en el suelo el colgante de una estrella que Le regaló al hada años atrás. Lo estruja en su mano y siente la fuerza recorrerlo de nuevo, sus pies se despegan del suelo y es capaz de volar, sus esperanzas han resurgido y con un firme propósito, recuperar lo que es suyo.

Peter Pan ya no es un niño y mucho menos esta perdido, su cuerpo, su voz, su carácter y hasta sus ojos han cambiado, el reflejo que ofrecen los espejos de él es el de un joven de veinte y pocos años aunque todos saben que no es así, todos los niños saben que Pan esta buscando a su tesoro y no volverá a Neverland hasta encontrarlo. Ha pasado tanto tiempo viajando entre mundos y realidades que ha perdido la cuenta de cuantos ha visitado y de a cuantos niños ha ayudado por el camino, pero a pesar de todo se siente vacío y cada noche, antes de caer en un sueño profundo producto del cansancio, ve a su sombra buscar desesperada la pequeña mota que era su compañera, la escucha llorar y cuanto mas pasa mas incrementa el dolor de su alma, la marca en su pecho quema cada vez mas y esta seguro de que ella esta cerca.