Daño Colateral

Capítulo 6

Siento como los labios de Liam impactan con los míos, es un beso lento y apasionado, todo en este chico es perfecto, sus labios serán mi adicción, me siento en el puto paraíso ahora mismo, siento que estoy tocando el cielo, pero a la misma vez me estoy quemando en el infierno, sé que se preguntarán ¿porqué?
Pero es que este beso va a significar mucho para mí y lo tendré presente siempre, en esos momentos la puerta se abre.

-Line... oh Dios mío, perdón por la interrupción, Aline te espero abajo en 5 minutos_ santa mierda, es la madre de Liam, sé que estoy como un tomate de lo roja que estoy en estos momentos, ella va a odiarme, porque tal vez ella pensará que soy amiga de Lisseth por este chico, sinceramente no sé qué haré.

-esto es un error Liam, nunca debiste besarme, nunca debiste de haber entrado a esta habitación, mierda, tu madre va a odiarme ahora, es que siempre tengo que arruinar todo lo bueno que me pasa en mi jodida vida de mierda_ digo y veo como Liam pone cara de sorprendido y a la vez decepcionado.

-estás en lo correcto extraña, esto nunca debió pasar, nunca volverá a pasar porque tú no eres mi tipo, y sobre mi madre, ella no va a odiarte no tiene porqué hacerlo, esto no significó nada para mi, no es que te pedí matrimonio o algo parecido, fue un simple e insignificante beso, no más de ahí, espero no volverte a ver nunca más extraña_ dicho esto, sale de la habitación y me deja con miles de pensamientos en la cabeza.

Otra vez vuelve el sentimiento de culpabilidad y de insuficiencia, mi respiración se pone cada vez más pesada y ya sé que voy a tener un ataque de pánico, pero no quiero, no aquí, no quiero que se enteren de mis problemas, no quiero que me miren con cara de lástima como lo han hecho muchas personas, me siento aturdida y confundida, siento que estoy perdiendo el conocimiento y todo se pone oscuro.

A lo lejos siento como me llaman, mencionan mi nombre repetidas veces, pero me siento muy débil para articular palabra, poco a poco voy abriendo mis ojos y empiezo a acostumbrarme a la luz, aún estoy en la habitación de la castaña, lo sé por las paredes de su habitación que son de un color rosa pastel.

Salgo de mi aturdimiento y veo como tres pares de ojos me observan con curiosidad, pero siento uno que quema mi cuerpo y es la mirada curiosa de Liam, observándome tratando de saber que ocurrió conmigo.

-¿qué me pasó?_ pregunto.

-mamá me dijo que subió a avisarte que te necesitaba abajo y como nunca bajaste decidimos subir y te encontramos desmayada, ¿qué sucedió Aline?_ pregunta la castaña con preocupación. Bajo mi mirada avergonzada porque no sé cómo explicar qué de cierta manera las palabras que Liam me dijo me afectaron muchísimo haciéndome tener pesadillas de mi pasado, recuerdos que entré en una caja de la cual quise votar la llave pero al parecer no pude.

-no sé Liss, de repente todo se puso negro y ya no supe más de mí hasta ahora, lo siento por hacerlos preocuparse por mí, ya estoy bien, me iré a mi casa_ dije y veo como la madre de Lisseth me da una mirada de reprobación.

-no, no, no, de ninguna manera Aline de aquí no te Irás sin cenar con nosotros y mucho menos dejaré que te vallas sola, son las 7:40 pm no dejaré que salgas sola de aquí, cenarás con nosotros y luego Liam te llevará a tu casa_ abro mis ojos con sorpresa y a la vez con nerviosismo, no quiero volver a tenerlo cerca, tengo que alejarlo de mí, el tiene el poder de destruirme con pocas palabras, no puedo dejar que eso ocurra, no puedo dejar que me hagan daño, no otra vez.

-me puedo quedar a cenar con ustedes, pero puede Lisseth acompañarme a mi casa junto con Liam? Es que no quiero que mi mamá piense algo malo al verme sola con su hijo ya que vine a visitar a la Castaña, sé que usted puede entenderme usted sabe que las madres siempre son sobreprotectoras con sus hijos y mi madre nunca me a visto socializando con chicos, nunca e tenido amigos hombres Laine, no sé si usted pueda comprenderme_ digo con cierto nerviosismo y vergüenza.

-lo entiendo perfectamente hija, no te preocupes yo misma iré a llevarte a tu casa, así puedo conocer a tu madre preciosa_ dice y me guiña un ojo. Sonrío y asiento.

-bien bajemos entonces_ digo y me pongo de pie, al hacerlo siento un pequeño mareo, casi caigo al suelo y siento que unos brazos me sostienen, siento una corriente eléctrica en mi espina dorsal, son las manos de Liam que me sostienen, lo sé por su fragancia, ya conozco su olor.

-ya puedes soltarme Liam, solo fue un pequeño mareo al estar tanto tiempo en la cama_ miento. Siento como me suelta, baja su mirada y sale de la habitación, Laine y Lisseth me miran con curiosidad y las dos estallan en carcajadas, se dan una mirada cómplice y salen de la habitación, estas chicas son raras, pienso y también salgo detrás de ellas.

Nos sentamos en el comedor, quedo cerca de Liam, el destino se está empeñando en tenerme cerca de este chico, madre mía, veo como Lisseth y Melanie se dan otra de sus miradas y sonríen, la cena transcurre con normalidad, termino y voy a pararme a llevar mi plato al fregadero cuando siento que alguien me detiene.

-no te preocupes linda, déjame y yo los llevo, espérame en la sala con Lisseth, dejo esto y nos vamos a tu casa ¿de acuerdo?_ pregunta Melanie y yo asiento, me paro de mi asiento y voy rumbo a la sala cuando alguien me detiene por segunda vez.

-oye extraña, ¿porqué no quisiste que te llevara a tu casa?_ pregunta Liam y me siento nerviosa.

-no te quiero cerca de mí Liam, aléjate, no soy tu tipo, tú no eres mi tipo, no tenemos nada en común, ni siquiera sé porqué me detengo a hablarte_ digo, él me mira con cara de confusión, está a punto de hablar cuando escuchamos un carraspeo, miro de donde proviene y es un señor muy elegante que nos observa con curiosidad, habrá escuchado lo que le dije a Liam, hay no que vergüenza.

-buenas noches, veo que tenemos visita_ dice el hombre y vuelvo a mirar con confusión.




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