Fin de las clases

Una vez que el dúo de Alam y Johnny se alejó a su mesa, el grupo continuó con sus risas. Todos, excepto su novia Alejandra, quien miraba con disgusto en sus ojos.

Al ver la mirada que le estaba dando, Mateo supo que estaba enojada con él. Dijo suavemente: "Solo estaba saludando al compañero Rodríguez, no dije nada malo".

Pero Alejandra comenzó a hacer un puchero: “Nunca hablas con él, y ahora mágicamente te dieron ganas de hablar con él, ¿no será por lo que pasó con la Melisa esa? ¿Que todavía te gusta o qué?

Al escuchar las palabras de Alejandra, Mateo se tensó. "Oye, ¿de qué hablas? Melisa solo me gustaba antes, no tuve nada con ella, ahora estoy contigo, ¿no explica eso cómo me siento por ti?"

Alejandra, al escuchar sus palabras, arrugó un poco la nariz y con un pequeño resoplido apartó la mirada de Mateo. "Más te vale que sea así".

Cerca de la mesa de Alam y Johnny, se podían escuchar conversaciones bajas de algunos estudiantes a su alrededor. "Oye, ¿ese no es ese tipo del otro día? Se atrevió a mostrar su cara de nuevo. ¿Siquiera se da cuenta de que es una rana que pensó que podía comer carne de cisne? Su cara debe ser la más gruesa que he visto”.

A medida que los comentarios se disparaban de un lado a otro en rápida sucesión, Johnny casi no pudo soportarlo más. Estaba listo para partir algunos huesos. Pero Alam lo detiene: “Solo déjalo seguir diciendo lo que quiere. Tarde o temprano se olvidarán, no es que sea raro que alguien se le declare a Melisa”.

Pero los ojos de Johnny temblaron un poco por la rabia. “Alam, ¿cómo puedes simplemente sentarte allí y dejar que esos idiotas hablen lo que quieran? ¿No pareces tú mismo?”

Alam toma un sorbo de su bebida de cola mientras le pregunta a Johnny con indiferencia: "¿Por qué debería estar enojado?"

“...” Johnny se quedó sin palabras. Él conocía a Alam desde hace dos años y sabía que era una persona con una mecha corta, que explota ante cualquier provocación. En este momento, no podía entender su comportamiento. Pensándolo un poco, recordó que también era alguien vengativo. No pudo evitar temblar un poco ante eso. Viendo su actitud tranquila y afable ante las burlas y provocaciones de Mateo, pensó para sí mismo: 'Quizás esté planeando algo terrible para ellos'.
Después de volver del descanso, las clases continuaron sin nada raro, excepto que, al igual que en las primeras horas de clases, los profesores que entraron al salón se preguntaron por qué Alam estaba tan silencioso hoy.

Al sonar el timbre que indicaba el final de la última clase del día, Alam se fue rápidamente sin esperar a Johnny. Él sabía que si lo alcanzaba, este le plantearía de nuevo la conversación que tuvieron en la mañana.

Mientras caminaba con pasos rápidos hacia la parada de autobús cercana, seguía pensando en lo que tenía que hacer. Él sabía que, con respecto a sus notas, lo único que tenía que hacer era estudiar mucho y esforzarse para conseguir las notas más altas posibles.

En su mente, el incidente que pasó hoy en el colegio por lo de Melisa ya lo había olvidado por completo. Lo único en su mente era el consuelo de que el examen que hizo hoy tendría una recuperación, así que aún tenía esperanzas.