Se dice que las historias se cuentan a través de los recuerdos, yo aprendí que te lo dice las marcas y manchas de los tenis, la conocí cuando todo era oscuro, yo hui de una realidad que lastimaba mi corazón...
Atraves de la compañía aprendí a leer los silencios que decían mucho, pero nada a la vez, cada expresión de su rostro al ocultar algo y al ser tan transparente, su toque era cálido, pero frío, era como los estados del clima de donde provenía, lo cual me hacía sentir amor y paz, logra transmitir con solo sonreír y de amar a un a pesar de las heridas que no solo vivían en su corazón también en su piel las cuales tapaban los tatuajes.
Siempre fue fresca como la lluvisna, fría como el aire que te hace saber que eres causa de buenos tiempos, neblina al tener miles de secretos que solo ella conocía y temperatura neutral al ser tan imparcial al no tener bandos pero siendo justa.
Pero... ¿en qué momento el corazón empezó a sentir algo diferente y dejo de mirar con admiración a verla con amor?
Te lo dedico a ti ladrona de risas, porque todos merecemos una historia de amor dentro de la literatura...
Próximamente CAPÍTULO 1
Nos miramos pronto...