Hoy...
No pude identificar que susurraba mi corazón en cada lagrima que caía tras ver tu foto.
Supongo que era dolor y decepción, o simplemente que extraño tu calor.
Hoy mis emociones se escondieron, y cuando sentí hallarlas llegaste tú y derrumbaste todas las barreras, hablándome de esa forma tan sutil y despiadada que solo tú te puedes permitir...