A solas
Una vez que Leah calmó los ánimos entre Kellen y Noah, decidió que debían comer algo, pues ya era más de media tarde, así que se llevó a Kellen a la cocina con ella para evitar problemas mientras que Noah abandonó la cabaña, según dijo, porque necesitaba respirar, de manera que Virgil y Lil quedaron solos en el pequeño salón.
- Oye, hay un montón de cosas que no sé y me estaba preguntando si tú podrías… bueno, ya sabes… -- estaba diciendo en forma atropellada y Virgil se guardó muy bien de reír
- ¿Qué quieres saber? -- preguntó sentándose lo más alejado posible para poder resistir el impulso de besarla
- Bueeenooo… -- y en realidad no sabía por dónde comenzar -- Noah dijo que los ángeles consideran a los hijos de los nephilim una abominación ¿Por qué?
- En principio la expulsión se produjo por… una diferencia de criterio, pero una vez consumada nos dejaron en paz. Sin embargo, más adelante las cosas se complicaron cuando los nephilim comenzaron a procrear con las humanas, algo más bien inevitable si se tiene en cuenta que ahora poseíamos las características de los humanos, pero ellos no lo vieron así y comenzaron a perseguir y a matar a todos los nuevos nephilim, pues entre los primeros caídos, los que lo hicieron luego, y los que estaban naciendo, consideraron que nuestro número estaba aumentando mucho volviéndose algo muy inconveniente
- Mmmm… ¿Y tú… cómo cuántos hijos tienes? -- preguntó y él sonrió
- ¿Cuántos crees? -- preguntó a su vez y ella arrugó el entrecejo
- Si supiera no te estaría preguntando
- Estás celosa
- ¡Ja! Sí claro, soñar es gratis, amigo -- le dijo -- ¿Sabes qué? Olvídalo, no me interesa -- agregó -- Mejor dime qué tan viejo eres
- Bastante, supongo
- ¿Eres de los primeros doscientos, no?
- Sí -- contestó en tono neutro
- Y…
- Leah y Noah también, al igual que Samael, pero Kellen no -- dijo adelantándose a su pregunta
- ¿Él es hijo de un nephilim?
- No, también es uno de los caídos, solo que lo hizo mucho después
- Dijeron que papá no se ha portado digamos que muy bien, aliándose a Satán, pero es confuso, porque, aunque ustedes no parecen malos, se nos enseña que una vez que fueron expulsados se convirtieron en demonios, y sí, ya entendí lo que me explicaste, pero si se piensa eso debe haber una razón ¿no?
- La hay y tú misma la acabas de exponer, Samael no es el único que va por ahí haciendo daño y ocasionando caos, y numéricamente hablando, son más los que han adoptado ese camino que los que no. No estoy diciendo que seamos mejores que ellos, porque esencialmente somos todos iguales, ya que iguales fuimos creados, la diferencia radica en las decisiones que tomamos. Algunos y como te dijo Noah, se apartaron casi por completo y no hacen ni bien ni mal, algo que respeto, aunque no comparto, pues personalmente pienso que podrían hacer algún bien y están pecando por omisión; y en el caso de la otra porción, lo que intentamos es mantener algo de orden en el caos.
- Entonces son buenos
- En mi opinión es un error clasificar a las personas en buenas o malas, todos cometemos errores y nosotros hemos cometido muchos que de una manera u otra han dañado a alguien.
- ¿A qué se dedica exactamente un nephilim?
- Eso depende de lo que ya te dije
- Sí, pero por ejemplo ustedes tres, que son los únicos que conozco -- insistió ella y él sonrió
- Tus matemáticas fallan, nena -- le dijo -- pues conoces a varios que llevan una vida relativamente normal como Samael o Kellen, pero ampliando y digamos que en sus ratos libres, individuos como Kellen o tu otro conocido, Anrdras -- aclaró -- suelen vivir entre la población juvenil, porque es donde mejor pueden encajar, ambos tienen habilidades afines, pero lamento decir que Andras, por ejemplo, vive entre viciosos.
- ¿Pero por qué?
- Es una cuestión de elección, todos los nephilims pueden escoger qué hacer, pero algunos se decantan por lo negativo. En el caso de Leah, es un ángel de concordia, y Noah es un ángel de salud
- ¿Y tú? -- preguntó -- Espera no me lo digas, eres un ángel de inteligencia -- dijo y él sonrió
- De conocimiento -- aclaró
- Bueno, bastante cerca, pero también debes serlo del arte, porque te vi y te escuché tocar la guitarra, y no lo hacías de manera normal -- dijo y él elevó una ceja -- ya sabes, lo hacías demasiado bien
- Gracias, creo -- dijo no muy seguro por la expresión que tenía ella
- ¿Ayudas a los artistas? -- preguntó
- Un poco de ayuda no está mal ¿no?
- Pues eso es según, si no, pregúntale a Fausto, a Dorian Grey…
- Nena
- Ya sé, es solo literatura, ¿Pero qué me dices de Niccolo Paganini? Lo llamaban el violinista del diablo
- La ignorancia es libre
- En fin, el asunto es que tienes competencia, porque Mefistófeles, Satanás, Lucifer, el diablo o cualquiera sea la versión correcta de su nombre, parece un sujeto muy activo en esa área, aunque cobra los favores con altos intereses ¿no?