La vida de una modelo no es nada fácil, someterse a dietas, cuidarse bien su piel y todo lo que conlleva a tener un buen físico, lo que implicaba estar un par de horas metida en un gimnasio todos los días, pero eso a Sam no le importaba, a ella le apasionaba eso y estar posando frente a una cámara la hacía sentir bien, aunque ella también amaba tomarlas; le encantaba la fotografía y mas si era en lugares naturales, en realidad le parecía una obra de arte ver a chicas -o a ella misma- capturadas posando en lugares así y es por eso que desde niña había decidido mudarse para Colombia, pues aparte de que tenía descendencia de allá, era uno de los países con mas biodiversidad del mundo, donde podría tener mucha naturaleza a su alcance y así lo hizo, desde los doce años que empezó su profesión hasta ahora vivió con sus abuelos allí, gracias a que sus padres tenían muy buena economía pudo contactar una agencia y hacerse modelo desde temprana edad. Aunque al principio sólo fuera la imagen de propagandas para niños, poco a poco fue mostrando su habilidad para las cámaras y comenzó a ser la imagen de importantes marcas de ropa para adolescentes en ese país, gracias a eso tenía un generoso sueldo con el que pudo costear sus necesidades y no ser una carga para sus abuelos mientras vivía allí, logró ganarse una beca en la universidad de California y esa era la razón del porqué ahora estaba empacando sus maletas, mañana al medio día salía su vuelo para LA y tenía que tener todo listo.