Capitulo XLIV: Jaque Mate

SUSAN

Abro mis ojos con demasiada dificultad ya que estuvimos casi toda la noche en vela, al abrir mis ojos y enfocarme en donde estaba veo unos ojos mirándome con atención, Logan se acerca con rapidez para estampar sus labios con los míos, se separa con dificultad.

-Buenos días – dice sonriéndome con ternura, lo imito acercándome para aferrarme en su pecho, se acomoda en mi cuello y empieza a besar cada parte delicada de ahí.

-Logan basta – digo jadeando, sentirlo me hace volar, me hace caso omiso y sigue con su tarea de torturarme.

-Es que no lo puedo evitar – dice con voz ronca atrayéndome, pongo mi mano en sus labios para que pare - ¿Qué pasa?

-Lucas se despertara – le digo y sonríe maliciosos cuando se levanta de la cama, camina desnudo hacia a mi lado, mi corazón late desprevenidamente por lo que sucederá, me quita las sabanas de encima y me levanta cargándome con sus brazos.

-Entonces será mejor que nos duchemos rápido – dice encaminándose al baño, al entrar se acerca hasta donde está la regadera y me baja con cuidado, le sonrió coqueta mientras abro la perilla de la regadera haciendo que el agua caiga en nuestros cuerpos, nos mantenemos cerca disfrutado de nuestra cercanía.

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Me siento junto Alaska para escuchar las ideas de cada uno, todos están aquí sin excepción, hasta mi amiga Kenia se encuentra ahí. Lucas está en medio jugando con unos juguetes mientras que Logan está parado hablando con Tobías y Mark sobre una desventaja que puede ver, realmente ahorita no entiendo nada pues solo pienso en ese hombre frente a mí que me tiene loca.

-¿Me estas escuchando Susan? – pregunta Alaska a mi lado con una sonrisa de lado.

-No – respondo sincera pues estaba pensando mucho.

-Ya vi que no – dice riéndose – y dices que yo soy la que me he vuelto loca de amor.

-Es diferente – digo guiñándole el ojo.

-¿En qué sentido? – pregunta enarcando una ceja.

-Porque tú eras la que me aconsejaba para no caer y ahora tu estas en la misma posición – digo retándola, las dos nos ponemos a reír.

-Buen punto – dice poniendo su puño para que yo lo choque con él, en seguida lo hago.

-Bien, debemos discutir sobre un nuevo plan para detener a Carlota – dice Logan cruzado de brazos, suspiro al ver esos brazos con unos músculos.

-Bueno, gracias a Susan que mato a nuestra última oportunidad – dice Brany con malevocia, solo sonrió evitando su mirada – podríamos hallar otro punto débil de ella.

-Perfecto – digo levantándome del asiento – regreso en unos segundos.

-¿A dónde vas? – me pregunta Logan pero no le respondo cuando hago una dilexia invocando a Carlota, esto parece único, saber que ahora soy yo quien la llamo, Carlota aparece.

-Wao creí que no me llamarías nunca – dice sonriéndome con descaro.

-Si ni yo, solo quería verte – digo con mentira.

-Eres mentirosa Susan – dice frunciendo el ceño – cuando te conviene vienes a mí y sin duda es para preguntarme algo.

-¿Asi que lo sabes? – pregunto sorprendida pero no lo demuestro.

-Es poco saberlo – responde sonriente – para que lo sepas yo no tengo ninguna debilidad.

-Que raro porque todos lo tenemos – digo cuando paso a su lado – ya que tu hija está muerta sin duda era tu única debilidad.

Abre los ojos como platos al escuchar lo que dije, veo como empuña sus manos y trata de calmar su enojo y tristeza que la invade en este momento.

-Tu tipo de venganza es patética de emprender – dice fingiendo una sonrisa – pues tu dolor de tu hija fue más fuerte y crees que con la perdida de mi… Celeste me tendrás de rodillas llorando.

-Claro que no, el círculo familiar nunca te ha importado – digo con rodeos de palabras pues mi plan está empezando.

-El circulo no es de poner en esta situación – dice enojada y parece que le di al tiro, me incorporo poniéndome en cuclillas en el suelo – sin duda tu gran debilidad es tu hijo junto a Logan.

-Ni yo estoy segura de ello – miento mirando el suelo, paso mi mano en la tierra y empiezo a dar círculos en ella – no creo poder resistir en una guerra entre fuego.

-¡El fuego no tiene por qué existir en esta guerra! – Exclama enojada, sus ojos se ponen rojos y veo una clase de temor en ellos – aunque estamos hechas de ello, hay formas de provocarlo.

-Creo que nos estamos desviando del tema – digo levantándome del suelo, me limpio las manos y con una de ellas señalo el suelo – ahí tienes tu respuesta a mi debilidad.

Ella en seguida voltea a ver al suelo y se empieza a reír al ver que puse “Tu”

-¿En serio? – Pregunta riéndose - ¿tienes miedo de que me haga daño yo misma?

-No – niego lo que dice – tengo miedo de que de repente mis sentidos enloquezca a tal grado de ser igual a ti y convertirme en una bestia despiadada.

Con eso ella se queda paralizada pero llena de coraje, solo le sonrió haciéndole un gesto con la mano despidiéndome, ella solo finge estar bien después de todo lo que le dije y desaparece luego de haber terminado la dilexia que provoque.

Abro los ojos y me encuentro con todos, Logan me tiene sujeta de la cintura en el sofá, al verme me sonríe de manera dulce, también lo hago cuando me incorporo poniéndome bien el sofá.

-¿Estas bien? – me pregunta Alaska sentándome a la par mía, solo asiento sonriente pues conseguí lo que quería.

-Mejor que nunca – digo cuando me levanto – hable con Carlota.

-¿Asi y que te dijo? – pregunta incrédula Brany, parece que está loca sigue con su actitud rara.

-Muchas cosas de lo que tu brasier no puede aguantar – digo haciendo que algunos se rían pero en seguida Brany los fulmina con la mirada – hablo bastante y todo lo que relato me ayudo demasiado, ¿conocen el miedo a las palabras?