.III.

-Fiesta de bienvenida-

Fue una sensación bastante extraña, sentí como si nos hubiéramos conectado.

-Entonces, señorita Ellen ¿Aceptas ir a la fiesta conmigo?- hablo Dereck sacándome de mi transe.

-Si... si está bien, vayamos- murmure

-Perfecto, supongo que antes de eso, quieres ir a cambiarte ¿No es así?- se rio

-Si, y no es gracioso tomando en cuenta que fuiste tú el que me dejo así-

-Bueno vamos- dijo aun riendo.

Dereck empezó a caminar, cuando quise dar un paso, la barrera invisible que él había puesto antes, me lo impidió. En realidad puedo derribarla yo misma pero es mas divertido cuando no muestras todo tu poder.

-¿Por qué no vienes?- me volteo a ver desde unos metros delante de mí.

-Lo haría si me lo permitieras- me vio con cara de confusión y después pareció recordar.

-Disculpa, lo olvide- dijo e hizo un movimiento con su mano, inmediatamente pude caminar hacia delante de nuevo.

-Gracias- mencione con sarcasmo.

Llegamos a las escaleras, me dirigí a mi habitación mientras el me esperaba ahí. Al entrar al cuarto había una chica alta, pelirroja y muy delgada sentada en una de las camas, estaba leyendo un libro.

-Hola- dijo cuando me vio entrar.

-Hola, yo soy...-

-Ellen, princesa de Zendala, ¿Verdad?- me interrumpió, dejo su libro en la cama y se acercó a mí. -Descuida, Anne me lo dijo-

-¿Eres amiga de Anne? ¿Cómo te llamas?-

-Si, fue mi compañera de habitación el año pasado, mi nombre es Aurora, soy una elegida de tierra-

-Bueno, eso explica la decoración del cuarto- dije y ella sonrió. -¿Cada año cambian de compañero?- pregunte con curiosidad.

-Si, según el director es una manera de convivir con más personas- volvió a sentarse en su cama.

-Bueno tal vez es una buena idea-

-Talvez- hubo un pequeño silencio. -Por cierto ¿Qué es esa enorme mancha roja de tu blusa?- rio

-Bueno digamos que choque con un jugo de...- olí mi blusa. -Al parecer de frambuesa- dije mientras reía

-Uy, bueno dudo mucho que esa mancha se quite-

-No importa... En fin me tengo que cambiar- murmure mientras me acerque a mi armario y busque una blusa nueva.

-¿Iras a la fiesta de los armados?- menciono y me gire para verla.

-Si, justo un chico que se llama Dereck me esta está esperando en las escaleras- le dije mientras iba al baño para cambiarme.

-¿Conoces a Dereck Wilson?- pregunto con tono sorprendente

-¿Cómo sabes que se apellida Wilson?- conteste saliendo del baño ya con otra blusa puesta.

-Bueno no es que haya muchos Dereck en la academia, además Wilson es muy popular aquí, es el príncipe de Undinia, ¿No te lo dijo?- pude notar un pequeño enojo en su voz, su rostro y personalidad cambio.

-No, en realidad, no hace más de 30 minutos que lo conozco- respondí sinceramente.

-Así que iras con una persona que a penas acabas de conocer a una fiesta, ¿Eh?- menciono despectivamente.

-Se lo que estás pensando, puedo leer tu mente, y estoy aquí hace apenas unas horas, no conozco a nadie, tengo derecho a hacer amigos- escupí

-Oye tranquila, lo siento, aunque no porque tu puedas leer mentes significa que puedas leer la mía- gruño con enojo

-Tengo derecho si opinas de mi- con eso salí de la habitación y fui a buscar a Dereck.

Iba bajando las escaleras cuando creí oír la voz de Dereck hablando con alguien más, sin embargo cuando llegue con él estaba solo.

-Hola, estoy lista- murmure mientras me acercaba a el.

-¿Te cambiaste de blusa 20 veces? O ¿Por qué tardaste tanto?- dijo mientras bajábamos las escaleras.

-Oh, no ¿De verdad crees que me cambiaria varias veces por ti? ¿Qué crees? ¿Qué intento impresionarte?-

-Wow Wow, tranquila ¿Por qué creería que intentas impresionarme?- paro de caminar. -O es que ¿Intentas impresionarme?- aclaro su garganta.

-Vaya Príncipe tienes el ego muy alto- me detuve frente a él.

-¿Quién te dijo que era un príncipe?- dijo con confusión

-Amm, la chica con la que comparto habitación, se llama Aurora es una elegida de la tierra. ¿La conoces?- pregunte.

-Mmm, ¿Aurora?- pensó. -Tal vez, puede que me la haya topado un par de veces en los pasillos-

-Okey- respondí y comenzamos a caminar, salimos de la escuela, pasamos por el bosque dentro de la barrera y llegamos a un lugar que parecía un mini castillo, en los libros de la academia Imax por lo que había leído este es el refugio que se utilizaría si hubiera un ataque de Endígos. Nos paramos justo en las puertas del portón.

-Bueno aquí es donde se hacen todas las fiestas extraescolares y también esta equipado para ser un refugio si algo llegara a pasar- murmuro. -Si quieres organizar una fiesta aquí, tienes que pedir permiso antes y solo puedes hacerla los fin de semana o días libres.

¿Por qué Anne no me trajo aquí en el recorrido de la mañana? De igual manera no le iba a decir eso a Dereck ya que haría preguntas y no tengo planes de decirle que soy una princesa.

-¿A quien se supone que debo pedirle permiso si quiero hacer una fiesta?- dije mientras comenzamos a caminar por el pequeño patio principal.

-Bueno a Emilia Da Nilton, es la princesa de Arbela, de hecho es ella, la pelinegra de vestido rojo- dijo y voltee a ver donde el, y me encontré a la chica con la que tope al llegar.

-Oh bueno- murmure y me gire para verlo a él de nuevo.

-¿Qué pasa...- una voz lo interrumpió.

-Dereck, que bueno que ya llegaste- dijo Emilia saludándolo con un beso en cada mejilla.

-Hola Emilia, ¿Qué tal todo?- pregunto Dereck.

-Todo el día a sido excelente, a excepción de que hace unas horas una niñita me tiro un jugo de manzana encima, arruino mi conjunto- lloriqueo y luego se giro para verme como si nunca hubiera notado mi presencia. -Bueno Dereck esta es la niñita de la que te hable, ¿También choco contigo?-