Cap 89 una familia arrepentida

Luis Mejía

Cap 89 una familia arrepentida 

--- Al ver la resp tan segura que estaba dando su hija respiro profundo aun que quería creer en sus palabras, no podía, no después de haber visto lo enojado que estaba Alejandro; ¡solo espero que sea cierto porque de lo contrario si nuestra familia cae en desgracia será tu culpa. Raquel brinco sobre su puesto en el sofá aturdida cuestiono ¿porque sería mi culpa? además de donde sacaste eso padre. Elifonzo a pesar de la advertencia de Alejandro no pudo guardarse ese secreto no mientras su hija estuviera involucrada. Alejandro me lo dijo cuando fui reclamar por lo sucedido entre tú y su empleada, relato todo lo que le había pasado……… continuando con el relato anterior de cómo fue drogado y abuso de su esposa, la mujer por la cual enteraría a su familia si ella, no lo perdonaba. 
--- Tras escuchar el relato madre e hija quedaron desconcertada sobretodo Raquel, quien de inmediato comprendió su error, nunca imagino que la mujer a la cual había insultado golpeado y humillado, había sido la que durmió con el hombre que amaba; al ver que no tenía escapatoria se derrumbó, no había forma de negarlo, la familia ludinski no cometía errores y si ellos decían que ella había sido la mujer con la que durmió esa noche, era porque así había sido por lo tanto también averiguaron que ella, era la culpable; por eso no la aceptaron como la pareja de Alejandro a pesa de todos los intentos por acercarse sin éxito y Alexandra la había tratado con dureza durante su visita en la discoteca night love. 
--- Asustada por las represarías mirando a su padre. Suplico ¡Perdóname padre! 
--- ¡No quería causar problemas para la familia, nunca imagine que esto pasaría! 
--- ¡Nunca quise hacerle daño! con lo dicho Marta la tomo por los brazos sacudiéndola, ¿cómo pudiste Raquel? 
--- ¿cómo pudiste hacer eso, acaso te enseñamos hacer este tipo de cosas? Nuria, estaba asustada aunque en un principio trato de descubrir cualquier cosa para poder separar a la pareja, ahora era diferente, comprendió porque ninguno de sus contactos y investigaciones, no dieron frutos, todo era obra de la familia ludinski, retrocediendo, pronto fue golpeada por la realidad con una risa irónica se burlaba de ella misma, había tratado de hacer daño a la mujer que con su decisión tenía el futuro de su familia en sus manos callo sentada en el sofá aturdida preg ¿Qué haremos ahora? 
--- Elifonzo por su parte llevo sus manos a su cabeza, inclinándose mientras tiraba de su cabello desilusionado, sabía que esto no se quedaría así, ahora su vida estatus y comodidades dependían de la decisión de una joven a la cual su hija le había hecho daño. 
--- Aunque el hombre había hablado duramente delante de Alejandro, también tenía principios odiaba los actos deshonrosos; no podía creer que su hija, aun sabiendo lo mucho que despreciaba que los hombres se aprovecharan de las mujeres, por considerarlas el sexo débil, pero al mismo tiempo, lo más delicado y hermoso que el mundo había creado, nunca pudo pensar que su hija se convertiría en lo que más despreciaba del sexo masculino, aquellos que abusaban de su estatus, poder y dinero. Habiendo reflexionado en medio de su desilusión rabia se calmó pensó con cabeza fría y tomo una decisión: si se hundiría en la desgracia, lo aria con la cabeza en alto. Luego de reflexionar internamente, exclamo ¡prepárate para salir! ordeno a su hija, quien que atónita comenzando a temblar por el miedo que sintió al ver la mirada seria y la voz llena de resolución de su padre ¿a dónde vamos? preg; ¡a solucionar el problema en el que te metiste! 
--- Mientras todo esto sucedía en la ciudad, en la casa de campo María José permaneció enserada en lo que restaba del día y parte del día siguiente, no fue hasta que una de las muchachas del servicio fue a llamarla para informar que había llegado la hora de regresar, que ella se levantó envuelta en un embrollo de pensamiento sobre lo que debería hacer a partir de ese momento. Después de haber lavado su rostro y haber recogido sus cosas salió en dirección al auto al salir era esperada por una de las empleadas del servicio quien expresaba una mirada de nostalgia, ese hecho aunque no lo pareciera la golpeo en su corazón, durante los días que habían convivido, pudo sentir el cariño que le tenían, mientras sus miradas se cruzaron por un instante, la empleada estiro su mano. Permitame señora, le ayudare con su equipaje para tomar su maleta quien no se negó, mientras caminaba justo detrás de ella una idea cruzo por su mente reflexiono “no poder escapar de él” se detuvo preguntando. 
--- ¿Cuál es tu nombre? ¡Neli! Respondió la chica. 
--- ¿Neli, Soy la dueña de esta cabaña? Continuo cuestionando con aprensión, no quería levantar sospechas de sus intenciones hasta no estar segura que la chiva le seria fiel hasta la muerte. Esa preg dejo conmocionada a la muchacha, pero de inmediato comprendió sus intenciones, quería comprobar si su palabra era absoluta. 
--- ¡Sí! respondió luego de volverse para mirarla fijamente a los ojos; al escuchar su resp camino hasta estar cerca, lo suficiente para que solo ella pudiera oírla. ¡Entonces quiero que agás algo por mí! saco una tarjeta de su bolso la entrego a la chica quien no podía creer lo que estaba pasando; are lo que me pida señora será un placer para mi servirle, con eso dicho, susurró a su oído……….. Finalizando espera mí llamada. 
--- Después de bajar las escaleras se encontró con los guardias y el resto del personal parados a cada lado mientras se dirija al coche inclinaron la cabeza exclamando ¡fue un placer atenderla mi señora! Con eso uno de los guardia abrió la puerta del auto donde ya estaba sentado Fran antes de ingresar giro su cuerpo viendo los a todos se inclinó diciendo ¡gracias por su hospitalidad! 
--- En todo el camino ninguno de los dos pronunció palabra, solo se dedicaron a mirar el camino durante horas, sin siquiera mirarse el uno al otro. María José no savia que sería de ella, de ahora en adelante ¿qué debo hacer? se preguntaba mirando disimuladamente al hombre a su lado, quien la había tratado como un padre y que la había cuidado durante años, estaba confundida diciéndose 
--- ¿Seré capaz de seguir adelante como si nada? 
--- ¿Seré capas de mirarlo sin siquiera sentir odio por lo sucedido? 
--- “No”, ¿qué estoy pensando? su respiración se aceleró; casi perdiendo el control de sus emociones, buscando dejar de pensar desvió la mirada para mirar por la ventana.