CHAPITRE 10...
En la enorme ciudad que nunca duerme, Nueva York, habían alrededor de cuatro millones de personas, las cuales tenían un solo objetivo: trabajar para ganar dinero.
Y el esfuerzo que esta persona ejercía se notaba en la manera de vivir, en cuanto tenia para comer, en cuanta ropa podía comprar... y cuánto podría durar en esta ciudad tan ajetreada.
Y... en esta enorme ciudad... se escuchaba el rumor de cierto Príncipe Empresario, que, con solo charlar con unos cuantos ejecutivos, robaba las miradas y la atención de todos, parecía que el Dios mismo lo ayudaba en sus éxitos, uno tras otro teniendo tan solo dieciocho años, aquel chico hacia que el mundo estuviera a su disposición, porque, su manera de ser era cautivadora y amable, sin necesidad de gritar o ejercer votos falsos.
-Espero haber respondido todas las preguntas de hoy-
Y era el único chico al que realmente quería, era el único al que realmente admiraba, hacer, todo esto por su padre, para darle honor a él, para darle las gracias de haberlo mantenido todo este tiempo.
Baje la mirada y pare de golpe sintiendo como me hacía diminuta frente a él, como mi piel se erizaba de tan solo pensar en todo lo que había pasado, en sus contratiempos en su personalidad y... aun así era exitoso.
-Las has respondido todas, gracias-
Dije finalmente, sonriendo débilmente y oprimiendo mi carpeta a mi pecho.
-Espero volver a verte-
-Lo harás, aún no he terminado de resolver mi entrevista-
Una luz se asomó en la esquina de mi corazón y tímidamente entro en el deslumbrándolo con fulgor.
Y... cabía decir que reconocía esa pequeña luz, reconocía esa manera de ser, esa manera tímida de entrar, Alexa había vuelto, la pequeña y tímida del instituto Jackson.
La que en un principio tuvo la fortuna de conocer a Ashton Clark.
-Tienes una excelente vida Ashton, me alegra, que... estés bien en este mundo lleno de ajetreos y tranques, sé que has hecho un gran esfuerzo hasta aquí, de verdad, lo sé, estoy... feliz-
Chasquee la lengua y sonríe tímida girándome finalmente hacia él.
-Eres el mejor chico que he conocido en la historia, Ashton Clark, tu padre debe de estar igual de orgulloso-
Pero... aunque mis labios dijeran eso, su mirada no dejaba de ser fría y quisquillosa en mi alma como si estuviera buscando algo en especial.
Como si... estuviera a la espera de algo más.
Sus ojos tormentosos dibujaban a simple vista dos signos de interrogación, con su ceño ligeramente fruncido y sus labios fruncidos, sus manos metidas en sus bolsillos delanteros, dejando ver una perfecta postura de él y su cabello ligeramente despeinado... Este chico casi estaba listo para una sección de fotografías, ¿Qué decía? Estaba más que listo para una sesión fotográfica.
Pero en cuanto sonrió de lado y ablando su mirada, algo me dijo que había hecho algo...
- ¿sucede algo? -
Cuestiono con una sonrisa blanca.
Y en aquel momento, me di cuenta que había mantenido mi labio inferior ligeramente mordido y con una sonrisa de lado, había tenido la vaga fantasía de querer abrazarle.
Pestañee unas cuantas veces y baje la cabeza, sintiendo el rubor en mis mejillas.
-Solo... eres... genial Clark, toda tu vida supiste tu objetivo, tu futuro-
Y verdaderamente le tenía envidia, envidia de su vida, sabía que tenía que hacer, siempre lo supo, no tuvo que tomar decisiones, nunca.
-Mi objetivo eh? ...-
Sonrió de lado y bajo su mirada, con una risa seca, saco una mano de su bolsillo y alineo una columna de diferentes bolígrafos.
-supongo que sí-
Realizo una mueca de manera vaga e intento decirme algo, pero, en cuanto volvió su mirada a mí, cerro su boca y volvió a sonreír de lado, derrotado, finalmente y bajo su mirada.
- ¿supones? -
Cuestione con una ceja alzada.
-es decir... logre un objetivo, vamos... todos en algún momento lo hacemos-
Hizo un abucheo y tanteo en caminar hacia mí, como si cada paso, de verdad contara, como si cada paso fuera uno de su vida.
-pero, no tan rápido-
Indique con una ceja alzada.
-Alexa, logre uno de muchos objetivos, lo sé, pero... ¿qué hay de mis sueños? Que hay de lo que verdaderamente quiero-
Un respingo nuevamente a mi corazón, me hizo pensar que debería ir a un hospital y revisar mi corazón, porque siempre cuando me encontraba con él, mi corazón sufría mucho, demasiado... de aceleraciones o paro de repente, eso era demasiado, la fiebre llegaba de repente sin síntomas, solo la temperatura alta, mis movimientos siempre eran nerviosos, el... siempre ocasionaba algo en mí.
- ¿Y qué es lo que quieres? -
Exhale con bajeza y lo mire desde una perfectiva baja.
-Yo...-
La puerta tras de mí se abrió y mis esperanzas de un momento verdaderamente intimo con Ashton acabaron.
-Señor Clark, el empresario Benson está a la línea-
Ashton respiro hondo y cerro sus ojos agarrando el puente de su nariz, como si enserio esta hubiera interrumpido algo verdaderamente importante o... solo era el cansancio.