Capítulo 11: Una Cura y Una Muerte, Sniy.

Después de entrar a su casa, Sniy miro a su madre tirada en el suelo. Había corrido rápidamente a levantarla, estaba inconsciente. Hizo el intento de cargarla, pero no pudo, así que salió en busca de ayuda. Algunos vecinos lo miraron de una manera muy rara, unos se acercaron a él para saber que era lo que le pasaba, por alguna extraña razón estaba ahí Midhir, uno de los gemelos de Aglar. A todos les dijo que su madre estaba muy mal, cuando escucho esto Midhir, se metió muy rápido a la casa de Sniy, la cargo con la ayuda de Yunt que llego cuando todos ya estaban adentro consolando a Sniy.

       Llevaron a Daily al sillón que estaba cerca. Yunt la examino. Midhir había ido a la cocina para checar si no había yerbas para poder despertarla. Yunt le dijo a Midhir que le llegara un trapo mojado y que buscara jengibre e hiciera un té. Una de las vecinas que estaba cerca, fue a la cocina por el trapo con agua y otras ayudaron a Midhir haciendo el té. 

        —Tranquilo Sniy, tu madre pronto estará bien —dijo Yunt al ver que Sniy lloraba—. Sonríe, a tu madre no le gustaría verte triste. Pronto despertará, por ahora la dejaremos en el sillón, más tarde la subiremos a su cama. 

       Pocos minutos después, Daily despertó. Miro a su alrededor, ahí estaban Sniy, Yunt y Midhir cuidándola. Pregunto qué era lo que sucedía.  Midhir comenzó a explicarle todo lo sucedido. Sniy estaba casi dormido, el llorar lo hizo fatigarse mucho. Yunt le dio el té de jengibre. Daily se sentó y luego bebió el té. Quiso abrazar a Sniy, pero no pudo moverse. Pasaron varios minutos, Sniy por fin se despertó, miro a su madre y corrió a abrazarla. Lloro cuando estaba en los brazos de su madre.

        —Pensé que ya no te despertarías, que me dejarías como papá —dijo Sniy entre llantos. 

        —Nunca te dejaría solo mi niño, siempre estaré contigo —dijo Daily.

        Los días siguientes, Sniy estuvo cuidando a su madre. Paso dos semanas ausente de su cargo como ayudante del Líder, lo que provoco ciertas perdidas para el reino. Galvan trataba de comprenderlo, pero sin la ayuda de él, muchas cosas se estaban perdiendo. A pesar de todos los esfuerzos de Galvan, no podía hacer todo solo, necesitaba a Sniy. 

        Al día siguiente que Galvan fue a exigirle a Sniy que regresara a su puesto, Sniy fue al muelle. Espero a los barcos pesqueros y los que traían mercancía de Calir. Cuando llegaron, los reviso a todos con mucho detalle. Pero faltaba un barco, él trataba de recordar que barco era el que faltaba. Hasta que camino por varios metros, vio el lugar al que siempre esperaba un barco para irse a Ravenlyn a entrenar. Sedna.

         «—¿Por qué aún no ha llegado?» pensó.

       Uno de los pesqueros se acercó a él y le dijo que Sedna se había quedo en los volcanes Zagre. Sniy no pregunto más, se dirigió a Therril para checar algunas cosas sobre la cosecha. Todo comenzaba a regresar a la normalidad. Eso era lo que creía Galvan. 

       Los días pasaron, Sniy cuidaba su madre cuando podía y los días que descansaba.  Su madre seguía con fiebre, a veces le daba de tomar té de jengibre. Algunas medicinas caseras que Daily le iba indicando como prepararlas. 

       Una semana después, Daily tuvo una fiebre espantosa, que la tuvieron que llevar con un doctor. Él la examino, analizo los síntomas y demás cosas. Al final, a Sniy le aterró mucho lo que le dijo el doctor. 

       —Tu madre tiene la fiebre del cuervo, si, la misma enfermedad que tu padre tuvo —dijo el doctor—, lamento decirlo, hiciste todo lo que tenías a tu alcance, pero la fiebre es muy rara y fuerte contra todo tipo de remedio. También sabes que no tiene cura. 

        Sniy se quedó plasmado, no sabía qué decir. Pensó en su madre, ¿por qué esto tenía que ocurrir? ¿Por qué a él y a su familia? Quiso llorar, perdería a su madre.

      —No quiero que ella muera, haga todo lo posible por salvarla —Sniy comenzó a llorar, el doctor solo lo abrazo. 

        —Ve con ella, ahora mismo te necesita —lo tomo de los hombros—. Cuídala bien, calculo que aún vivirá un año más. Tu madre es fuerte y posiblemente viva más años.

      Sniy corrió hacia la habitación, abrazo muy fuerte a Daily. Le dijo lo mucho que la quería. 

      Pocos minutos después llegaron Galvan y Kilar. Hablaron con Sniy y Daily. Trataron de animar a Sniy. Los días siguientes, Sniy se la pasaba la mayor parte del día con su madre, a pesar de que ella le decía que fuera a trabajar. Incluso la noticia se esparció por todo el continente. Los gemelos Colt y Falith fueron a la casa de Sniy para ver cómo estaba Daily, aunque Falith solo iba por Sniy. 

        Todos colaboraron para que Sniy tuviera aquella sonrisa que hacía reír a muchos. Una semana después, Sniy se puso a investigar sobre la fiebre el cuervo. Busco por toda la biblioteca libros que le podrían servir, de tanto buscar, llego a una sección rara, donde había muchos libros antiguos, entre ellos encontró uno que contenía las recetas de algunos médicos que buscaban encontrar la cura para la fiebre del cuervo. 

       Leyó muy poco del libro, llego a una parte que, para él, era importante. La había escrito el último de los médicos que busco la cura:

       "He llegado a la conclusión que el verdadero causante por el cual los médicos que han buscado la cura, mueren por seguir los mismos pasos que los demás, me incluyo. Al parecer agregar parte de la pluma y sangre de cuervo, hace una reacción, el cual es un veneno para nuestro cuerpo. En estos momentos estoy muriendo, si llegan a hacer la receta, por favor, hagan lo posible por sobrevivir. No usen la pluma y la sangre"