Beverly Calvert
Estaba terminando de revisar si los moretones que tenia se notaban, Lea se ha estado encargando de cubrirlos para que no los noten y comiencen a hacer preguntas.
— Bueno— digo al contestar la llamada que entraba a mi celular
— ¿estas lista?
— si, ¿ya estas aquí?— le pregunto tomando mi mochila.
— si— contesta el.
— okey, ya bajo— digo y termino la llamada.
Hoy mi querido novio repentinamente me ha invitado a salir, el no muy seguido hace eso, el sale con amigos y todo pero yo siempre me la tengo que pasar encerrada solo porque el lo dice; así que no iba a desaprovechar la oportunidad y acepté.
— ya me voy— le aviso a mi madre antes de salir.
— espera.
— ¿que pasa?
— ¿ya te tomaste la medicina?
— no, voy a tomarmela— las dos vamos hacia la cocina, al llegar a esta ella me da las pastillas y yo me las tomo.
— listo, ahora si me voy.
Salgo de la casa pero antes de llegar a donde esta Mateo me saco las pastillas de la boca y las guardo en mi mochila, ya tiene un tiempo que ya no las tomo; solamente cuando no tengo opción en serio si las tomo pero de ahi en fuera no. es algo raro porque segun mamá si no tomo las pastillas puedo enfermar pero yo me siento muy bien.
— Hola amor— le digo a Mateo mientras subo a su carro.
— Hola Cariño— me contesta y arranca el carro.
— ¿a donde vamos a ir?
— eso es una sorpresa— le iba a volver a contestar pero el sonido de mi teléfono me interrumpió.
É: ¿Va a venir a entrenar hoy?
era un mensaje de Éll, lo tengo registrado como E porque el me pidio registrarlo de esa forma; de hecho los cinco me pidieron registrarlos solo con una letra. Sobre el entrenamiento he estado yendo casi todos los días desde la primera vez que entrenamos, con la diferencia de que ahora me entrena Lea. a Sley no la he visto desde el primer entrenamiento y desde ese dia tampoco he visto a Col.
Yo:Tal vez mas tarde.
— ¿Con quién hablas— me pregunta Mateo.
— Con un amigo.
— ¿un amigo?
— Si.
— ¿Qué parte no has entendido que tu no puedes tener amigos?— me dice, no se porque pero ultimamente lo soporto cada vez menos, todo el tiempo se la pasa jodiendo.
— ¿Tu que parte no has entendido que no me puedes prohibir nada?— le pregunto yo.
— No me hagas enojar beverly.
— Tu te haces enojar solo, si no anduvieras en tu modo de machito ninguno de los dos se enojaria.
— Beverly, debes de entender algo, eres mi novia, tu eres mia, no puedes ni hablar ni estar con alguien mas que no sea yo.
— Vete a la mierda Mateo.
— No beverly, tu eres la misma mierda.
— Detén el carro— le digo.
— ¿Qué?
— Que detengas el carro, hoy quería pasar un lindo dia con mi novio pero lo arruinaste.
— Tu no te vas a bajar de este carro.
— Yo voy a hacer lo que quiera— Me acomodo en la cama de forma que mis pies queden contra la ventana y comienzo a patear esta.
— ¡Beverly detente!— me grita Mateo pero yo no le hago caso.
— ¡Basta!— vuelve a gritar.
Sigo pateando la venta con toda la intención de romperla, pero el me toma del pelo y después pone su mano en mi cuello haciendo que me detenga.
— Te dije que tu no vas a ningun lado— Comienza a apretar mas la mano que tiene en mi cuello.
— Suéltame— logró decir.
— No.
Apretó mucho mas su mano haciendo que dejara de respirar, intente alejarlo pero fracase, vi sus ojos y me di cuenta que parecía que sus ojos cambiaron de color, se notaban algo rojos pero no estoy segura.
Realmente pensé que toda mi vida iba a terminar ahí pero entonces alguien toco el la ventana del carro y Mateo me solo y me aventó un poco, Se acomodó en su asiento y bajó la ventanilla.
— Hola chicos.
— Hola— contesta Mateo.
— ¿todo bien por aquí?— Preguntó Éll
— Si, todo esta perfecto— volvió a contestar Mateo.
— ¿Beverly, todo bien?— preguntó Éll.
— Dije que— iba a contestar Mateo de nuevo pero lo interrumpi.
— No, este chico no me deja ir y me agredió.
— ¿Es en serio?— me pregunto.
— Si.
— Deja que se baje— le dice a Mateo.
— Esto no es asunto tuyo— le dice Mateo.
— ¿Recuerdas la paliza que te dieron hace unas semanas?— le preguntó Éll— no provoques que te den otra— en el momento en el que Éll termina de hablar a Mateo le cambia por completo la cara— ahora deja que se baje— le ordena.
Mateo le quita el seguro a la puerta y Éll la abre permitiendo que yo baje del carro— adios Mateo, arruinaste esta cita— le digo y comienzo a caminar.
— ¿Te llevo a tu casa?— me pregunta Éll.
— No, si regreso ahorita a mi casa mi madre comenzara a hacer preguntas y no me dan ganas de contestarle.
— ¿a dónde vas entonces?
— ¿puedo ir a tu casa?
— si, vamos.
Ambos empezamos a caminar hacia su casa hasta que llegamos, en el momento de entrar veo a Lea en la sala y a Ait bajando las escaleras.
— Hola Erly— me saludan.
— Hola.
— ¿Ya vamos a entrenar?— me pregunta Lea.
— si.
— Entonces vamos a cambiarnos— Lea comenzó a subir las escaleras y yo iba detrás de ella pero antes de subir por completo escuche la conversación entre Ait y Éll.
— Necesito hablar con el— le dice Éll.
— Sabes que no le gusta que nos comuniquemos cuando el esta haya.
— pero dijo que si se trataba de ella, nos comunicamos.
— Entonces vamos.
¿A quien se referían con el? ¿Era Col? ¿En donde estará?
Editado: 07.03.2022