Soy Abi, tengo 15 años y en pocos meses cumpliré 16, llevo casi un año en preparatoria, los primeros 6 meses me iba muy bien, llevaba las mejores calificaciones pero nunca tuve amigos hasta ésta etapa escolar, de ahí empecé a distraerme con ellos, estaba muy feliz de al fin tener dos amigos, pero...mi rendimiento bajó después de 4 meses, mi energía no era la misma, no tenía ganas de hablar ni salir con nadie, mi mejor amigo llegó justo cuando tenía los primeros síntomas, al principio me atraía, o me gustaba? Ush, realmente no lo sé, pero quería estar siempre con él, nos hicimos cercanos y todo el grupo nos decía que hacíamos bonita pareja, el se molestaba y yo fingía estarlo, la verdad me agradaba que dijeran todo eso de nosotros.
Mi psicóloga me dijo que era bueno que al fin tuviera amigos después de 8 largos años de tormentos, sufría bullying, no era nada bonito, yo muy feliz le decía que era algo que yo soñaba mucho, que era lo que más quería en este mundo. Mi sonrisa desapareció cuando dijo:
-Pequeña Abi, respecto a nuestras sesiones anteriores...- dijo con una expresión triste
-Que ocurre doctora?- dije yo algo preocupada -sucede algo con esto?-
-Para nada nena, el puede ayudarte con todo lo que voy a decirte pero no es bueno querer algo más que esa hermosa amistad- dijo seria -podrias por favor colocarte auriculares o bajar el volumen un poco?-
Hice lo que anteriormente me pidió y ahí estalló la bomba
-Abi querida, he notado que no eres la misma de antes, creo que en este encierro has cambiado mucho, no está nada bien contigo, sabes, esto va a ser muy duro pero promete que no cometerás nada grave- dijo nuevamente triste -tú tienes una depresión muy avanzada, nada ha estado bien por tu mente, en tu familia va mal, en la escuela siempre fue mal, tu cargas con todo eso y recién te cayeron los efectos de todo esto, ya no eres alegre como antes-
Desde ahí mi vida dió un giro, no sabía que hacer, mi mejor amigo lo notó y desde ese momento siempre está a mi lado, lo amo demasiado.
•Abi•