Dime que deseas

Capitulo 4

Con la cabeza agachado y los cascos puestos caminaba por la calle después de haberse despedido de Lily, no quería encontrarse con su hermano porque sabia a donde le iba a llegar. Mateo había apostado mucho dinero por el mismo en unas peleas ilegales, David solo iba para mostrarle su apoyo pero la verdad es que no quería aparecer por allí y menos le apetecía ver como su hermano se partía la cara con otro.

Cuando llego al lugar de quedada Mateo y Carla ya estaban allí hablando tranquilamente mientras se fumaban un cigarro, cuando su hermano le vio alzo los brazos al aire en señal de desesperación.

- -¡Por fin hermanito! ¿Sabes cuanto tiempo llevamos aquí?

- ¿Tenéis un mechero?-. Pregunto David sin hacerle caso mientras sacaba un cigarro de la cajetilla que tenia el bolsillo

Carla saco su mechero y se lo tendió bajo la mirada de desaprobación de Mateo, David capto su mirada y puso los ojos en blanco mientras se encogía de hombros.

- ¿Que?-. Dijo con el cigarro entre los labios-. Ya estoy aquí

- ¿Se puede saber donde has estado para que llegaras tarde?-. Pregunto Carla para evitar la tensión que se estaba formando entre los hermanos

- En ningún lado

- Siempre tan hablador -. Respondió Mateo mientra suspiraba-. Esta bien, da igual, estas aquí como has dicho.

- Entonces deberíamos ponernos en marcha-. Dijo Carla dando una gran palmada

Mateo y David asintieron mientras los tres empezaban a caminar. Carla y Mateo mantenían conversaciones aleatorias mientras que David se mantenía en su mundo sin meterse en la conversación. De repente el brazo de Mateo cayo sobre los hombros de el.

- Ya veras hermanito, ganare la batalla y ganaremos mucha pasta

- Eso espero porque si no no se donde vamos a sacar el dinero que has prometido.

- Siempre tan aguafiestas-. Le dio un ligero golpe en el pecho-. No tendremos que preocuparnos de donde sacaremos el dinero porque ganare y nos darán esa pasta a nosotros.

- Habrás practicado supongo

- Esta pelea esta fácil de ganar

Lo que mas odiaba de su hermano eran sus aires de prepotencia, se creía por encima de todos y realmente deseaba que ese entusiasmo y esa confianza en el mismo le ofrecieran la victoria. Los dos hermanos apenan tenían dinero. Mateo trabajaba de camarero en un restaurante y David trabajaba de cajero en un supermercado pero el dinero entre los dos no era mucho solo les daba para pagar su alquiler y comprar algo de comida.

Cuando llegaron un montón de gente se acerco a ellos Mateo se movía bien entre la multitud mientras David se dedicaba a sonreír débilmente. Después de un rato sintió una mano sobre su hombre y se volvió para encontrarse con los ojos de Carla

- No deberías preocuparte, tu hermano se maneja bien en las peleas

- Espero que tengas razón Carla

- ¿Te preocupa no ganar ese dinero?

- Me preocupa tener que devolver ese dinero en caso contrario

Las manos de Carla fueron bajando sobre sus brazos y después le sonrió débilmente.

- Ganaremos-. Le dijo-. Repitelo

David alzo una ceja pero ante la mirada ilusionada de Carla no pudo hacer mas que sonreír y asentir suspirando

- Ganaremos-. Dijo

No estaba seguro de sus palabras pero sentía bien decirlas en voz alta, era como animarse y convencerse a si mismo de que esa estúpida pelea les sacaría beneficios

Se fueron mezclando entre la gente, como era normal las chicas se apegaban a David bajo la mirada de odio de Carla pero el las hacia el mínimo caso. Su mirada se centraba sobre quien le habían dicho que seria el contrincante de su hermano aquella noche. Era un hombre bastante musculo, posiblemente les sacara una cabeza de altura y eso decir mucho ya que David y Mateo eran bastantes altos. Su cara estaba llena de cicatrices y se podía ver como su nariz estaba ligeramente torcida a la izquierda. No tenia muy claro que de esa pelea fuera ganada. El contrincante se percato de David y le sonrió maliciosamente mientras levantaba la copa en su dirección.

Minutos antes de que conversara todo el circo el hombre alto se acerco a David que estaba hablando con una chica rubia.

- Tu eres el hermano del difunto supongo-. Dijo sonriendo-. Os parecéis mucho

- Supongo que tu eres el hombre al que le dejaremos sin dinero-. Respondió-. Diría lo típico de que mi hermano destrozara tu cara pero veo que mucho no se puede hacer

- Esto son marcas de guerra pequeño-. Señalo su cara

- Si tu lo dices-. Dijo mientras se encogía de hombros

Le dio la espalda y volvió a centrarse en la chica rubia lo que hizo enfurecer al hombreton que le agarro del hombro y le giro violentamente. Acerco su rostro a tan solo unos centímetros del de David pero este no se inmuto, alzo una ceja burlonamente y sonrió

- No soy yo a quien tienes que intimidar "pequeño"-. Repitió en modo despectivo

- ¿Te parezco pequeño?-. Se alzo en toda su altura sonriendo burlonamente

- Cuanto estés tirado sobre el suelo lo seras

Solo una profunda carcajada y le señalo con el dedo riéndose

- Definitivamente Mateo y tu sois hermanos, no sabéis mantener vuestra puñetera boca cerrada- Paro de reírse y le miro fijamente-. ¿Sabes lo que tu hermano a apostado por el esta noche?



#48636 en Novela romántica

En el texto hay: danza, amor, arte

Editado: 09.07.2018

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