Capítulo 11. I

Sabes ese momento en el que te encuentras en un determinado sitio y tienes la completa certeza de que puedes observar todo como si estuviese en vista panorámica. Y al mismo tiempo, estas completamente seguro de que la vida está jodiendote. Pero jodiendote a lo grande. ¿Me estas entendiendo?

Te diré, que yo estaba empezando a tener esa certeza y que extrañamente, todo había comenzado con mi horóscopo.

Sí. Mi horóscopo

Porque cuando las cosas no salen como estas planeando siempre es mejor echarle la culpa a mercurio retrógrado, a venus, a la luna o en su defecto, al puto horóscopo y te digo que yo no creía en nada de esa mierda. Yo no era una persona grosera ni supersticiosa pero es que la vida estaba apuñalándome los ovarios.

Te contaré como yo estaba tranquila y campante con Nancy y Brodic en la casa viendo uno de esos programas en Home and Health sobre madres primerizas. Mientras Bodric con toda su ilusión de padre, buscaba por Amazon mueblería para adornar el cuarto del bebé y me los enseñaba para pedir mi opinión. A Nancy ni se molestó en preguntarle porque a mi tía últimamente, no acababa por gustarle nada y Bodric tenía que ser un santo con dos bolas por toda la paciencia que le estaba teniendo a mi querida tía.

Es que si mi madre la viera... pero de mi madre ni quiero hablar porque el regaño que me echó por el accidente con el café, como si hubiese sido mi culpa... Para completar la situación me había exigido un reporte diario del progreso de mi quemadura que ni siquiera era tan grave pero las madres suelen exagerar todo, más aun cuando su pollito mayor estaba a mas de diez mil kilómetros lejos.

"Ten más cuidado la próxima vez hija, como puede ser que esos accidentes te ocurran a ti, ¿fuiste al médico? ¿Y Aiden? ¿Le cayó café a él también? Pídele disculpa"

A ver mamá que fue un accidente e incluso llegué a pensar que se preocupaba mas por el estado de él que el mío. Pero de eso no hablaré.

El punto es que era una tranquila tarde del viernes, donde descansaba de una semana de trabajo y de la cansada jornada del día anterior con el cumpleaños de Max, sabiendo que debería comenzar con la decoración de la casa de Aiden e Hilka pero sin querer hacerlo porque prefería vaguear, cuando Han, como todos los días, me había enviado un mensaje con mi horóscopo.
 

Un CAPRICORNIO, jamás se arrepentirá de las decisiones que tome, quizás piense en que hubiese pasado si hubiese elegido otro camino, pero jamás se arrepentirá.

¿Te has arrepentido de alguna decisión?
 

Y yo, leyendo con completa atención me dio por ponerme filosófica y pensar que en realidad no me arrepentía. Que si, quizá hubiese podido hacer las cosas mejor, que me carcomía con el pensamiento del "qué hubiera pasado sí' pero en mi fuero interno sabía que las decisiones que había tomado fueron la mejores para mí. De nada servía arrepentirse de las decisiones pasadas, solo quedaba aprender e intentar hacer las cosas mejores.

Así que respondí un sencillo No.

Han respondió al instante como siempre y me agradaba que él no fuese de esos chicos que te hacían esperar cuarenta minutos por su próxima respuesta, creo que él ni siquiera salía de la conversación al ver los dos vistos azules aparecer.
 

¿Así que jamás has cometido un terrible error en tu vida, Fabiola Uni?
 

Errores, sí por montones. Pero si no cometo errores no aprenderé nunca, no creo que sea beneficioso, maduramente hablando, arrepentirse de ciertos errores que te llevan al crecimiento personal.

¿Estás diciendo entonces que jamás has pedido disculpas o perdón por algo?
 

Me quedé leyendo la pregunta un rato, quizá demasiado largo pero Han esperó pacientemente por mi respuesta. Su pregunta tenía algo que me estaba escociendo por dentro
 

Si me he disculpado.

¿Han sido disculpas falsas entonces? Porque para disculparte necesitas estar profundamente arrepentido. Si no te arrepientes de tus acciones ¿Cuál es el sentido de la disculpa?
 

No siempre tienes que estar arrepentido para saber disculparte.

Explícame tu teoría
 

A veces la disculpa es más por la persona con la que estas disculpándote que por ti. Quizá radica más en no concordar con las expectativas que han puesto en ti que por ti mismo. Te disculpas por como tus acciones afectaron a alguien más. Como cuando tu padre esperas que estudies medicina y a mitad de la carrera decides que ya no es lo tuyo y abandonas y te disculpas con ellos

No creí que tuviera que decirte esto pero nunca deberías disculparte por no cumplir con las expectativas de alguien más. No deberías disculparte por hacer algo que te hace feliz.
 

No es disculparme por hacer algo que me hace feliz. Es más cuestión de empatía que otra cosa. Todos necesitamos un lo siento de vez en cuando para poder seguir adelante.

 ¿Te has arrepentido de algo?

Te diré que sí. Que tengo una lista enorme de cosas de las que me arrepiento y de que el horóscopo en esta ocasión, es una mierda.
 

No eres un verdadero capricornio, Han.

Que decepción. ¿Qué haces esta noche?

No me respondas.

Ya lo sé. Nada
 

Estoy viendo mueblería para bebés y un programa sobre madres primerizas. Eso es hacer algo.

Han escribió, luego borró el mensaje. Volvió a escribir y volvió a borrar el mensaje. Yo estaba intentando no largarme a risas. Brodic me miró como si fuese rara y Nancy, bueno, creo que Nancy estaba roncando.