Mi dulce bebé

Hera
No me encontraba nada bien era la cuarta vez que hoy vomitaba, pero no tenía ayuda de nadie Dominick solo entraba para darme la comida y la cena y no se preocupaba si me veía vomitando, pensaba en la idea de estar embarazada pero se me hacía una locura.

-Hola - Dominick se acercaba a mi-

-No te acerques a mi- susurre-

-Conejita- se quedó de pie en frente mio- escuchame, llevo días escuchandote vomitar y me aterra la idea de que tengas un bebé pero podemos tenerlo juntos, te quiero - beso mis labios lentamente y yo solamente me envolvió en sus palabras necesitaba cariño aunque fuera de un asesino -

- A mi también me aterra Dominick-

-de verdad Hera te quiero - me miro sonriendo - ya estamos en paz eres libre si quieres o podemos tener este bebé juntos y olvidarlo todo - el comenzo a llorar mientras acariciaba mi barriga-

-De verdad me quieres? Porque llevo tiempo queriendo escuchar eso de ti - era una locura todo esto pero era mi locura -

- Si Hera -me dio un beso en la mejilla- llevo tiempo queriéndote pero me aterraba aceptar mis sentimientos, te dejo la puerta abierta eres libre haz lo que te plazca conejita. Vete con un hombre que te merezca -.

Se apartó de mi y empezó a caminar hacia la puerta, me puse de pie y lo llame el se giro y me sonrio.

-Quiero una prueba de embarazo-

-y después? -

-si da positivo, me quedaré contigo - estaba segura de lo que estaba haciendo -

Dominick se acercó a mi y me beso lentamente agarrando mi cintura, me quito mi camisa y bajo sus pantalones sus ojos se clavaron en mi y no dude en volver a enganchar mis labios con los suyos sus besos eran veneno igual que el. Era una droga me hacía mal pero me sentía bien y ahora puede que tuviéramos un hijo juntos por fin el Dominick del que me enamoré vuelve a estar. Me tumbo en la cama y comenzó a besar todo mi cuerpo mis manos arañaban su espalda hasta que bajo mi tanga y sin preguntar metió su polla agarraba mi cuello y no apartaba su vista de mi. Gemia como nunca lo había hecho su otra mano acariciaba mi clítoris puse mis piernas encima de sus hombros lo mire fijamente mientras el mordía sus labios y soltaba algún gemido antes de que me diera cuenta abrió mi boca y me escupió varias veces seguidas para después darme una cachetada en la cara dejando mi mejilla roja, mi cuerpo sintió una adrenalina y notaba como cada vez me mojaba más ahora me tocaba ponerme a mi encima de él y podía notar lo mucho que le gustaba mis pequeños pechos pues no paraba de chuparlos y jugar con ellos su polla cada vez estaba más dura y el clavaba sus uñas en mi pálida piel dejando marcas igual que hacia yo en la suya. Me quite de encima y acariciaba su polla mientras el rogaba que se la chupara me gustaba escucharlo rogar así que no le hice caso, el agarro mi pelo y me obligó hacerlo, era demasiado grande y me atragantaba con ella pero a el eso le gustaba mi pelo estaba enredado en sus manos y el era quien llevaba el control de todo me estiro y deje de chuparsela lo mire de arriba abajo estaba buenísimo y para nada me venia en mente todo lo que había echo a la gente ni a mi, me volvió a dar una hostia y volvió a meterme la polla en la boca hasta correrse. Me tumbó en la cama y empezó a lamer mi coño como si no hubiera un mañana, nunca me lo habían echo tan bien y era lo mejor del mundo la respiración se agitaba mucho y acabe corriendome en su boca.

-Vaya conejita, sabes muy bien - lamio sus labios- ahora iré a por el test-

Se fue y al irse no cerro la puerta tenía razón era libre pero yo no quería irme de su lado no después de ya tener su cariño estaba segura que podía cambiar por mi y por el bebé también deseaba estar embarazada y tener una bonita vida con el .

-Hera- Dominick subió las escaleras y lo espere sentada en la cama -

-Dime- me dio el test de embarazo -

-Quiero hacer esto más especial - sonrio - preparare una cena romántica para ti y para mí - beso mi mejilla- tienes dos mascaras en el segundo cajon de la mesita una negra y una blanca, si no estás embarazada quiero que te pongas la negra si lo estás quiero que te pongas la blanca - su tono era serio -

-Vale pero porque? -

-Porque tengo un regalo muy especial para las dos ocasiones depende de la mascara que te pongas cambiara todo - me sonrió -

-No me dejaras sola no? -susurre-

-Te quiero conejita- se fue sin decirme nada más -

Tenía el test de embarazo en mi mano, temia por todo lo que podía pasar y si en verdad Dom me estaba mintiendo? Y si solo era un plan? Pero tampoco tenía sentido además de verdad se le ve enamorado de mi, llevo casi un año aquí encerrada me estoy enloqueciendo y si mi única manera de ser libre es con mi bebe y al lado de Dominick lo haré fui al baño y me senté en la taza, mis manos temblaban rezaba para que me saliera de una vez el pis y por fin salió deje el test en la pica. Estire de la cadena y me mire en el espejo estaba llena de mierda, el test tardaria en dar los resultados así que opte por un ducha caliente , como le diría a mi hijo o hija que su padre es un asesino? A lo mejor lo verían como un trabajo debería hablar con Dominick por amor todo se puede y podría dejar toda esa vida de lado, enrolle una toalla en mi cuerpo. A lo mejor me estaba precipitando y no estaba ni embarazada cerré los ojos y suspire era la hora de la verdad era la hora de saberlo todo, me puse un vestido negro que Dominick me dejó mientras me duchaba y fui a por la mascara las dos eran de conejo pero se veían los labios y nariz, estuve un rato mirandolas y me puse la indicada para bajar creo que era el camino indicado no hubiera podido hacer más por mi bien .

-Blanco- Dijo el entusiasmado -

Me abrazo muy fuerte y lleno mi cara de dulces besos, era claro que me quería.

-Tenemos un bebé Dominick- dije llorando - quiero pedirte una cosa -

-Claro - se sentó en la mesa - pídeme lo que quieras conejita-