¿Dónde está Darly?
CAPITULO I - Conociendo a Darly
Autor: Cintia Bagnasco
Sinopsis: Megan desea conocer a su primer amor, ella es una estudiante adolescente muy tímida, pero cuando conoce a Darly y se propone a hablarle, comienzan a sucederle cosas muy extrañas... El mismo tiempo le irá aclarando lo que sucede ayudada de muchas señales. De repente Darly desaparece... ¿Dónde está Darly?...
5 de junio
Hace unos días conocí a un chico, su nombre es Darly, no es igual a los otros chicos, es de mi clase pero aún no hemos hablado, soy algo tímida para hacerlo... Era un día lluvioso en la escuela, quizás el más horrible de no ser porque no creía lo que realmente pasaría ese día. No había muchos alumnos en clase, y eso fue una suerte; porque favoreció nuestro encuentro.
Siempre estaba concentrado en las tareas, y creo que eso me llamó la atención desde que lo ví.. El me miró cuando llegué ese día.. Los demás solo miraban de reojo, me hacían sentir tan incómoda las miradas de todos, pero ya estaba acostumbrada a esa escena, debía superarla.
Había llegado empapada, el pelo goteando y los zapatos con las agujetas sueltas de haber corrido en la lluvia. Y allí estaba él, mirándome mientras buscaba un asiento.
Cuando Darly me vio, lejos de reírse se acercó y me dio un pañuelo. Todos los demás se quedaron observando la escena y comenzaron a burlarse en secreto. Yo empapada y un poco colorada por la escena me senté rápidamente en el asiento, mientras Darly me observaba. Estaba secándome el cabello y el rostro con el pañuelo y el seguía mirándome... me observaba desde entonces como si me conociese desde hace tiempo.
No podía dejar de sentirme incómoda, entonces solo bajaba la cabeza, pero aun pensaba; aunque no lo mirara, yo seguía pensando…
Se mantuvo cerca todo el día, hasta que sonó la campana de salida. No me dijo palabra, solo sonrió cuando voltee a mirarlo por segunda vez tratando de que no se diera cuenta.
Al otro día, trate de seguir la lectura mientras él se mantenía a mi lado, y tratando de no desconcentrarme intentaba adivinar cuál sería el motivo de su amabilidad. Pero pasando las horas note que no me miraba, sino que estaba muy concentrado en la clase, y me daba mucha timidez hablarle para agradecerle por el gesto que había tenido conmigo.
Al día siguiente, llegué a clases con la esperanza de verlo, quería darle las gracias, no había tenido tiempo. Ese día llegue más temprano de lo usual y mientras esperaba ensayaba las palabras, pues era tan tímida que no sabía cómo expresarme.
Miraba el reloj y se acercaba la hora y mis manos estaban muy inquietas, el corazón comenzó a acelerarse al momento que veía que se aproximaba la hora. Cerré los ojos y baje la cabeza mientras esperaba... Llego la maestra y los compañeros se sentaron, comenzó la clase y Darly no aparecía.
Pase el recreo en el jardín pensando que algo le había sucedido. No tenía su teléfono, ni sabía su casa. Me prepare mejor para el siguiente pero aun así Darly no llegó.
No había sido tan curiosa de saber de nadie, hasta que pregunte a la profesora por su ausencia.
¿Qué le había pasado a Darly? Un chico tan dulce y de repente ya no estaba.
Pero para mi mayor preocupación, solo recibí incertidumbres. La profesora al preguntarle, agachó la cabeza y parpadeando con la mirada triste solo me dijo que no me preocupara más por él.
Esas palabras habían sido muy duras para mí. no sabía que pensar, no sabía qué hacer, y no sabía que le había pasado a Darly.
11 de junio – Me siento triste, hoy no apareció Darly. Mama está preparando una torta de chocolate, es mi cumpleaños y vamos a festejarlo con Tía Gema y la Abuela Carlota que me ha regalado unas pantuflas grandes. Tía Gema me ha dado un poco de dinero para ahorrar en mi viaje de fin de año, estoy emocionada. Solo faltan pocos meses. A Tom le agrada mucho la idea, pero aun es menor, dice que irá de todas formas en mi equipaje.
09 de Julio – No sé nada de él, pero creo que será mejor olvidarlo. Lo recuerdo todas las tardes. ¿Me pregunto dónde estará?...
La abuela dice que solo ha de ser un como un picaflor... No había entendido el termino hasta que se lo pregunte a mamá. La abuela dice que, si él tiene que estar conmigo, el me hallará, que el destino está preparado para encontrarnos si realmente el fuese para mí. Sin duda, me ha dado tan buenos consejos que cada cosa que me pasa se la cuento tratando de entender sus palabras y así no equivocarme en el amor. Bueno, por lo menos a mí me gustaría que mi primer amor sea eterno...