¡donde esta mi talento!

Las “maravillosas” ideas de Lilian

Ahí estaba yo con mi computadora a punto de escribir algo cuando de repente… me quede dormida. Olvidé que había estado despierta hasta las 4 de la madrugada viendo la serie amor y anarquía cuando desperté de nuevo vi que había escrito algo antes de quedarme dormida era algo como esto

Erase una vezzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz

Bueno así y un sin numero de z, cuando observé bien mi computadora me di cuenta que le faltaba una tecla, si era la z, suspiré como resignada a empezar un nuevo día monótono y aburrido cuando de repente recordé mi GRAN IDEA:

Escribir una historia, aunque eran las 6 AM y no creía que pudiera pensar a esa hora sin mi café. Así que fui directamente a la cocina donde mamá ya había preparado el —suspiro imaginario —delicioso café.

Mamá no estaba, había salido a dar instrucciones a las personas que nos ayudarían con la finca y mi hermana seguía durmiendo. Así que tome mi delicioso café y volví a mi habitación y decidí que era hora de escribir, solo que el café no hizo efecto, pensé que me traería ideas, pero… bueno al parecer era un simple café, cavilé en tal vez fumar marihuana hace tiempo no lo hacía, tal vez funcionara para imaginar cosas, pero no, quería que mi inspiración fuese natural y para ser sincera mi madre podría darse cuenta y si eso pasará PROTEGANME DIOSES DEL UNIVERSO.

En fin, volví a mi trabajo de imaginar cosas, pero nada, así que recordé lo que decía esa autora que había visto hacía algún tiempo sobre contar algo propio y partir de ahí, pero nada vino a mi mente NADA, entonces mis ilusiones se fueron por el caño, se desvanecieron dentro de mi ser y mi pobre corazón se desintegro DRAMÁTICAMENTE.

Bueno, no fue exactamente así fue más bien que descubrí que no tenía nada interesante que contar tal vez debería ir al pueblo y encontrar AVENTURAS, pero luego lo descarte porque eso implicaría dejar mi casa e ir al lugar donde la gente te mira porque es chismosa, ya sabes el dicho “pueblo pequeño, infierno grande” lo oí en una de esas novelas mexicanas que nunca entiendo, donde siempre hay un Fernando, no me gusta ese nombre es el nombre de mi ex.

—maldito Fernando nacido en el quinto circulo del infierno —pensaba mientras recordaba al idiota, al final esa novela mexicana con ese Fernando estúpido tenía razón.

El caso es que estaba cavilando todas estas ideas en la mañana de aquel otro día de junio (era martes, solo quería ser dramática), cuando mejor fui a ayudar a mi madre con el desayuno, pero pensaba sobre que escribir, tal vez sobre el desayuno tipo:

Yo era Romina cocinaba el desayuno porque era una prestigiosa chef…

Esperen, Romina… no me convence, me recuerda a esa novela mexicana donde la protagonista se llamaba así y bueno no me gusto esa novela.

Suspiré como por quinta vez en el día, entonces mamá hizo la pregunta que le encantaba junto con esa mirada de la familia peluche cuando le preguntan a Bibi ¿¡porque no eres una persona normal!?

—¿y ahora que le paso?

—por qué no tengo ningún talento —pregunté mientras ponía pan a cada plato

Ella solo rodo los ojos y dijo

—Con ese pesimismo, deje de pensar en eso, ya algo se pondrá hacer, usted es muy inteligente

—si ¿Cómo en qué? —en ese momento se fue a la mesa a dejar el desayuno a los empleados e ignoro mi pregunta

Cuando volvio estaba riéndose

—¿Qué paso? —dije

—Raúl —el señor que nos ayudaba —que sigue diciendo que Doña Mercedes es una bruja esta inventado una cantidad de cuentos

—yo nunca la he visto, tal vez si es una bruja

—yo sí la he visto, solo que casi no sale y siempre está de mal humor. No es ninguna bruja son tonteras de la gente

Martha era la señora que vivía en la zona no estaba muy lejos pero su casa por fuera estaba llena de musgo y parece abandonada la verdad no sé cómo sobrevive, la gente siempre está inventando historias, pero nadie se atreve acercarse realmente a la casa.

Después de un rato fui a escuchar los cuentos para ver si podía ser parte de la historia que no tenía idea como empezar a escribir, me acerque a la mesa y escuche:

—de su casa salía un humo como amarillo con azul, se los juro —decía don Raúl —entonces me acerque y le tire una piedra y salió con el cabello desastroso, ya saben como una bruja, pero era bien bonita, aunque mi papá dijo que eso era pura ilusión

Todos en la mesa se reían, estaba Don José, Claudio y María, esta ultima dijo

—Todos ustedes solo les interesa si es de su gusto o no, todos reían —cuando notaron mi presencia

—Hola Lilian que hace usted ahí parada —dijo don José

—De seguro este tonto la asustó con esos cuentos —dijo María mirando mal a Raul

Lo cierto es que todos ellos me conocen desde que era una niña así que todos me tratan como si aun tuviera miedo a todo, ósea si tengo miedo a muchas cosas, pero ya tengo 20.

Hablo con ellos un rato hasta que se me ocurre la GRAN IDEA, si la bruja, perdón Martha tiene tantas historias a su alrededor podría ir e inspirarme.

Así que después del almuerzo iría y me inspiraría, ya que mi aburrida vida no me daba nada de inspiración yo buscaría la aventura con ELLA, aunque para ser sincera me asustaba un poco, pero no más que el tema de ir donde mi tía.

Así que tomé mi bicicleta y en mi camino hasta su casa soporte vientos despiadados, infernales desiertos, escalé…

Nahhh estoy exagerando, en realidad la casa estaba cerca de la mi tío así que entre ahí primero, jugué con mi pequeño primito de dos años como por 10 minutos y continúe mi camino, cuando iba saliendo pensé

—Mi tío tiene un jardín tan bonito —y esquive cada flor para no matarla con la presencia de mi ser.

Seguí mi camino y visualicé la casa, había una entrada con un jardín alrededor bastante descuidado y bueno… si daba algo de escalofrío. Pero haber OBVIO no era una bruja ¿verdad? Sentí que empezaba a tener miedo, pero me di una cachetada mental 



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En el texto hay: humor, adolescente, brujas

Editado: 29.08.2021

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