¡donde esta mi talento!

Capitulo VII: un chico malhumorado, una bruja loca y yo... que tenía mucho frio, si, ¡FRIO! ¿miedo? ¡Jamás!

un chico malhumorado, una bruja loca y yo... que tenía mucho frio, si, ¡FRIO! ¿miedo? ¡Jamás!

Mis pies continuaron hormigueando mientras caminaba como loca, en medio de árboles y cultivos, hasta que en mi campo de visión apareció la casa de la bruja, a este punto estaba  totalmente desesperada, pero entre más me acercaba a la casa el hormigueo se desvanecía, estaba todo oscuro, la verdad no tenía idea como no me había perdido, como no había tropezado o caído, miré asustada a mi alrededor cuando escuche como aullaba un lobo a lo lejos, trate de volver a mi casa pero al dar un paso en dirección contraria, mis pies hormiguean con intensidad, para se sincera quería llorar.

Cuando vi que en la casa de la bruja se encendía una luz, sin más opción que acercarme di unos cuantos pasos para pasar la reja oxidada y vieja de la casa cuando escuché una voz:

—¡Hijos de puta! ¡traidores! ¡me pertenecen! Yo los crie son míos —vociferaba Gael mientras estaba concentrado en sus pies, creo que ni si quiera se había dado cuenta donde estaba

—Eso es raro… si dices que tú los criaste que eres ¿su padre? —dije con burla, mientras temblaba de frio.

—¡tu! ¿Qué demonios haces aquí?

—¿Qué haces tú aquí? —pregunte devuelta

Él miro a su alrededor como si apenas fuese consiente de donde estaba, tenía el cabello desordenado y unos pantalones largos de pijama, no tenía camisa y ¡joder! ya podía notar que era esbelto y que hacía ejercicio si no fuera tan bocazas sería encantador…sus ojos normalmente cafés claros ahora parecían dos pozos oscuros de furia, sus labios… no termine de hacer mi análisis porque dijo:

—¡No lo sé! Estaba en mi habitación cuando de repente mis pies comenzaron a caminar solos y luego estaba aquí —miro la casa de la bruja —. ¡no entraré ahí de nuevo!

Vociferaba palabrotas con furia y desconcierto, trato de devolverse, pero sus pies trataban de devolverlo, mientras tanto yo solo veía la escena con cierto temor y jocosidad.

Llego hasta un árbol cercano y se agarro a él mientras sus pies tiraban hacia atrás, como si no lo pudiese controlar, mis pies comenzaron a hormiguear de nuevo con urgencia, trataban de dirigirse a la casa.

—¡No voy a entrar! —gritaba —¡traidores! ¡ni siquiera tengo camisa! ¡esto debe ser acoso!

—Mierda, mierda —dije porque al parecer no tenía nada más que decir

Ambos terminamos dirigiéndonos a la casa, chocamos en algún punto cuando estábamos cerca de la puerta y caímos. ¿En serio? No me caí en todo el camino para caer aquí

La puerta se abrió de golpe, haciendo un ruido estruendoso y se oyó el graznido de un ganso. Era la bruja que estaba en el marco de la puerta mirándonos de forma aburrida

—¡son las 12 de la noche y ustedes apenas llegan a cumplir mi parte del trato! —pronuncio con disgusto —los jóvenes de ahora no tienen respeto por la gente mayor, como se atreven hacerme perder el tiempo, mocosos.

La bruja hablaba mientras nosotros nos levantábamos y la seguíamos

»Además, tuve que traerlos a la fuerza, ¡ay! Esto me deja tan cansada, no es así Punli.

Lo ultimo lo dijo dirigiéndose al ganso que había en sus manos, el malvado ganso solo nos miro y juraría que entrecerró los ojos, como diciendo idiotas

—¡esto es un secuestro! —dijo Gael —me ha sacado a la mitad de la noche para cumplir un trato que no acepte, es ridículo.

—Claro que lo aceptaste muchacho, desde el momento que te metiste en mi casa y fuiste responsable con esta chica de todo el desastre

—voy a demandarla

—Si, ve y dile a la policía que les ordene a tus pies que te trajeran aquí

—Señora bruja ¿Qué es exactamente lo que debemos hacer? —trate de sonar educada, porque a este punto ya no sabia si temblaba de frio o de miedo

—Es en serio Lilith, este es un complot tuyo con esta bruja

—¿Qué?

—¿quieren algo de mí? ¿dinero?

—¿Estás loco? ¿Por qué querría pasar tiempo con un idiota como tú?

—No lo sé, dímelo tú

—¡Pendejo! No ves que estoy en pijama, camino como una loca en medio de la noche al igual que tu y crees que es un plan mío ¿para qué? Para pasar tiempo con un desconocido tan idiota como tú

—Chicos… —dijo la bruja

—Entonces que demonios pasa, ¿por qué no me puedo ir?

—Es suficiente —dijo la bruja enfadada —no tengo tiempo para sus peleas, harán lo que les ordene o juro que vivirán con la desesperación en sus pies por siempre

Como muestras de lo que decía, mis pies volvieron a hormiguear con intensidad y supongo que a Gael también porque dio unos cuantos saltos.

» Bien ya nos vamos entendiendo, cada lunes durante dos meses y sin falta tendrán que venir, no me importa la hora sino vienen sus pies los traerán, no se preocupen, el hechizo de sus deseos será permanente después de esos dos meses mientras tanto ya saben que deben recargarse

—es ridículo, no tengo ningún talento

—Y yo no he vuelto con Marina

—Ninguno de los dos lo ha intentado, tú Lilian estuviste haciendo lo mismo de siempre y tú Gael solo le dejaste un mensaje, para que comience a funcionar debes verla primero en persona, ¡ah! Lo olvidaba obviamente deben recargarse ¿Cómo quieren que funcione sino hacen lo que les digo? —declaro irritada

—Que idiotez

—Bien, por hoy tendrán que atrapar mi pájaro rojo, lo he perdido de nuevo y ya estoy muy vieja para estarlo buscando, lo necesito para hacer algunas de las pociones que echaron a perder.

Mientras tanto camino hacia el pasillo donde habíamos escuchado los gansos por primera vez, abrió esa puerta y puso el ganso ahí dentro y dijo:

—Síganme

Lo hicimos

—¿me esta diciendo que seremos sus empleados por dos meses? —iba preguntado Gael mientras camina de mala gana.

—Llámenlo como quieran, pero eso sí no pueden decir nada en el plazo de los dos meses o habrá consecuencias —y miro nuestros pies descalzos




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