CAPÍTULO 3

#Beth.

Bueno debo suponer que este es el cielo.

Un lugar ello de colores, tan brillante que tienes que parpadear varias veces para poder ver lo que hay delante porque es tan increíble. Nubes de colores de arco iris, paisajes imaginarios. Todo.

Es increíble que incluso me hayan aceptado en este lugar.

Sujeto la mano de mi esposo, preocupada por todas las cosas que hemos dejado atrás. Fallecimos en un accidente de auto sin dolor. Lo único que recuerdo es que sujetaba su mano y estábamos riéndonos de que nuestro hijo mayor había terminado por fin la universidad después de todos los problemas que tuve para poder concebir. Todo había valido la pena. cuando caí en un sueño profundo, luego abrí los ojos y ya estaba en este lugar.

En este lugar tan hermoso.

—Beth Summers, por favor acércate tenemos que asignarte tú lugar en la ceremonia de esta noche. Se acostumbra a que todas las almas que han regresado se presenten para que les indiquen en que parte del castillo realizarán sus funciones. Tenemos lugares en la cocina, en los jardines, música, manualidades. Tenemos tantas cosas que pueden hacer mientras estén aquí en proceso de recuperación. 

—Claro—contesto, soltando la mano de mi esposo y acercándome al consejero que nos recibió cuando llegamos a este hermoso lugar, me regreso para decirle a la persona con la que he compartido años de mi vida—Ya vengo, esposo. 

El consejero me mira cuando llego hasta él.

—Ya no es tú esposo, ahora todos ustedes—Comienza hablar girándose para dar una larga mirada a todos. — Todos ustedes son almas. Almas que regresan ahora para poder estar en plenitud. Cumplen funciones, pero no tienen hambre, sed, no hay dolor, no hay llanto. Viven una vida en constante armonía teniendo paz en sus corazones. Se dedican a sus actividades durante unas horas y el resto conversan, bailan, cantan. No hay dolor. 

—Bueno.—Miro a mi esposo que me ofrece una mirada de disculpa y entiendo que todo lo que dicen es verdad. No tengo hambre, ni sueño, no tengo sed. Estoy en paz, estoy plena. Por ese motivo, alzo mi vestido para poder caminar más rápido hacia el lugar que me asignan en la final numero trescientos.

Los ojos del consejero se amplían al ver que no he refutado lo que me dijo y no lo entiendo como lo haría.. Estar aquí es la mejor sensación de todas.

—Aquí estoy—digo con voz alta por si acaso no me escuche.

El consejero deja de verme y baja la mirada de nuevo al libro que sostiene entre sus manos murmurando algo que no puedo escuchar.

***

Cuando llega la noche y nos hacen avanzar a todos a la sala del trono siento mucha emoción. En esta noche conoceremos al rey de este universo como nos indicaron, a su esposa que me imagino debe ser muy hermosa y a sus hijos. Todos juntos celebrando que nuevas almas han llegado y somos cientos de personas que algo tuvimos que hacer bien cuando fue nuestro tiempo en la tierra. Los colores de la sala son brillantes, vivos, llenos de calidez que me encantaría quedarme en este lugar para siempre. Me parece irreal todo lo que me ha pasado en pocas horas y siento que por fin tengo un lugar en todo este hermoso universo. Mi vida ha sido dura pero maravillosa. Fui huérfana y crecí en un lugar para adolescentes problemáticos pero siempre en el fondo de mi corazón me parecía que a pesar de no tener padres, alguien cuidaba de mi. Aliviaba mi dolor por las noches, en mis sueños me cantaban canciones, me abrazaba. Si eso es cierto ojalá pueda encontrar a ese hermoso ser porque en el fondo de mi corazón siento que eso no fue producto de mi imaginación. Incluso cuando me casé todavía podía sentirlo. Sentir su paz, su amor . Todo, por eso creo firmemente en los ángeles guardianes, porque sea verdad o no tuve uno y espero encontrarlo aquí para poder darles las gracias. 

—Por favor, Beth Rosaline Summers, acérquese.

Salgo de la fila y me acerco decidida pero nerviosa a la vez a donde me llaman con la cabeza abajo en señal de respeto, pero siento una corriente qué pasa por mi cuerpo que me obliga a levantar la cabeza.

El rey de este universo

Conozco esos ojos 

  El rey es este universo

Sé como suena su voz al reír 

Él es la persona que me cantaba en mis sueños.

Él es la persona que me abrazaba hasta quedarme dormida