[Capítulo 3]. "Un día y sin dudas".

- ¿Eh? ¿Do... dónde estoy? Todo está muy... iluminado... ¿Qué... me pasó?-

[ No estás solo aquí, siempre estaremos contigo].

- ¿Qué? ¿¡Quién dijo eso!?-

Klarth despertó desorientado en un lugar completamente blanco que parecía no tener fin. Después de unos segundos, escuchó una desconocida voz aunque sentía que la había escuchado en algún otro lado.

[ Tranquilo, nosotros te acompañaremos y no nos iremos, a partir de ahora tu vida empezara a cambiar radicalmente].

- ¿Qué...que quieres decir con eso?-

[ ...]

- ¡Respóndeme!-

La voz en su mente no parecía ser hostil, se sentía dulce y amable, las cosas que decía eran de naturaleza pasiva, aunque en realidad era una sensación extraña, más que una voz, era como si a su mente le llegaran las ideas y mensajes de alguien más.

[ Todavía no es el momento]

[ ¡Quiero consumirlo todo!]

[ ¿Eh? ¿Qué hago aquí?]

- Esperen...-

[ ...]

[ No te serviré]

[ Oh ¡Klarth! ¿Qué haces aquí?]

[ ¿Qué hace él aquí?]

- ¡Deténganse, basta!-

[ Cuidado]

[ Te quiero]

[ ¡Te matare!]

De pronto, pudo sentir otras voces llegar a su mente, eran tantas que empezaron a perturbarle, lo que le provoco miedo y confusión, pero entonces todo repentinamente se quedó en un completo silencio. Lo único que podía escucharse eran los jadeos de cansancio que salían del cuerpo de Klarth quien estaba tirado en el piso intentando taparse los oídos.

- ¿AH...?-

Lentamente abrió los ojos para inspeccionar su ambiente nuevamente y vio exactamente el mismo escenario de antes, solo que esta vez, ante él, estaban 10 figuras, la mayoría desconocidas, pero había dos que se le hacían ligeramente conocidas. Pero estaba demasiado desorientado como para concentrase e identificarlas.

- ¿¡Que me van a hacer!?-

La mayoría de las figuras estaban mirándose entre sí como si hablaran, o mejor dicho, como si discutieran, pero en lo que Klarth lanzó su pregunta, todas y cada una de las miradas se centraron en él, induciéndolo en un profundo miedo, ya que las oscuras figuras no desprendían otra cosa más que un siniestro resplandor en sus ojos después de que hiciera su pregunta.

De pronto todo empezó a hacerse más oscuro, dejando a la vista únicamente que esos ojos y al cabo de unos segundos todo se puso completamente oscuro, tanto el ambiente como la mente de Klarth, quien volvió a caer en desmayo.

- ¡Cariño! Es Klarth, ¡él está!...-

- ¿¡Que!? ¿¡Que ocurre con él!?

- ¡El al fin está despertando!-

Poco a poco los ojos de Klarth empezaron a abrirse nuevamente para encontrarse con los aliviados pero algo preocupados rostros de sus padres que mientras su hermana Tami estaba dormida a un lado de la cama tomando su mano.

- ¿¡Klarth!? ¿Puedes oírme? ¿Estás bien? ¿Qué te ocurrió?-

- vamos Lailith, deja que se lo tome con calma, seguro ha de estar desorientado-

- Pero...-

La madre de Klarth rápidamente le golpeo con una ola de preguntas a Klarth, pero fue detenida por su padre. Aunque aún después de eso, Klarth no reacciono, solo tenía los ojos abiertos con un poco de lágrimas mirando hacia el techo.

- Sniff sniff Yo...creo que dormiré-

- Pe...pero Klarth Tu...-

- Está bien, descansa...-

- ¡Cariño!-

- Bueno, vámonos un rato Lailith, Klarth va a dormir-

Klarth, más que desorientado ahora parecía desmotivado, tenía ojos muertos, carentes de todo brillo. Por otro lado, el padre de Klarth parecía no querer presionarlo mucho, quizás se sentía culpable, después de todo, él parcialmente tenia parte de la culpa. Tenía marcharse junto con su esposa dejando a Klarth a solas un rato.