Earthquake Neverland

Lo intenté...

Veamos. Son las 7:17, quedan tres minutos para que llegue la maestra. Alice ya está sentada en el pupitre delante al mío, y Ted empezó a charlar con Stephanie dos filas al lado. Todo está en su lugar, solo necesito tirar este lápiz y... listo.

-Disculpa Alice, se me cayó el lápiz, ¿puedes pasármelo?
-Sí, claro.

Es hora de tomarla desprevenida mientras se agacha. Pum, falda arriba. Y luego, un grito.

-¡Ahhh!¡¿Qué haces?!
-Disfrutando de la vista.

Excelente, Ted ya debió prestar atención. Así es, viene para acá.

-¡Hey! ¿Qué le haces a mí hermana?
-Solo reviso su mercancía, ¿algún problema?
-Ya te daré un problema, desgraciado.

Bien, esta parte es importante. Ted siempre inicia con la derecha. Una vez esquive el primer golpe, me le echaré encima, así, los dos estaremos en el suelo, conmigo arriba. Entonces Alice me lanzará su enciclopedia desde detrás. Yo sabiendo eso, me haré a un lado, cayendo el pesado libro sobre Ted, dejándolo sin aire. Muy bien, hagámoslo.

-A que no me hieres, Teddy.
-Te lo buscaste.

Y esquivado.

-Fallaste, torpe.

Ahora, sobre él.

-¿Qué haces? Quítate de encima.

Uno, dos, TRES. Para el lado.

-Ough...
-Ay no, ¿estás bien Ted? No quería darte.
-Que mala puntería, eh, Alice.

Genial. Todos los testigos ya debieron salir corriendo por algún docente. Sí, eso parece. Me alegra que no haya algún valiente para detener nuestra pequeña riña. Bien, es hora de salir de aquí.

-Adiosito.
-Es... esp...era, cob...arde. Todavía no termino contigo.

Todavía tengo bastante tiempo, y con el bullicio de la pelea estoy seguro que muchos salieron de curiosos.

-¿Qué está pasando aquí?
-Maestro Calvario, que sorpresa verlo por aquí.
-¿Maestro Cal...

Pum, sape en la calva. A correr.

-¡Detente ahora!¡Estás en problemas!
-Estoy ocupado, cabeza de rodilla.

Espero encontrarla rápido. Oh.

-¡Profesora!
-¿Fitz? ¿Por qué me llegan recados de...
-No tengo tiempo para explicar. Usted es muy sexy.

Un beso rápido en los labios y a seguir corriendo. Allí está el extintor de incendios. Muy bien. Muevo esto, ajusto aquello, y listo, un nuevo juguete.

-Baja eso.
-¿No te había dejado atrás, pelón?
-Te atrapé, desgraciado.
-¿Tú también, Teddy? ¿No pueden dejarme en paz?

Los dos me tienen rodeado. Supongo que es momento de usar mi nueva adquisición.

-¡Detente!¡Alto!
-No los escucho, el extintor hace mucho ruido.

Esto es muy divertido.

-Uff... uff.
-Les hacía falta un baño, eh. Bueno, tengo que irme, adiosito.

El problema de los ciclos infinitos es que no importa cuanto corra, mi cuerpo siempre tiene misma resistencia, y yo no soy muy atlético que digamos. Al menos ya casi termino. Ahí está la alarma contra incendios, muy bien... encendida. Aprovecharé el desorden para escabullirme hasta la oficina del director.

-¿Qué pasa?
-¿Es un simulacro?
-No sé, pero al menos nos deshicimos de esa clase aburrida.
-Hola, estudiantes. Aquí su director hablando desde el parlante. Me informan que un alumno activó la alarma indebidamente. No hace falta aclarar que será severamente castigado. Por favor, regresen a sus salones.
-Director, ¿cómo está? ¿La vida lo está tratando bien?
-¿Qué hace aquí? Regrese a su salón, alumno.
-Lo siento director, fui yo quien activó la alarma.
-¿Tú eres Fitzgerald?
-El inigualable, y si me da permiso, yo también quiero usar el parlante.
-Detengáse ahí, o lo expu... Ohh.

Hágase pa allá.

-Hola hola, ¿Me oyen? ¿Me escuchan?¿Me sienten? Tiqui tiqui tin, taca taca tan. ¿Algún fan de Thalia? ¿No? Bueno...
-¡Queda usted expulsado!
-¡No me interrumpa! ¡¡¡Tome hurracarrana!!!
-¡Ah!

...

-Disculpen gente. Cómo iba diciendo, tengo un anuncio que hacer. ¡Me voy a casar!
-¡Abre la puerta!

Oh, llegaron los metiches.

-No hay nadie.

El pestillo no aguantará mucho.

-Y otra cosa público querido. ¡Todos van a morir! ¡JA JA JA JA JA!
-¡Agarrenlo!
-Caballeros, nice to mee...

¡Ah! Inmovilizandome entre 4, que cobardes.

-No tan fuerte, me excitan.
-Pagarás por esto.
-¡Teddy! ¿Cómo está la hermana?¡Ah!
-¿Qué te pareció eso?
-Agh... uff... uff... 7 de... 10. Te falta odio, Sasuke.¡Ah!
-¿Y eso?
-...
-¿Qué pasa?¿Ya no eres tan machito?
-To... To... dos...
-Ajá, vamos, continua.
-Todos... van a... morir... ja... ja ja.
-Estás totalmente loco. ¿Mmh?

Justo a tiempo.

-¡Terremoto!¡Salgan de aquí!




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