CAPITULO 17.

«AIDEN»

La puerta se vuelve a abrir de manera brusca, volteo lentamente y veo entrar a la detective Clark, por un pequeño momento alcanzo a ver a Simone, sus ojos no me miran, pero está indecisa, como si no supiera que hacer, se ha enterado de mis peticiones y está intentado determinar qué es lo mejor, mientras ella mantenga la duda en su cerebro claramente tendré una oportunidad para volverla a ver. Clark cierra la puerta detrás de ella, parece envalentonada, segura de sí misma, no puedo evitar sonreír mientras siento como las esposas mantienen mis manos al centro de la mesa; recordándome que ahora estoy del otro lado, como un preso y debo de comportarme como tal, están entrelazadas a un pequeño barrote que me obliga a mantener mis manos a mitad de la mesa sin posibilidad de usarlas, una prueba más de que me temen. Clark camina hasta colocarse frente a mí, se sienta e inhalo el aire suficiente, del otro lado percibo el olor de Emerich y de Jason, pero el perfume barato de Clark me irrita la nariz y me pone de malas.

—Si necesitas de un abogado, este es el momento para llamarlo— la voz de Clark suena ruda, parece que quiere demostrar que ella tiene el control, pero no a mí si no a Jason y al director. Quiere demostrar que es apta para manejar una situación de esta magnitud, tal vez aspira a un ascenso si logra resolver mi mente y encontrar a la asesina.

—Detective Clark, es bueno verla, aún no necesito un abogado, cuando sea el caso lo haré llamar ¿Dónde está Simone? ¿Está enterada de mi petición?— Le sonrío con suficiencia, me mantengo educado y con la vista fija en ella.

—No hablará con la agente Cárter, el caso lo llevo yo y el detective Jason, eso ya lo sabe.

—Bien, cuando traigan a Simone entonces hablamos— le sonrío y me recargo en el respaldo de la silla guiñándole un ojo.

—Creo que no me escuchó, Simone Cárter no vendrá aquí a hablar con usted, no se retirarán micrófonos ni se dejará de grabar en todo momento. Doctor Aiden Meyer usted está detenido por el asesinado de por lo menos 20 personas, no tiene derecho a pedir favores ni beneficios— frunce el ceño, adopta su papel de policía mala con torpeza y bravuconería —¿Qué es lo que desea para ayudarnos a encontrar a la asesina que usted dice que está detrás de las últimas muertes? ¿Por qué debería de creer que no es usted el autor de los últimos dos homicidios?

—Porque no soy tan burdo, me considero una mente creativa, claramente yo no hice esas bestialidades, mi trabajo habla por sí solo— sonrío orgulloso de los cuerpos que he dejado y eso parece irritarla.

—Bien, entonces hablemos usted y yo, ¿Qué es lo que quiere? ¿Salvarse de la pena de muerte? Podemos llegar a un acuerdo, con su declaración firmada y mi ayuda podemos salvarlo de la muerte, estará en una prisión de alta seguridad donde podrá convivir con otros reclusos igual de enfermos que usted.

—Ibas tan bien Clark, en verdad era sorprendente, podía sentirme en confianza, te vi como un policía cordial que buscaba lo mejor para ambas partes, pero tu última ofensa me sacó de ese círculo de confianza, me desilusionó, ¿Ahora entiendes porque quiero a Cárter? Claramente ella es mucho mejor policía que tú, además de su basta experiencia, no hubiera cometido el mismo error.

Veo como su rostro se ruboriza mientras le digo cada palabra con esa carga de desilusión, de decepción. Escucho que la puerta del otro lado del cristal se abre, levanto un poco la nariz y puedo inhalar ese aroma que tanto me embriaga, lavanda, cítricos, ese aroma dulce, pero que no empalaga, es ella.

«SIMONE»

—¿Cómo va el interrogatorio?— Por fin me animo a entrar y ver a través del espejo a Clark dándonos la espalda y a Aiden quien está con la nariz en alto, por un segundo podría decir que me está viendo fijamente a través del espejo, cosa que es imposible.

—Aiden solo se está burlando de ella— responde Jason con molestia mientras ve fijamente lo que ocurre.

—Las cosas no serán como tú quieres, te recuerdo que el que está en desventaja eres tú— escucho la voz de Clark, está sonando burlesca y amenazante, no debería hacerlo, por lo que conozco a Aiden y lo que he descubierto todo este tiempo del asesino, no es una persona que se tome las ofensas a la ligera. 

—Detective, ¿le molesta Cárter? La ve como una contrincante y no como una compañera, usted entró aquí para demostrar que puede hacer las cosas mejor que ella, ¿se sintió ofendida cuando la preferí a ella en vez de a usted? Claro que lo hizo, se sintió rebajada ¿no? Humillada por el mismo asesino, ni siquiera por su jefe. No te voy a mentir, físicamente considero a Cárter mucho más atractiva que tú, no solo eso, tiene elegancia, tiene buen gusto. Además de eso, bueno, ella estuvo en el departamento de narcóticos con una basta experiencia en atrapar delincuentes y tú… ¿has salido alguna vez de esta academia? Estudiaste aquí y trabajas aquí, en tu vida no has pertenecido a otro lugar que te brinde experiencia y algo de mundo ¿debo de continuar?— Veo como lentamente Clark empieza a perder la paciencia, algo no está bien, Aiden no solo quiere humillarla, lo sé, busca lograr algo más y eso me aterra porque en este punto no sé lo que es capaz de hacer.

—¿Crees que caeré en tu juego?— Le responde Clark con la voz irritada, veo en las pantallas su rostro, está saliendo de sus casillas.

—Creo que sé cuál es el mayor problema… ¿Es Jason? Cada vez que te he visto junto a él un júbilo se proyecta en tus ojos, estás enamorada de él ¿o me equivoco?, pero claro ahora que está Simone, Jason te ha dejado a un lado, recuerdo que empezaron a salir antes de que la agente Cárter llegara a nuestras vidas, pero no continuaron, creo que Jason encontró las mismas diferencias que yo, una persona mejor preparada y claro la belleza es un extra ¿No crees? ¿Qué percepción tienes tú de Cárter?