Capítulo 4.1: Viaje y cambio

 Decido que lo mejor es demostrarle mi poder a mi amiga y al final ver si hay algún cambio demostrable en su vida.

Al despertar me encuentro con ella tomándose la foto con otra vieja amiga llamada Lucy, como no recordarla si era un amor de persona y una loca en las fiestas.

—Nicole porque no vienes con nosotras al bar y tomamos unas fotos y tragos con mi novio Marcos— dice Alicia.

Recuerdo quien era Marcos y recuerdo porque lo mando a fregar, le fue infiel en algún momento de su vida no recuerdo porque, pero es momento de demostrar un cambio con ella.

Lo mejor que puedo hacer es quizás demostrar sus conversaciones, pero necesitare su teléfono de alguna forma.

—No sé si quiero ir a tomar— digo.

—Vamos, será muy divertido— responde.

—Puedo hablar con Marcos— digo.

Él se me acerca y con una voz de preocupado me dice.

—¿Qué quieres hablar conmigo? —

—Es de Alicia y es mi mejor amiga— digo.

—Eso lo sé —

—No quiero que le partas el corazón por serle infiel— digo.

—Creo que no sabes que mi reputación es más importante que tu mejor amiga, ¿verdad?  — responde.

En ese momento decido que lo mejor es mandarlo a la porquería y darle una patada en el estómago o en los bajos.

—Ella vale mucho más de lo qué tu eres — digo furiosa.

—Pobre Nicole, eres tan tonta como en la primeria— dice mientras se va.

Lo que no sabe es que logre grabarlo en mi teléfono así que se lo mandare por mensaje de texto a Alicia y no tener ningún problema. En ese momento comienzo a tener esa sensación de que regreso y me despierto en la cafetería donde mi café esta derramado y lleno de personas viendo y asegurándose que estoy bien.

—Te encuentras bien— dice Alicia.

—Si— susurro.

Me siento en mi silla y los meseros me llevan un jugo de naranja, uno de los consumidores es doctor y decide revisarme para asegurar que no me pase nada y por suerte fue el susto para ellos, pero espero que me sirva como evidencia.

—Dime, que lograste hacer con tus poderes— dice un poco sarcástica.

—Marcos— digo.

—Me mandaste un audio y luego lo corté ese día y así fue como conocí a mi esposo — responde.

La mejor prueba que tengo, Alicia conoció a su esposo en una conferencia de comunicaciones, logre hacer un cambio.

—Tengo la prueba contundente y ¿Quién es tu esposo? — Digo.

—El falleció— dice

—¡Disculpa! — digo.

—Murió en un accidente, que no lo recuerdas—

—Estuve ahí— digo.

—Si, íbamos los cuatro en ese accidente y fuimos las sobrevivientes—

—¡cuatro! — digo con un ataque de ansiedad.

—Maximiliano y Luis los conocimos el día que corte con Marcos y fueron nuestros esposos, dejaste tu carrera por quedar embarazada y pues ya querías divorciarte de él—

Lo mejor que puedo hacer es desmayarme o tratar de arreglar mi error.

Al despertarme me doy cuenta de que estoy en el sofá de mi amiga y ella está sentada al lado pero se levanta si darse cuenta de que estoy despierta y lo mejor que puedo hacer es tomar su teléfono y volver a viajar para no cometer ese error.

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