Efecto de Palabras

Racismo y yo nos encontramos un día.

 

Aun recuerdo como si fuese ayer, ese día mientras caminaba para ir a la escuela, como siempre iba cabizbajo, mirando por todos los lados a ver si encontraba unas monedas, si antes era fácil encontrar monedas en el suelo. De repente tropecé con alguien, cuando subí la cabeza, no podía creer lo que veía, pero el muy optimista y con todo el poder del mundo me grito, mira donde caminas negrito de mierda, solo tenía nueve años, para ese entonces, ese fue el día que lo conocí.

No entendía del todo, pero la forma en que el me hablo, entro en mis entrañas dejando me un sabor amargo que llevo desde el primer día que lo conocí, el así suelto, con esa libertad en los ojos, con esa destreza al hablar, como que el mundo gira en torno a él. Yo como siempre tímido, mirando donde pisar, recordando que debo ser cuidadoso, hablando en tono bajo aun cuando debería de gritar, dejando las cosas como son aun cuando se que me afectan a mí.

El con su historia articulada, con todos sus ancestros y linajes registrados, con su base de comienzo, con su cultura pura y santa, con su Dios incuestionable he omnipotente, a su imagen y semejanza, tan parecidos que nadie puede decir que no sean la misma persona. Yo, con lo poco que él me ha contado de mí, una historia basada en negatividad, y sufrimiento, con realidades que duelen solo de imaginarlos, solo conocí a mi madre y algunos tíos, y primos, no se de donde viene mi familia, el si lo sabe, pero no me lo quiere decir, al final entiende que no necesito saber lo, mi cultura es una mezcla de la suya, y lo poco que los padres de mi madre les dejaron, mi Dios no existe, nunca lo conocí, y aun si lo conociera, él se encargaría de hacerme saber que no es Dios, que es impuro, y que va en contra de su Dios el cual si es real.

El me mira y me dice, recuerda por quien estas aquí, quien te tiene vivo, quien te dio el nombre que llevas yo te cree así que, siempre estarás por debajo de mí, así lo manda Dios y así tiene que ser, solo así tendrás la oportunidad de vivir la vida eterna, así que calla y obedece. Yo con miedo de lo que pueda pasar, mas es lo único que sé, a final es lo único que se me ha enseñado, bajo la cabeza, acepto que soy impuro, acepto que algo mal hay en mí, le doy gracias por lo que me ha dado, y así olvido todo y me adapto a su mundo, a ese mundo que ha creado para él, y que en su bondad me ha dejado ser parte de ella… aunque aveces recuerdo el día en que el y yo nos encontramos por primera vez.



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En el texto hay: poemas cortos

Editado: 25.11.2020

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