Malcriado
No siempre fui un malcriado, recuerdo los días en que si hacía todo lo que me decían, hasta me quedaba callado teniendo la razón, bajaba la cabeza buscando no ofenderte, creyendo que hacía tenían que ser las cosas, mi calma llegó a ser tan grande, que da miedo saber que todo eso llegó a ser real.
Mierda! pa’ la vida, y todo lo que un día nos llevó a creer, haciendo que el dolor sea más imaginario que las mentiras. soy malcriado, porque la vida no es lo que imagine, soy malcriado porque no siempre tienes la razón, soy malcriado porque hay veces que tengo la razón.
No me enojo con la vida, pero si pudiera visitar a la muerte, tal vez buscando convencerlo de no ser tan imprudente, como todas las otras veces que ha visitado, llegando un los momentos menos deseados, eso donde es inminente el recordarle la madre a la vida.