XXIII

Un balde de agua fría. 

🌺 Julie Lewis 🌺

Entro a la última clase con la esperanza de que hoy sea un día mejor mucho mejor. Al terminar las clases me dirijo en busca de Henry, pero no lo encuentro así que busco a su hermano, no tardó el ubicarlo me acerco a él.  

—¿Sabes dónde está Henry? —cuestiono al tenerlo frente a mí. 

—No ha podido asistir hoy a clase, está en la casa. —una punzada de preocupación me invade. 

—¿Se encuentra bien? ¿Está mal? —cuestiono un poco preocupada. 

—Por supuesto que está bien, está de maravilla. Cuestiones de trabajo solamente. Bueno y no tan bien, el estar lejos de ti le d un poco de ¿Tristeza? Bueno si eso existe eso le pasa. 

—Crees que pueda ir a verlo a su casa o no es lo mejor. Es que no sé si él me quiera ver.  

—Le dará gusto saber que quieres verlo, adelante ve. 

—Gracias, nos vemos después John. 

Me doy la vuelta y busco un taxi para que me deje cerca de su casa, nunca tomo uno que me deje exactamente en ella, ya que me lo ha dicho muchas veces no confíes en todo lo que respire. Y confíe de más en él, cuando él no lo hacía.  

Le doy la dirección al taxista y en el transcurso le doy vuelta a lo que le pienso decir, no estoy tan segura de que le diré solo quiero verlo y tal vez podamos aclarar las cosas, poder empezar de nuevo.  

Me deja el taxi y camino hasta llegar a la casa de los hermanos, cuando toco un hombre que no ubico me abre la puerta. Y me mira mal. 

—Hola buenas tardes.  

—¿Qué quiere? —que mal educado es este. Le diré a Emmet que hable con él. 

—Vengo a ver a Henry, me deja pasar. 

—No tengo autorizado dejar pasar a ninguna mujercita, se puede retirar si es que no quiere problemas.

Este tipo me esta hablando así ¿a mí? Por dios, muy mal. Que error de su parte.

—Perdón, ¿Cómo que no puedo pasar? Hable con Henry y dígale que lo quiero ver. 

—El joven está ocupado, no creo que tenga tiempo para hablar con usted. —me mira de arriba abajo— Porque mejor no se va. 

—No me iré de aquí hasta que no hable con él, así que va viendo si usted le llama y le dice que quiero hablar con él, o yo misma le marco. 

Levanto la barbilla mientras cruzo mis brazosn en mi pecho, me mira mal y saca un celular.  

—Señor una joven quiere hablar con usted. Viene muy altanera.

No sé qué le diga Henry, pero el hombre rueda los ojos y me mira de nuevo mal. 

—No sé, deje le pregunto. —se dirige a mí con una mirada fastidiosa— ¿Su nombre?  

—Julie. —me limito a decir sonriendo. 

—Se llama Julie ¿Qué hago?  

Henry le dice algo más y cuelga, el hombre se dedica a guardar su celular y me mira de arriba abajo, jugándome. 

—Se quien seas no creo que dures en este lugar, o a su lado.  Vete despidiendo de él.

No respondo solo lo miro mal y Henry llega a dónde nos encontramos. 

—Cuando se trate de ella la dejas pasar sin preguntar ¿Entendido? —Le dice en tono serio. 

—Si, señor. 

Yo me adentro a la casa sin decirle algo al hombre me ha caído muy mal. 

—Es muy mal educado. Deverías enseñarlo a respetar ¿donde está el joven de antes? 

—Voy a enseñarle a que te respete a ti. No puede hablar mal de ti, se lo prohíbo. Lo educaré más tarde.

No digo más, me quedo en silencio mientras caminamos. 

—¿Has pensado las cosas? —me pregunta mientras caminamos hacia la entrada. 

—Por algo estoy aquí, quiero hablar contigo. Necesito que seas honesto conmigo, si sabes algo más o me ocultas algo más, está es la única oportunidad de que lo digas Henry. 

—Está bien, vayamos a mi despacho. Me da gusto que estés aquí. 

—John me dijo que no has estado bien. ¿Qué te sucede? —intento no sonar preocuda, pero fracaso.

—John no sabe lo que dice, me encuentro bien, aunque no negare que el que estés aquí me pone mucho mejor. 

Caminamos en dirección a su despacho, cuando llegamos me abre la puerta y paso primero. Me siento en la silla que esta frente a su escritorio y él se siente a mi lado girando la silla para tenernos frente a frente.  

—¿Hay algo más que tenga que saber? —cuestiono mirándolo a los ojos. 

—No hay nada más que te esté ocultado cariño, solo ha sido eso. —su mano se dirige a mi mejilla y la acaricia. 

—Siento que no te conozco nada Henry, no sé nada de ti, solo sé que trabajas para gente poderosa, que tienes un hermano. No conozco nada de tu vida, no se.... 

—Si es lo que te preocupa ahora mismo sabrás todo de mí, cariño. Quiero que estemos bien, no quiero estar tanto tiempo separado de ti.  

Su celular suena y maldice en voz baja, se para y camina hacia la habitación donde estuvimos juntos por primera vez. 

—Vuelvo en seguida.  

Se adentra y cierra, mi mirada se dirige a las fotografías que se encuentran encima de su escritorio todas son de él y John juntos, una que otra dónde sale Emmet. Y no hay más. 

Se escuchan solo susurros de la habitación sin embargo va elevando la voz y alcanzo a escuchar los que dice. 

—Owen, no tengo paciencia ¿Que te tengo que dar a cambiar de que me digas por qué corre peligro?  

Owen, ¿Porque está hablando con él, es sobre mí? ¿Por qué no me lo pregunta a mí? Frunzo y ceño y el vuelve a hablar. 

—¿Que la verdad? No le diré la verdad, me va a odiar si hasta ahora no me quería ver, me odiará y me sacará de su vida. 

Sigue ocultándome algo, no es totalmente sincero conmigo y eso me hace sentir decepciona, nuestra relación no da para más, se acabó, aunque me duela.  

—No, quiero que me digas porque mierda en peligro, quiero cuidarla. Joder, es mi novia y quiero protegerla. 

Quiere protegerme ocultándome cosas.