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Habían pasado unos días desde aquella noche que se había quedado en mi mente como un hermoso recuerdo.

Cada vez que ese pensamiento venía a mi cabeza sentía como una extraña sensación se había presente en mi estómago.

Sabía que algo había cambiado entre nosotros pero mis dudas y miedos seguían allí, no solo porque Brick había sido explicito en decir que quería intentar algo conmigo si no porque también aun debía decirle la verdad.

—Para serte sincero no quiero hacer ese trabajo —dijo Brick sacándome de mis pensamientos.

—Nos falta solo unos puntos ya verás que lo terminaremos en menos de una hora —dije intentando mostrar algo de optimismo.

El giro su cabeza para observarme cada vez que estábamos juntos hacia lo mismo.

Mirarme como si fuera algo que nunca había visto en su vida.

—¿Es necesario que discutamos aquí? —dijo una voz en medio del pasillo.

Brick y yo miramos hacia el frente justo a un lado de la entrada de la biblioteca habían dos personas.

Mientras más cerca estábamos pude reconocer que una de ellas era mi simpático compañero de trabajo.

—¡Oye! ¡Hola Astrid! —el levanto su mirada al verme pero su seriedad apareció al ver a la persona que estaba a mi lado.

La mujer que estaba en frente de Trevor se giró para observarnos.

—¡Trevor que sorpresa encontrarte aquí!

Volví mi mirada a Brick que solo hizo un gesto con su cabeza y miro a la chica que estaba junto a Trevor.

—Eh Lissy ella es Astrid —el miro a la de cabellos naranja que tenía la mirada sobre mi— y él es…

—Brick Colton —dijo ella dándole una rápida mirada a Brick— si nosotras ya nos conocimos antes. ¿Verdad Astrid?

Asentí con mi cabeza sintiéndome extraña por el comportamiento de Lissy. Al parecer no era la única que había pensado lo mismo porque mi acompañante no disimulaba para nada su cara de desconcierto.

—Nosotros ya nos íbamos —dije tomando el brazo de Brick.

—Gusto en verlos —se despidió Lissy.

Un encuentro que no sabía como describirlo exactamente.

Junto con Brick nos dirigimos hacia uno de los sectores de la biblioteca donde podíamos hablar sin molestar a otras personas que estaban en silencio.

Para mi suerte el lugar estaba prácticamente vacío por lo que encontramos mesa para los dos.

—No sé cuál de los dos te miraba más —dijo Brick tomando asiento a mi lado.

—Si eso fue algo extraño —dije mientras sacaba los libros de mi mochila— pero sé que son buenas personas los dos fueron amables conmigo.

La mirada de Brick seguía sobre mi, una de sus tantas miradas que significaban que estaba analizando algo.

Sin importar lo lindo que era debíamos concentrarnos en el trabajo y así lo hicimos. La mesa había quedado repleta de hojas sentí como el agotamiento empezaba a hacerse presente.

—¡Brick! ¿Estas prestando atención? —dije al ver que tenía los codos sobre la mesa y con sus manos cubría su rostro.

—Si te estoy prestando atención Astrid —dijo el soltando un suspiro.

—Nos falta un solo punto para terminar —dije sintiendo un poco de molestia por su actitud.

Brick se hizo hacia atrás apoyando su espalda sobre el respaldo de la silla.

—¿Qué harás esta noche? —pregunto el dirigiendo su mirada hacia mi.

Aquel día era la noche de pastas que siempre Chase y yo cocinábamos juntos para comer con mis hijos.

—Chase y yo vamos a cenar juntos —la sonrisa del rostro de Brick se esfumo.

—Veo que tú y él se llevan bastante bien —dijo el apartando la mirada de mi— es insoportable escuchar a tu otro amiguito decir “ay hacen bonita pareja” “tienen mucha química”

Al ver la imitación que hacía de Peter me provoco gracia y empecé a reír a carcajadas.

—Oye no rías que es algo serio Astrid —dijo el que intentaba mantener la seriedad.

Deje de reírme intentando recuperar el aire.

—Deberías dejar de darle importancia a los comentarios de otras personas.

—Solo veo como actúas con el —dijo Brick que lucía bastante serio.

En ese momento supe que lo que me estaba planteando no era broma. También sabía que a veces los celos de Brick lo llevaban a actuar de manera imprudente.

<< Debes hacer las cosas bien >>

—Brick yo… —justo en ese momento mi móvil me interrumpió.

Mire la pantalla y vi que era una llamada entrante de Chase, levante la mirada y Brick puso sus ojos en blanco.

—¿Por qué no contestas mis mensajes? Estamos esperándote a ti y a Colton.

—Estoy con Brick en la biblioteca —dije percatándome del silencio que se produzco del otro lado— ¿Chase?

—Estamos aquí en el patio interno —su voz se oía diferente.

—Ahí vamos —él ni siquiera se despidió y corto la llamada.

Brick tenía la mirada sobre mi, me puse de pie para empezar a guardar mis cosas.

La actitud de Chase seguía resonando en mi cabeza.

—¿Por qué te quedaste callada? —pregunto Brick que estaba de pie a mi lado también guardando sus libros— ¿Qué fue lo que te dijo?

—Nos están esperando afuera —respondí sin mirarlo.

—¿Y por qué estas enojada? —volvió a decir el— cuando te quedas sin palabras es porque algo no te gusto.

Levante mi cabeza mirando a Brick con el ceño fruncido.

Al mirarlo me di cuenta del rayito de sol que entraba por la ventana daba justo sobre sus ojos haciendo que se vieran de un color super clarito.

—¿Es por ese… ese amiguito tuyo? —Brick se veía expectante— ¿Sientes algo por él?

La pregunta de Brick me tomo por sorpresa algo que provoco que una mezcla de sensaciones dentro mío.

La mirada expectante de Brick, esos ojos que ya no se veían con molestia si no que mostraban un cierto temor.

Al notar eso en el, sentí como dentro mío se esparcía una sensación agradable pero a la vez que me recordaba toda la culpa que a veces sentía.

Ese Brick que estaba de pie en frente mío que tenía los mismos ojos que mis hijos, se estaba mostrando tal cual era.