Decepcionado de si mismo y de las palabras que salieron de sus labios de gran grosor, observa a su alrededor con tristeza a las parejas que ve pasar, en el carruaje, el solitario y pequeño carruaje donde el lo usa para regresar a su casa, es solo uno de los recordatorios de su realidad de soltero.
Su sirviente fiel que también es su mejor amigo, que lo rescato de su casa donde lo maltrataban cuando Alfonso tenia nueve años y Nicolas seis. Desde entonces, Alfonso juro ayudar al joven Bennet hasta donde su cuerpo soporte. Este fiel amigo conoce el secreto de Nicolas y quien trato de ayudarlo a confesarse pero nunca logro que aceptara tal reto.
En la Casa de Bennet, esperan a Nicolas con desesperación, una carta que en su contenido habla sobre el reclutamiento de Nicolas Bennet ha llegado a las manos de su madre quien también le dio la "terrible" noticia a su esposo, ambos lo esperan en su habitación.
Nicolas entro a la residencia y observo que los sirvientes están tensos, las miradas de entre ojo de ellos le indicaba que algo esta pasando, y no es para nada bueno.
Este subió a su habitación para preguntarle a Alfonso sobre la situación de la casa, no hay nada que no pase en la residencia sin que pase por el oído del rubio. Al abrir su habitación observo con tremenda ira como su amigo esta arrodillado con unos cuantos golpes ante su madre y padre.
Alfonso levanto la mirada en dirección al joven Bennet ─¡Se-ñor! ─ Exclamó con miedo ─ ¡No debió llegar ahora, mi señor!.
Un golpe hacia la cara se interpuso en el hablar de Alfonso, el padre de Nicolas había golpeado al pobre muchacho durante todo un rato, Bennet, al ver como trataban a su amigo, camina hacia su padre con un enojo inimaginable, cada vez que daba un paso, se escucha la fuerza e ira de este. Caspian Bennet, el Márquez en desdicha que se había casado con la primera princesa del imperio que ahora su propio hijo detuvo su puño antes que impactará otra vez en el joven rubio.
─ ¿Que estoy haciendo? ─ Se preguntaba Nicolas en su mente.
Caspian y su esposa Amalia se sorprendieron al ver que su único hijo defendió a un plebeyo.
Alfonso también quedo sorprendido, este con las pocas fuerzas que le quedan, se arrastro hacia Nicolas y mientras se aferraba al pantalón de su joven señor ─ ¡¡No debe hacer esto por mi!! ─ Estando apunto de derramar sus lagrimas, hablo otra vez ─ ¡Lo soportare! ¡¡Como las ultimas veces!!.
En ese momento se dio cuenta de sus palabras, Alfonso trato de corregir lo que sus labios dejaron salir pero fue en vano.
Nicolas ya había alcanzado su punto limite, miro con mucho enojo y decepción a sus padres ─ ¿Lo han estado golpeando... A mis espaldas?
Sus padres se quedaron mudos por unos segundos hasta que Amalia, su madre hablo ─ ¿Y tu crees que esta escena es para enojarse? Acaso... ¿no piensas en nosotros? El emperador Archie nos envió una carta diciendo que renuncias a tu puesto de secretario para ser un caballero.
Enseño la carta que su primo escribió y firmo, Nicolas se esperaba esto pero no tan pronto y menos que empezaran a golpear a su amigo, el pelinegro se quedo callado por unos segundos, pensando en que decir ya que esto no era planeado y no podía decir que salio de ridícula excusa tras ver una espada en la oficina de su primo, Nicolas tomo el valor de otra vez mentir pero esta vez no sabe si esto ayudaría y convencer a sus padres que Alfonso no tiene nada que ver en esto dado que en la lógica de sus padres, el rubio lo influenció para que dejase el puesto mas codiciado en el palacio.
─ ¿Y si mi sueño nunca fue ser secretario pero en cambio mi sueño es ser un caballero? ─ Dijo Nicolas sin pensarlo demasiado.
Sus padres mantuvieron la calma, ambos padres cruzaron miradas en señal que podían decir algo que posiblemente su hijo ya sabia ─ Nosotros sabemos que tu sueño no era ser un secretario, movimos algunos hilos para que tu lo fueras.
Nicolas no se sorprendió en lo absoluto, en cambio, el desde pequeño sabia que para obtener ese puesto debías pasar por diversas pruebas y que sus padres hicieron lo imposible para que ese puesto quede vacante para que Nicolas lo ocupe.
─ Lo sabia desde que era un niño, madre ─ Hablo Nicolas firme ─ Pero ya decidí, me convertire en caballero y me llevare a Alfonso conmigo ─ Dijo mientras levantaba con mucho cuidado a su viejo amigo ─ Alfonso, alista tus cosas, nos iremos ahora mismo ─ Dirigió una mirada amenazadora hacia sus padres quienes se quedaron sin habla por lo que su hijo dijo.
─ ¡No puedes irte así por así! ─ Exclamó su padre ─ Si lo haces te quitaré del registro familiar ─ Caspian amenazo.
Nicolas quien analizo la situación, no tenia dudas, el iba a aceptar la amenaza e irse junto con su amigo, ¿a que lugar?. El no sabe pero prefiere ser plebeyo antes que ver maltratado su mejor amigo. Alfonso vio en la mirada de este la determinación suficiente en dejar su hogar, el rubio desesperado le dice que lo piense bien ya que aquí no tiene que sufrir ningún problema ya que su familia tiene el dinero suficiente para tener lujos, Nicolas miro todos los golpes del rubio, su cara llena de moretones y de rasguños que posible fueron provocados por el anillo de boda de la marquesa, su ropa esta hecho un desastre pues el marques tiraba de su saco para levantarlo y volverlo a golpear, sus manos están rojas con inflamaciones provocadas por la faja de cuero que trae su padre, el calzado que Nicolas le regalo a Alfonso para su cumpleaños están destrozados y solo la hebilla esta intacta, ¿cuanto a sufrido mi amigo? Se preguntaba en su mente con dolor y angustia ¿Por que el debe sufrir por algo tan trivial? Seguía preguntándose.
─ No te preocupes, Alfonso ─ Susurro para el ─ Yo me encargaré de esto, tu descansa ─ El llamo a un sirviente que pasaba por ahí, el pide que lo lleven ante el doctor familiar y le curen sus heridas con el mejor tratamiento posible.El otro obedeció y se llevo a Alfonso quien en su mirar miraba con preocupación a Nicolas pidiendo que no haga algo imprudente.