La Caida

Fecha 26 de julio del 2238, han pasado ya casi 100 años desde el comienzo de esta catástrofe, mi novio Alex y yo (Sinthia), hemos estado vagando por todo el mundo, sobreviviendo, buscando en cada edificio abandonado, en cada casa que apenas se mantenga en pie, algo para comer, ya que lo único que ha sobrevivido en todo este tiempo es la comida enlatada, porque la tierra ya no es fértil desde ese día.

Todo se perdió, la tierra murió, al igual que los animales, lo único que no cambio es el agua, pero es difícil encontrarla, además se han formado varios grupos de bandidos que atacan a las personas como nosotros, tenemos que andar con cuidado, tomar las rutas más largas y hacer el máximo esfuerzo para no ser encontrados, solo así podíamos seguir con nuestro camino.

Llegamos a una montaña ya sin árboles, pero con muchas rocas, las cuales nos servirían para escondernos:

-Sinthia: cariño, ya no puedo más, por favor descansemos aquí. - mientras me sentaba sobre una roca.

-Alex: Está bien, aquí nadie nos podrá encontrar. -se sienta en otra roca al lado de Sinthia.

-Sinthia: en esta parte de la montaña hay muchas rocas, aunque ya no existan los árboles, las rocas no pueden esconder.

-Alex: Tienes razón. Ten, bebe un poco de agua, no es bueno que te deshidrates.-tendiendo su mano con la cantimplora que tenía un poco de agua.

-Alex: Amor, recuerdas como empezó todo esto.

-Sinthia: Sí, todo fue nuestra culpa, la culpa de todos.

En ese momento volvieron a mí todos los recuerdos desde el inicio de la catástrofe conocida como "La Caída".

Todo empezó el 14 de mayo de 2145, los líderes de más poderosos de mundo junto con las personas más ricas decidieron seguir el plan de la colonización de otro planeta, ya que habían descubierto que a este planeta no le quedaba más que 90 años más de vida, los muy egoístas, crearon una colonia para ellos solos, y dejar morir a 8 billones de personas. 

Pero no todo les resulto como planearon, porque, ya había alguien viviendo en su lindo paraíso y no le gusto mucho esas visitas, mientras en su colonia para millonarios eran atacados por algo que no podían de describir más como una criatura innombrable, en tierra, los científicos trataban de crear una forma de revivir la tierra y que esa predicción de muerte no se cumpliera, pero al igual que los ricos egoístas, su soberbia y altanería por jugar a ser dios, cometieron un terrible error.