El camino perfecto

7. Tu ex es una perra

Las llaves sonaron en la cerradura y la puerta se abrió dejando al descubierto a Sam, Emma y Kate me levante de un salto.

-¡Al fin!- exclame.

-Bien... ¿A donde van a ir?- pregunto Sam. Hice una mueca.

-Uhhh, eso no lo se- dije hundiendo mi cabeza entre mis manos.

-Toca el plan B- dijo Emma. ¿Plan B? ¿Ahh?

-¿Plan B?- pregunte sacando mi cabeza de entre mis manos.

-Si, adivinar. Lo que se nos da mejor- dijo encogiéndose de hombros.

-Bien, pues estamos en NY. Puede ser que te lleve a un bar, o a casa de uno de sus amigos, o al Central Park. No, ese ultimo no, a estas horas esta cerrado.- dijo Sam.

-Bueno, hagamos algo- comenzó Kate- Vamos a tu habitación y tomemos las prendas que se podrían utilizar en cualquier ocasión- sugirió.

-Bien. En realidad creo que esa idea es muy buena- una luz de esperanza brillo dentro de mi. Subí las escaleras corriendo con Kate, Sam y Emma siguiéndome. Me hicieron a un lado y comenzaron a registrar mi closet. Me senté en la cama viendo como tiraban ropa a mis lados. Después de casi una hora buscando ropa termine escogiendo un blue jean de corte alto (cortesía de Sam), un suéter negro con escote en V y unas zapatillas plateadas. Emma se encargo de mi maquillaje dejándolo a la ligera y resaltando mis ojos grises, mientras Kate acomodaba mi cabello suelto. Sono el timbre y las chicas bajaron corriendo. Me mire en el espejo orgullosa del trabajo que habían hecho y baje las escaleras, tome mi cartera plateada, metí un brillo labial y mi celular dentro, y Salí. Le eche un vistazo a Chase que estaba apoyado en la pared junto al ascensor vestido con unos pantalones negros y una camisa Adidas blanca. Sonrió al verme.

-¿Lista?- pregunto. Asentí. Miro mi ropa y luego volvió a mis ojos.

-¿Que? ¿Hay algo mal? ¿Tuve que ponerme tacones, no?- hizo una mueca y luego negó con la cabeza la puerta del ascensor se abrió.

-Estas bien- dijo saliendo. Al notar que no lo seguí se detuvo y se giro hacia mi.- ¿Pasa algo?- pregunto.

-¿A donde vamos?- pregunte clavando mis ojos en el.

-A un club, esta un poco lejos de aqui. Mis amigos y yo siempre vamos- respondió tratando de adivinar mis intenciones. Pulse el numero de mi piso en el ascensor- ¡Candace! ¿Que haces?- pregunto preocupado. Asome la cabeza antes de que se cerrara.

-A cambiarme- dije sonriendo. Al llegar a mi puerta saque las llaves de mi bolso y abrí.

-¡Oye! ¿Que haces aqui? ¿No te habías ido con Chase?- pregunto Emma.

-Si, pero vamos a un club, así que voy a cambiarme- dije subiendo las escaleras.

-Yo que tu solo me cambiaría los zapatos- dijo Sam. Asentí, era buena idea. Me pare frente a mi espejo de cuerpo completo (situado en el armario) y cambie mis zapatillas por tacones negros, como mi suéter era de una especie de tela elástica y se ceñía a mi cuerpo, estilizando mi figura, lo metí dentro de mis pantalones, deje mi largo cabello suelto y baje rápidamente las escaleras. En el ascensor pulse unas cuantas veces el botón para que se apurara, al abrirse las puertas en el estacionamiento corrí hasta que divise a Chase recostado contra su camioneta y escribiendo algo en su teléfono. Levanto la vista hacia mi cuando escucho el sonido hueco de mis tacones contra el asfalto.

-¿Ahora si estas lista?- pregunto irritado. Sonreí.

-Sip- respondí subiéndome al asiento copiloto.

-No entiendo para que te cambiaste, estabas bien así- dijo conduciendo por las permanentemente iluminadas calles de la ciudad de Nueva York.

-Si, pero quiero dar una buena impresión. Y apuesto a que la mayoría de las chicas en ese club tendrán mini faldas, escotes y altísimos tacones- dije encogiéndome de hombros- Ademas, así me veo mejor ¿o no?- Una sonrisa se escapo de sus labios.

-Siempre te ves bien con todo dijo- Su comentario me tomo con la guardia baja. Esperaba un comentario sarcástico, natural en el. Pero su sinceridad me tomo desprevenida. Así que lo único que se me ocurrió fue sonreír. Tras unos 30 minutos de silencio (exceptuando la radio y canciones que me sabia, y cantaba) Chase aparco en el estacionamiento de un club muy lujoso. Al ver las chicas que entraban con minifaldas y vestidos que no dejaban mucho a la imaginación, lamente no haberme puesto un vestido.

-Estas bien, cálmate- dijo Chase como si leyera mis pensamientos. Relaje mi postura y antes de entrar retoque mis labios. El letrero fuera del club y su fachada daba a entender que no cualquiera entraba ahí. "The Ocean Club" era moderno y sofisticado, con un segundo piso V.I.P para personas que querían un poco mas de privacidad y tranquilidad que las que estaban en la pista de abajo. La música inundo mis oídos y la preocupación mi cabeza. Aun no me sentía segura con mi ropa. Chase le enseño un pase rojo con el nombre del club al guardia en el principio de las escaleras, este nos vio y levanto la pequeña cinta roja para darnos paso. Al llegar al segundo piso me impresione aun mas al ver la decoración, las mesas de vidrio con chicas y chicos sentados en ellas, una terraza, un salón oculto tras una puerta negra en el que había un guardia afuera. Habían unas pocas mesas con vista a la pista de baile, una puerta que daba al balcón y un bar a la izquierda de las escaleras. Una chica con el cabello marrón hasta la cintura, pantalón y un top cruzado corrió hacia Chase en cuanto lo vio. Me alegro saber que no era la única con un pantalón.



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En el texto hay: karma, drama, comedia humor

Editado: 29.10.2018

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