El corazón del ángel

Capitulo 15; Luz y Oscuridad

(Bella P.O.V)

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—Les voy a contar la historia, que al menos nosotros… los de nuestra especie,  consideramos oficial —comencé a hablar despacio.

 

Todos asintieron, aunque me veían con una mirada extraña. Di una respiración profunda. Recordé que mi hermano había dicho que Rafael había traído Bourbon, así que rápidamente fui a la cocina por una botella para darme valor.

 

—No se sabe con exactitud cómo se creó todo lo que conocemos actualmente —dije mientras regresaba a mi lugar, pero ahora con una botella en la mano.

 

—Se dice que antes del inicio de los tiempos, simplemente no existía nada. Pero no podía quedarse así por mucho tiempo —los vampiros me miraron curiosos. Rafael me miró sonriendo, estaba repitiendo las palabras que un día él nos contó a Raz y a mí. —Se creó un universo, estaba lleno de materia, de energía, de espacio, de tiempo, gases, polvos cósmicos, galaxias. Dentro de estas galaxias se crearon estrellas, astros, planetas.  Y de todos esos, se creó uno especial; La Terra.

 

»Un planeta hermoso a la vista, pero indomable, inhabitable, solo y desordenado. Se tenía que encontrar una manera de limpiarlo, para poder llenarlo de creaciones hermosas.

Así que se creó la luz, pero cómo estamos hablando de un universo de opuestos, también se creó la oscuridad. —tomé un respiro para seguir hablando. —Así que nacieron siete seres de luz y siete de oscuridad que ayudaron a limpiar la Terra.

Por su naturaleza, no podían trabajar al mismo tiempo, así que se turnaron. Y en un descuido, crearon el día y la noche.

 

—Cuando terminaron su trabajo, se dieron cuenta, que sobre él planeta que habían limpiado, había hermosos paisajes con mares, océanos, tierras con montañas, nieve, vegetación de todo tipo, criaturas andando por todos los lugares, diferentes temperaturas, climas diversos. El lugar que antes había parecido grotesco, ahora era hermoso. —Raz continuó hablando en mi lugar.

 

»Los catorce seres se enamoraron de su trabajo. Fueron libres de andar por los lugares, de explorarlos, de disfrutar lo que el planeta les ofrecía. Le pusieron nombre a todo lo que veían. Así fue por mucho tiempo, hasta que se toparon con un ser que les resultó extraño —sonrió por lo bajo— Era similar a ellos, pero no tenía luz y tampoco tenía oscuridad.

 

—Los seres, felices con la criatura nueva al que llamaron humano, volvieron a recorrer la Terra para mostrarle todo lo que había en ella. También decidieron compartirle sus conocimientos, pero, se dieron cuenta que conocían distintas cosas. —volvía  a ser mu turno de hablar, pero miré de reojo a Gabriel. Su mirada me miraba incrédula, no sabía hacia donde iban mis intenciones— Los seres de luz, en el día veían unas cosas, compartían momentos con ciertos animales, aprendieron a utilizar los recursos de una manera. Los seres de oscuridad conocieron otros animales, aprendieron cosas diferentes, su planeta actuaba diferente en la noche.

 

»Cada lado quiso que sus conocimientos fueran tomados cómo únicos y correctos. Así que comenzó una guerra para decidir qué lado tenía la razón.

Ambos lados eran muy fuertes y poderosos, y para no destruir su precioso planeta, comenzaron su guerra en el universo. Éste, enojado con los seres, los expulsó de la Terra.

 

—Los seres de luz fueron enviados al Caelum, y se llamaron ángeles. Los seres de oscuridad fueron enviados al Infernum llamándose demonios. Y el humano se quedó solo en la Terra. —Rafael hablo con voz misteriosa.

 

Raz se acercó a mi lado con un vaso con hielos, le sonreí agradecida y me serví un trago. Mire a todos en la sala. Tenían una mirada llena de sorpresa y admiración, los distintos ojos me miraban atentos esperando que continuara.

 

—¿Cómo encontraste mis botellas? —Rafael me miraba divertido.

 

—No eres bueno ocultándolas —me encogí de hombros y bebí el contenido de mi vaso.

 

—A pesar de que el universo estaba molesto con los seres, les dio un regalo por haber reparado su planeta. —Raziel siguió hablando— Les dio conocimiento, algo que ni siquiera el humano tenía. Conocimiento sobre todo lo que se puedan imaginar.

 

»Cuando los demonios probaron el conocimiento; hechizos, conjuros, ciencia; solo desató en ellos hambre de poder, envidia, codicia, lujuria, odio, pereza, muerte. Esos siete seres se volvieron malos.

 

—Los ángeles en cambio, aprovecharon ese conocimiento para crear nuevos compañeros, y pudieron establecer un orden para que su nuevo reino funcionara a la perfección. Les pusieron pruebas para poder crear grupos. —ahora era turno de Rafael para hablar, a final de cuentas él conocía bien el tema.

 

— A los más fuertes los llamaron Gobernantes, y dentro de ese grupo estaban los primeros seres se llamaron Arcángeles; por su fuerza, su antigüedad y sus conocimientos.

A otros los llamaron Principados; los llamaron guardianes de Caelum, les encomendaron supervisar esos eventos que pudieran destruir la paz.

Otro pequeño grupo se llamó Virtudes; ellos debían mantener la luz en el universo.

 

»Otra clasificación se llamó Consejeros, y dentro están las Dominaciones; que reciben órdenes de los gobernantes y regulan las actividades de sus inferiores.

También están los Tronos; que debían registrar todas las acciones de todos los seres.

Y las Potestades; que al tener dones, iban a buscar al mejor postor para distribuirlos.

 

»Por último pusieron a los Servidores, los Serafines y Querubines debían servirle al jefe de todo. Es su única tarea.




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