El Diario de James Mildway

CAPITULO XVIII: UNA EXTRAÑA NOTICIA

Acabamos nuestras cervezas y fuimos a casa, le pagué a Howard lo que consumimos y fuimos para ver si todo estaba bien, al llegar Allice y Annie estaban en el jardín se notaba que estaban preocupadas pero no por nosotros, era algo que había pasado.

-Allice- dijo Kokone- ¿Todo bien? Las noto raras ¿Dónde está tu padre?- Allice pensativa aún lo miró.

-Está adentro en su recámara, hoy nos dieron una noticia algo inquietante, será mejor que vayan a verlo los estaba esperando.

-Muy bien Allice, vamos Mildway- Al decir esto empezó a caminar hacia la casa. Annie se acercó a mí.

-Oye James cuando acaben con mi padre quiero hablar contigo-

-Claro señorita Annie recién terminé con su padre iré a buscarla.- seguí a Alexander hacía la habitación de Maximillium. Cuando llegamos Maximillium salió de su habitación y nos miró a ambos.

-Alexander, James, me alegra que ya estén aquí.

-Señor Cleever nos ha llamado dígame si le pasa algo.

-James estoy preocupado, hoy recibí una noticia inquietante la familia Rivens ha sido aniquilada junto con la ciudad Comstown por favor les quiero pedir que vayan allá para investigar qué ha pasado, no estoy tranquilo con esa noticia.

-Pero señor Cleever si vamos Allice y Annie estarán desprotegidas.- dijo Kokone y siento que tenían la razón, nunca pensé decir que él tenía la razón.

-Descuida Alexander ellas estarán bien díganme si pueden ir.- ambos asentimos.

-Bien Mildway habrá que prepararnos saldremos en una hora, señor Cleever nos retiramos.

-Claro Alexander vayan con cuidado no se confíen.

-Sí señor- Cada quien fue a prepararse, Maximillium se quedó en su habitación y yo fui a la mía solo tomé un par de pociones y mis espadas, me cambie de ropa rápidamente y salí a ver a Annie. Estaba en la cocina con Annie.

-James quiero saber desde cuando Alexander ya no te llama alquimista, ¿Qué ha pasado entre ustedes?

-Es curioso que pregunte, simplemente Kokone y yo nos entendemos peleando como hombres, eso es todo señorita.

-Ya veo James, cuídate por favor aún tienes deber aquí conmigo así que espero regreses pronto y cuida de Alexander por favor.

-Claro señorita Annie usted también cuídese.- Al decir esto me levanté y fui a ver a Alexander que se estaba despidiendo de Allice.

-Mildway es hora de irnos vamos- caminó hacía un auto y yo lo seguí, subió al auto y luego subí en el asiento del copiloto, debo admitir que estas personas tenían cosas bastante lujosas.- Será tardado llegar Mildway así que espero no te aburras ni hagas berrinche.

-Que gracioso Kokone- dije mientras veía el camino para salir de Deryville, había pasado casi tres meses en esta ciudad y ahora la dejaré para averiguar más sobre la familia Rivens, iba a aprovechar esta oportunidad para sacar información de ese alquimista Peter Rivens.

Alexander tenía razón el camino era largo y no platicamos mucho, solo sobre la relación que tenía con Maximillium pero por suerte no dijo nada sobre Allice, me di cuenta de que Alexander al igual que yo confiaba demasiado en Maximillium, aunque al principio él dudaba, Maximillium lo aceptó en su familia al grado de que dejó que se comprometieran.

Después de varias horas de largo viaje llegamos a nuestro destino, al momento la imagen de ese lugar nos dejó pasmados, bajamos del auto y lo vimos sin poder creerlo, toda la ciudad había sido devastada, todas las casas habían quedado en ruinas, empezamos a investigar todo lo que pudimos, Alexander fue directamente a la casa de los Rivens pero solo encontró ruinas de lo que había sido una lujosa mansión como la de los Cleever no había ningún cuerpo por ningún lado pero no había duda ese lugar apestaba a muerte como en las arenas.

-Mildway todo esto fue destruido por esas bestias.

-Eso parece pero aquí hay algo más Kokone- me agaché y examiné el suelo donde no había huellas- observa no hay huellas, si atacaron esta ciudad la gente debió correr, aun así no hay huellas es como si hubiesen corrido y luego destruyeron la ciudad.- En ese momento escuchamos pasos detrás de nosotros.

-Mildway ten cuidado.- volteamos los dos y era un Cold Hunter que parecía una avispa.- Acabemos con él luego investigamos.- Alexander se lanzó contra el Cold Hunter usando la espada Cleever pero el Cold Hunter detuvo su ataque con dos de sus patas sin ningún problema, lo lanzó pero Alexander se pudo detener en cuanto llegó al suelo.



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En el texto hay: ciencia ficcion, romance, fantasa

Editado: 05.04.2020

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