9 Capitulo

Observaba a los dos guardia con odio,  mientras el sonido de la sirena era constante, los dos policías guardaban silencio, yo suspiro tratando de controlar mi rabia pensando en lo que había pasado: maldito viejo asqueroso lo matare sin dudarlo, observaba la ventana hasta que pasaron los minutos, o más bien horas.

Al llegar el policía abre la puerta y toma de mi brazo yo automáticamente cojo mi diario y me dejo llevar, el lugar era asqueroso, el olor a tipos borrachos, violadores, adictos de toda clase, hombres negros y blancos gritaban a través de las rejas mientras estiraban sus manos como leones esperando su presa, me llevan a un calabozo muy lejos de todos, cosa que agradecí a los cielos me quitan las esposas y se escucha detrás de mi espalda el candado de la reja, observe a mi alrededor totalmente frustrado como pude confiar en un maldito viejo, pensé que podía confiar en alguien, soy un idiota; me recosté en la cama y empecé a escribir en mi diario esperando que el destino se ocupara de mi karma, lo único que podía hacer era morir, ya no tenia a mi madre, mi familia nunca le importo mi existencia, el amor de mi vida ya no la podre volver a ver y sobre todo mate a dos personas logrando escapar pero a la final la vida te cobra lo que haces, mientras estaba concentrado escuchando no escuche la voz de un guardia aclarando su garganta : Eithan… si no tienes abogado el gobierno te dará uno, mañana tienes cita con el juez come algo; comento el guarda dejándome en el suelo una bandeja de un arroz que olía asqueroso, una comida pasada de hace un mes y un jugo que poco a poco se empezaban acercar las moscas, jamás me comeré eso…. Digo mientras observaba la bandeja … poco a poco se fueron acabando el arroz, el jugo, la sopa, mi cabello crece a medida del tiempo, y si… ya llevo 3 años de 10 años que me esperan el día del juicio el juez me condeno a 10 años por homicidio varios testigos salieron a mi contra cuando rodee al tipo por las escaleras, las cámaras de seguridad fueron clave cuando mate aquel enfermero y observaban mi huida ¿y George? El viejo que me delato y me puso en toda esta mierda, Era un vendido del FBI le ofrecieron dinero por delatarme y al final murió de un paro cardiaco, Sali en las noticias varias veces, nunca logre hacer amigos en la cárcel, mate mi confianza el día que mi hermosa Elizabeth jamás me volvió a visitar ni ver, aun guardo el collar que me dio, aun reservo su aroma hasta el día que me muera, mas de una vez trate de suicidarme, me tire de la piscina en la parte honda pero siempre lograban resucitarme, guardaba navajas que hice manualmente en la cafetería cortándome las venas pero era inútil, ya pronto mi diario va a terminar y no se que hare después, Dios solo dame la respuesta correcta para saber que hago con mi vida
Eithan… Eithan…- se escucha la voz de una chica totalmente dulce-

Alzo mi mirada bajándome de la cama observando a Elizabeth totalmente sorprendido este lugar no es para ti mi ángel ¿Qué haces…en un lugar frio, oscuro, y feo no es apto para ti… shhh- dice ella acariciando mi mejilla de forma delicada- te ha crecido la barba, suelta una pequeña risa y yo simplemente me derrito el guardia abre la reja y ella entra abrazando mi cuerpo uniendo sus labios con los míos, el cual yo correspondo sin dudarlo, Elizabeth… llevaba unos jean deportivos color azul y una camisilla color blanca, estaba con un aspecto horrible pero para ella estaba hermoso.

Lamento la demora, tuve problemas y…-se separa sonriendo observando su cartón de grados- ¡ya soy toda una profesional! Abro los ojos sorprendido y la abrazo feliz rodeando su cadera besando sus labios nuevamente- felicidades Julieta eres toda una chica profesional- esto lo hice por los dos romeo, sé que te pondría feliz la noticia a pesar de todo lo que estas pasando, nos separamos un momento para tomar nuestra mano y caminar a la cama tomamos asiento y yo la abrazo nuevamente cayendo juntos a la cama, yo sobre ella y ella capta el mensaje, me acaricia mi cabello guardando silencio unos momentos- Eithan… se que lo hiciste en defensa propia pero escuche que si haces trabajos comunitarios podrías…. Shhh digo posando mi dedo en su labios,- no hablemos de esto por favor… quiero tenerte conmigo, cuando salga de esta mierda y mi vida este nuevamente en orden te buscare, tendremos hijos y vamos a vivir en una gran mansión y te voy a mantener

- ¿Cuántos hijos disculpa? Dice ella soltando una pequeña risa mientras acaricia mi flequillo

- Uno… uno es suficiente no quiero criar más de dos – respondo sin dudarlo apoyando mi cabeza en su pecho

- ¿y como lo llamaras? Continua ella acariciando ahora mi espalda esperando mi pregunta

- Si es niño sky si es niña, Julieta…

- Suelta una risa divertida asintiendo leve- dijiste que uno, pero amo los nombres de nuestros hijos, dice ella feliz y yo le sonrió, nuevamente mi oscuridad tiene luz y se llama Elizabeth.

Oye Eithan podemos hacer que este lugar se convierta en nuestro nido de amor ¿quieres saber cómo? Dice ella coqueta empezando a subirse sobre mi cuerpo, empezando a besar mi cuello, luego mis labios, yo dichoso la tomo de las caderas correspondiendo aquellos besos tan dulces, tan suave, tan únicos, tan ella, mis manos acarician su espalda debajo de su camisa, su piel el tacto de la yema de mis dedos hace que se estremezca mientras yo muerdo con delicadeza su labio inferior, ella se acomoda sentándose sobre mis piernas y se quita su camisa, yo me reincorporo un poco, y me quito la camisa, beso su abdomen y pecho quitando su sujetador, ella gime de forma suave, mientras beso todo su pecho, cada parte de su cuerpo, de su piel de su alma es besada mientras ella acaricia mis hombros, besa mi cuello y pecho, me acuesto nuevamente observando cada facción de su rostro, es un hermoso ángel, no te quiero olvidar mi bella princesa, mis manos tocan la suya, mis manos ahora bajan a su falda y yo le acaricio su muslos y traseros mientras los besos se hacían cada vez mas apasionados, sin mas mi miembro empieza a excitarse y ella lo siente, solo sonríe y me dice cuanto me ama, que me esperara toda la vida si es necesario, yo me pongo ahora sobre ella tomando su pierna derecha sobre mi cadera, ella solo suspira y a continuación lo que se escucha, donde era un maldito hueco, un maldito lugar de mierda, era ahora nuestra cueva de amor, es llenado de gemidos de amor, y pasión.