CAPITULO 4

Mi hermano y mi cuñada estaban impactados, aunque no creo que mas que yo al verlo hay de pie en medio de la cocina de mi casa, donde claramente mi hermano lo veía con cara de querer matarlo y mi cuñada me miraba como esperando una reacción de mi parte.

-Hilary, ratoncita me alegra ver que te encuentras bien- me dijo el con una sonrisa que seguramente antes me hubiera hecho mojar las bragas y llamándome con ese estúpido apodo que sabia que en su momento me había gustado que me llamara así, pero no luego de que se fuera y me dejara aquí hecha un manojo de nervios y lagrimas.

- ¿Qué haces aquí Marcos?- pregunto mi hermano con un tono de desprecio y odio hacia Marcos, siempre sospeche que a el nunca le había caído bien Marcos y aun así no le hice caso a sus advertencias sobre el.

- Marcos se va a quedar un tiempo con nosotros, ya que sus padres tienen que resolver ciertos problemas y me pidieron el favor de dejarlo quedar con nosotros- respondió mi madre- así que les pido a ustedes dos que tengan mas respeto hacia el- dijo mientras nos señalaba a mi hermano y a mi con una mirada acusadora, como si nosotros hubiéramos hecho algo malo.

-Pero...- dije ya con ganas de llorar, todos los recuerdos volvieron a mi, desde que nos conocimos hasta cuando me maltrato física y psicológicamente.

- nada de peros, el se quedara con nosotros y punto- dijo ya con cara de tener poca paciencia- he dicho mango picho- y sin mas salió de la cocina, dejándonos a todos sumidos en un silencio incomodo.

era claro que ni mi madre ni mi padre sabían sobre lo que yo había sufrido cuando estuve con el, los únicos que lo sabían eran mi hermano  y su novia.

- bueno...- Becca hablo incomoda con la situación, era entendible a ella tampoco le termino de cuadrar Marcos

- mira pedazo de idiota te quiero lo mas lejos posible de mi hermana- esta vez el que hablo fue mi hermano.

- ¿y quien me prohíbe acercarme a ella? ¿tu?- le responde el idiota con cara de suficiencia y estoy segura de que si mi hermano se para mas derecho se vería mas imponente

claro esta que el es mas alto que Marcos, mi hermano iba a refutar cuando escuchamos la puerta principal ser abierta por la cual ingresa mi progenitor con una mujer la cual se que no es mi madre por que ella subió a su habitación y están besándose.

y todo sucedió en cámara lenta, mi madre iba bajando cuando ellos ingresaron a la casa desasiéndose de sus prendas en el proceso de llegar al sofá, ellos no notaron nuestra presencia si no hasta que mamá le grito y empezó a golpear a mi progenitor quien claramente al verla a ella y a nosotros en casa quedo mas blanco que el papel.

mi madre lloraba con desesperación exigiéndole una explicación a lo cual el vio a su amante, quien debo decir parece que tiene nuestra misma edad si no es que menos, la vio con desprecio al igual que a al hombre que se hacia llamar "mi padre", ella pidió disculpas y se fue de la casa tal y como llego, para ser una mujer que se metió con un hombre casado no me daba el aura de ser mala persona, ya la encontraría y hablaría con ella sin que nadie supiera

nosotros cuatro seguíamos como estatuas en la cocina mientras escuchábamos a mis padres discutir a mi madre reclamándole y a mi padre diciéndole que se callara.

- quiero el divorcio- hablo mi padre con voz demandante

- para irte con esa mujerzuela, y dejarme sola con tus hijos- le grito ella

- si no te has dado cuenta Larissa ya son bastante mayorcitos como para que yo los este manteniendo- le respondió de la misma manera fría

- ¿hace cuanto?- esta vez la que pregunte fui yo, cinco pares de ojos se voltearon a verme- RESPONDE HACE CUANTO ENGAÑAS A MAMA O ES QUE YA SE TE FUE LA VALENTIA CON LA QUE LE ESTABAS PIDIENDO EL DIVORCIO HACE UN MOMENTO- esta vez lo grite por que ya estaba harta de que siempre pelearan y todo por culpa de ese hombre que hasta hace unos minutos creía mi héroe, siempre tuve una buena relación con el hasta hace unos cuantos meses.

- no me hables así jovencita, soy tu padre y me debes respeto- me dijo con cara enojada

- TU NO ERES MI PADRE  Y POR SI NO LO SBIAS EL RESPETO SE GANA Y TODO EL MINIMO CARIÑO QUE ALGUNA VEZ TE TUVE AHORA SE VOLVIO EN ODIO Y REPUGNANCIA- le ladre, todos me miraban sorprendidos incluso ese hombre, como si yo no fuera yo misma en ese momento, pero tenia lógica nunca le había levantado la voz a ninguno de mis padres, hasta ahora

- no te atrevas a desafiarme- respondió apretando los dientes

- pues si lo hago, por que tu no eres mas que un imbécil que se cree mucho solo por tener a muchas mujeres detrás de si- ahora si se había enfurecido- y déjame decirte que esas mujeres con las que te acuestas desde hace sabrá Dios cuanto tiempo no te van a recibir con los brazos abiertos cuando sepan que no tienes ni donde caerte muerto, por que si no sabias el abuelo nos dejo toda su herencia a mi hermano y a mi así que te vas a quedar sin un solo peso- hable soltando toda la verdad.

luego de que el abuelo falleciera en un accidente su abogado nos llamo a mi y a mi hermano, al principio no sabíamos para que era, pero dado el caso de que solo nos dijo a nosotros dos asumimos que tenia que ver con el abuelo y no estábamos tan equivocados después de todo, el abuelo nos había dejado toda su fortuna, que claramente nosotros nunca le dijimos a nuestros padres por la sencilla razón de que mi progenitor apostaría el dinero y probablemente quedaríamos en la calle.

-que..... ¿ que has dicho?- aclaro su garganta 

- lo que acuchaste, el abuelo nos dejo todo su dinero a mi hermana y a mi ya que nunca confió en ti por que sabia que lo apostarías y terminaríamos durmiendo en un  banco de la calle- esta vez el que hablo fue mi hermano, con mirada retadora

- ¿tu lo sabias?- esta vez volteo hacia mama, quien no respondió al instante por que estaba conmocionada ella no estaba enterada- CONTESTA, TU LO SABIAS, SABIAS QUE MI PADRE LE DEJO TODO SU DINERO A ELLOS- esta ves le grito provocando que diera un salto por el susto y que mi hermano y yo nos miráramos y procediéramos a tomarlo de los brazos y sacarlo de la casa sin remordimiento alguno.