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Narra Julio.

El gran maestro le ordeno a Jasón a entrenar durante horas, pasamos como 11 días entrenando sin parar, estos 11 días me vinieron bien para conocer a Jasón mucho mejor, al parecer, él nunca le quiso hacer daño a nadie y, de hecho, el solo hace lo que El gran maestro le dice, ya que si no lo hace el encerraría a Jasón por miles de años y el tomaría el control de todo.

Jasón entreno durante días y nunca paso nada malo, pero el día de hoy vimos que Mauro se nos acercó un poco, Jasón no le hizo nada, ya que no parecía un problema.

Aunque solo pasamos 11 días entrenando el gran maestro creía que Jasón ya estaba listo para pelear contra mis amigos sin dificultad alguna.

Este día Jasón debería atacar el reino y, aunque Jasón me caía un poco bien, no podía creer que él se dejara llevar por su estúpido maestro.

Ya habíamos llegado al castillo y a lo lejos se podía ver a Leo en el balcón mientras tomaba algo, ahora que me acuerdo, Leo debería ser el rey, ya que Jasón mato a su padre.

En el momento justo en el que Jasón iba a atacar el reino, empieza a llover y a caer truenos, pasamos caminando por todo el reino y nadie se preocupó, porque yo estuviera ahí, pero, un humano se intentó abalanzar contra Jasón.

-agárralo del cuello-le dijo el gran maestro-y después tíralo fuera-

Jasón hizo exactamente lo mismo que dijo el gran maestro.

De camino al castillo nadie más se atrevió a atacar a Jasón, este se paró al frente de las puertas del castillo, Jasón saco su espada, partió la puerta de madera y entro al pateo del castillo, los guardias se fueron acercando y todos apuntaban a Jasón, o con lanzas, o con ballestas.

-mátalos a todos Jasón-dijo el gran maestro mientras se reía.

Jasón intento refunfuñar, pero, él sabía que si lo hacía acabaría encerrado por miles de años, dicho esto, Jasón se abalanzo contra los guardias, algunos se acercaron con las lanzas, así que Jasón pateo las manos de todos los guardias que se estaban acercando para quitarles las lanzas y, después de eso, Jasón les corto por la mitad a todos.

Algunos guardias empezaron a lanzarle flechas con sus ballestas y Jasón solo las esquivo como si nada, después de esto se abalanzo contra ellos, les clavo su espada y a algunos les atravesó todo el estómago con solo su mano, a algunos los decapito con solo un golpe en la cara.

Todo parecía despejado ahora, pero, cuando Jasón intento entrar, fue atravesado con una flecha en el estómago, eso me dolió a mí también, Jasón se sacó esa flecha y la partió, al hacer esto, esa parte de mi cuerpo también se restauró.

Jasón se abalanzo contra el que le había clavado la flecha, le corto las piernas, a continuación, los brazos y se los fue comiendo rápidamente, eso me lleno de un mal sabor de boca, pero, que podía hacer, estoy atrapado aquí para el resto de mi vida.

Después de arrancarle las extremidades al guardia, alzo su espada, se la clavó en todo el pecho y la fue bajando, solo para hacer una abertura en la cual se le podían salir todos sus órganos.

Jasón procedió a entrar al castillo, pasillo por pasillo, el solo iba matando a todos, hasta que llego al último pasillo, la sala principal, la zona más grande de todo el castillo.

Todo estaba oscuro, no se podía ver nada, ni una sola luz que entre en la sala y de pronto, un relámpago cae, dejando ver a cuatro tipos armados, al parecer, ellos eran mis amigos, todos estaban dispuestos a pelear conmigo y Jasón estaba dispuesto a matarlos, pero, ahora que pasara, todo es un caos y yo no puedo hacer nada para parar esto, no tengo control sobre mi cuerpo y si uno de mis amigos sale muerto será solo mi culpa por no ser tan fuerte, como para tomar el control sobre mí mismo.

Narra Mauro.

Pasamos minutos en la sala principal, todo parecía ir yendo demasiado mal, ya que lo único que se podía escuchar afuera, eran los gritos de los guardias mientras luchaban contra Julio, en esos pocos minutos que nos quedaban antes de la última batalla, decidimos que sería mejor que Leo también batallase con nosotros, lo único malo es que él estaba ebrio y herido.

A pesar de que esto podía ir mal, llamamos a Leo, él se negó y dijo que no quería ser parte de una pelea nunca más, paso el tiempo y Julio todavía no llegaba, los segundos se hacían minutos, los minutos se hacían horas, no quería que nada de esto pase, pero, si tengo que pelear contra un amigo mío solo para salvar a otro, estaré dispuesto a morir.

Al fondo del pasillo pude ver la sombra de Julio, mientras se acerca a la sal principal, todo estaba oscuro y no se veía nada, así que no sé cómo puede terminar esto.

Julio solo se iba acercando con una espada en la mano y cubierto de sangre.

Ahora que me acuerdo, el hacha de Julio se había quedado en el reino, durante todos estos días.

Julio se fue acercando cada vez más, hasta que por fin entro en la sala principal, en cuanto el llego pudimos ver como un relámpago caía, eso ilumino la sala por unos instantes, pero, después de esto la luz se desvaneció otra vez.

Pasamos minutos viéndonos y después de eso, Julio se abalanza contra mí, yo no podía bloquear nada, además, Julio era demasiado rápido, José intento bloquear el golpe, pero, en cuanto Julio se acercó lo suficiente mando la guadaña a volar y pateo a José en las costillas.

José intento volver a pararse, pero no podía él estaba muy adolorido que ni siquiera se podía mover.

Después de esto, una energía negativa cruzo por mi cuerpo y me lleno de ira, mis dagas se iluminaron y me abalance contra Julio, este al principio no tuvo nada que hacer contra mí, pero, aun así, él no se rendía.

Cada golpe que le acertaba a Julio, se iba curando rápidamente con algo oscuro que no sabía que era, mis amigos no se quedaron atrás y al ver que le estaba haciendo daño a Julio ellos también se acercaron, Craig le dio un golpe con su martillo y esto lo dejo un poco confundido, después de esto, Gustavo se la abalanzo y le clavo su espada, al final yo le clave una flecha en el estomagó.