El killer

10

Paso mi domingo estudiando, afuera está  lloviendo y hace frío. El fin de evaluación ya está encima y no creo que pueda retener tantos datos.

Despierto el lunes por la mañana con un escalofrío recorriendo mi cuerpo, y la oscuridad filtrándose por las rendijas de la persiana, anunciando otro día gélido y lluvioso.

Lucho contra la tentación de quedarme en la cama, pero finalmente me obligo a levantarme, sintiendo el gélido suelo bajos mis pies.

Salgo de casa inventandome escusas para darme la vuelta y regresas a las cálidas mantas, y dejar atrás este maldito viento que me frena al caminar.

Me adentro en el instituto, caminando  por los pasillos casi desiertos con mi respiración y mis pasos resonando en el aire.

La sensación de angustia y claustrofobia aumenta a paso a paso, sabiendo que cada zancada estoy más cerca de enfrentarme de nuevo a mi propio infierno. Hoy no solo tendría que aguantar a Lucas y sus secuaces, si no que también tendré que aguantar la cara de Noah y sus comentarios mordaces.

-Buenos días ¿Que tal con tu novio? - oigo decir a Noah a mi espalda, modo de saludo con irónica simpatía.

Mis ojos evitaban el contacto visual con los suyos y sin pararme ni voltearme, saludo con toda la calma de la que soy capaz de mantener.

- Genial, gracias por el interés

- ¡Guay! Si... Se te ve... Tan enamorada. Hasta casi puedo ver corazoncitos alrededor y todo. Enhorabuena - Contesta soltando una risa, y adelantándome por la derecha, entrando directamente en el aula.

Resoplo y me permito unos segundos antes de cruzar esa puerta. Con paso firme, cruzo el pasillo y suelto la mochila sobre su mesa, sin mirarle, se que solo lo hace para provocarme, pero no puedo evitar contestarle, a notar que se está riendo en mi cara.

- Y ¿que cojones te hace tanta gracia?

- Nada. No te pongas asi. Estás muy a la defensiva ¿No crees?

Resoplo de nuevo y me muerdo la lengua para no contestarle otra vez.

– No me reía, solo que...Me preguntaba si de verdad tendrías algún novio. Porque esta claro que Eli, no lo es. Los novios se besan y tu con Eli... – dice negando con la cabeza–; Y aquí piensan que tu y yo... Pero tampoco. No se... Tengo curiosidad de saber si de verdad hay alguien en tu vida y no sólo en tu imaginación.

- Eres insoportable ¿Lo sabias?

– Si, posiblemente lo sea. Pero la verdad es que no hay quien se lo trague, pero si te hace mucha ilusión... haré que me lo creo - responde sacando los libros.

Trato de ignorarle en ese momento, volteando la vista hacia la ventana, viendo cómo la fina lluvia resbala por el cristal de la ventana

– Eso si, respondeme a una duda. - dice llamando de nuevo mi atención. - ¿Me crees tan imbécil como para que me crea esa mierda? ¿O solo es un inútil intento de ponerme celoso?

Me rio con ironía –  Pues si, la verdad es que si pienso que seas imbécil.

– Pues fíjate que no, se os ve a la legua, así que esa pantomima ha sido bastante ridícula.

- y ¿que te hace pensar que no lo somos?  Que no nos hayas visto besarnos no significa nada. O acaso eres tan patético que me espías

- ¿Espiarte? No, tampoco es que me importe una mierda a quien te folles. Ah!  no! que eras virgen. – se burla de mi.– Pero no hay que ser muy listo, tenías el pintalabios intacto.

- Ya... ¿Has oído hablar de los pintalabios permanentes?

-Si claro, pero ese no lo es. Yo mismo te lo quité con mis labios ¿Recuerdas? Además, él  no se había afeitado y tú tienes la piel muy fina. Si tu fueras mi novia... Aunque estuviera afeitado... - dice a mordiéndose al labio inferior, poniéndome nerviosa. - estoy seguro que te dejaría marca, la piel irritada y los labios bien hinchados -dice con sonrisa triunfal.

- Pues entonces tengo suerte de no ser tú novia. Pero mira Noah, me da lo mismo lo que pienses. No tengo que darte explicaciones.

– Cierto, no tienes que darlas. Esas historias fantásticas ya aburren un poco.

– Ya... Pues yo lo único que veo es que estas... celoso. ¡Muy bien Sherlock Holmes, sigue con tus absurdas teorias! Pero dime ... Si no te importa una mierda, ¿
por qué llevas todo el fin de semana haciendo teorias?

- ¡WoW! Esa a sido buena.- dice aplaudiendo a mi ataque - Pero no le hagas ilusiones al pobre, eso no está bien. Me daría mucha pena que sufriera. ¿Le jodió mucho cuando se enteró de que tú y yo...? - su cara de preocupación resulta de lo más falsa.

– No soportas ver feliz a nadie ¿verdad?

– Sinceramente... No soporto ver a ese mierda, así que mucho menos puedo soportar verle feliz.

No volvemos a cruzar palabra en todo el día, y eso en cierto modo me alivia. Ahora lo tengo claro, no está celoso, nunca le he gustado e incluso dudo que le cayera bien. Todo ha sido intencionado, solo queria fastidiar a Eli, y ya de paso a Lucas. Él sabía muy bien  quien era yo y que tarde o temprano, Eli se enteraría de ese beso.

Intento aguantar como puedo las clases que restan hasta el recreo, y poder salir y hablar un rato con Eli y no sentirme tan sola.Ya no sé si es dolor, rabia, frustración, decepción o solo el vacío que me ahoga.

«Hola!» escribo a Eli, en cuanto pongo un pie fuera del aula.

«hi»

«Noah sabe que lo nuestro es mentira»

«Ya, ya lo se»

« ¿Por qué? ¿Has hablado con él? »

«Si. Me tocó las narices a las tantas de la noche. Pero todo ok. No te preocupes.» «Tengo que dejarte»« Hablamos» contesta y deja de estar en línea.

Guardo el móvil, preguntándome que es lo que le habrá dicho este idiota. Pero no pienso preguntarle a él.

Las siguiente semanas de exámenes se hacen agobiantes, no consigo concentrarme. Me siento ansiosa, torpe, hasta empiezo a pensar que tengo problemas en la cabeza. 

Veo a Elías casi a diario, pero no hemos vuelto ha hablar del tema, que evita a toda costa. Ni siquiera puedo decir el nombre de Noah, sin que se le cambie la cara.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.