Hope y Presidió, no me han dicho nada a donde nos dirigimos está vez, me ha resultado incómodo viajar con estos dos, apenas los conozco a ambos, no se mucho de sus gustos y disgustos, se que Hope me protege pero quiero aprender más de ambos, creo que la cosa es mutua....Hope sabe de que vengo de otro lugar, pero aún así, me encantaría poder hablarme de mi mundo.
Ellos dos están conversando amenamente usando muchas palabras que son desconocidas para mí, por eso me he mantenido callada, escuchando y tratando de asociar todo, me enredo sola, pero aún así es la única forma que tengo que aprender este idioma raro: escuchando, repitiendo hasta que la pronunciación sea entendible, comprender que significa lo que hablo....Son muchas las cosas que debo de tomar en cuenta para poder hablar esta lengua sin matarme a mi misma en el intento, una cosa buena eso sí, es que puedo entender varias cosas y eso ya es un gran avance.
-Aimi- me llama Hope suavemente, mientras se me acerca, sus ojos denotan preocupación.
-Dime- le contestó mientras le miró con curiosidad.
-¿Estas bien?- me pregunta.
-Si....Estaba....Pensando- le digo mientras miro hacia el camino desconocido.
-¿Qué cosa?-
-Aprender- fue mi simple respuesta.
Debo de aprender muchas cosas sobre Lucentail, entre ellas, leer y escribir, también me interesa las cosas relacionadas con las plantas, sobretodo las medicinales y las venenosas, ya que para crear remedios y medicamentos, las hierbas venenosas son importantes, porque crean antídotos, otra cosa que quiero aprender es la geología y algunas costumbres.....Tengo muchas cosas que quiero hacer, no tengo idea como comenzar y si ya de por si me cuesta hablar, las otras cosas serán mucho más dificiles.
-Te seguiré enseñando a hablar, además de que pronto podremos conseguir libros ilustrados para que pueda enseñarte a leer- me consuela Hope mientras me acaricia la cabeza, creo que él cree que soy un animal haciendo ese gesto.
Tras esa breve charla, el chico, comenzó a enseñarme palabras nuevas, nombres y descripciones de plantas, además de explicarme un poco más de la magia, este último tema lo explico con delicadeza debido a que no he superado del todo mi miedo a ella, aunque una vez que le dije que la razón por la cual puedo provocar magia sin asustarme en el intento es debido a que mis primeras experiencias de la magia de forma positiva fueron cuando él la realizó, logro sacar una sonrisa en la cara del joven.
Presidió y Hope se dedicaron a la lucha, no me dejaron unirme debido a que soy debil, me molesta bastante ese hecho, pero si no entreno y no me guían para saber cómo puedo defenderme en este mundo, es algo obvio de que sea solo una carga, cosa que yo misma no quiero ser, se que Hope quiere cuidarme y protegerme pero yo igual quiero ayudarlo en todo lo que puedo, aunque sea solo curando sus heridas, si puedo sentirme de que soy útil, eso me hará feliz pero esos dos no entienden ese detalle....Las chicas somos complicadas, eso es verdad, pero en este caso es peor porque no sé cómo manifestar mi intención y no sentirme estúpida en el proceso.
El camino, a pesar de todo, fue relativamente movido, pero esos dos aún se niegan a decirme a donde iremos, igual eso me abruma porque como no soy de este lugar, todo lo que vivo es un revoltijo de emociones y sustos, se que no los puedo reprimir porque eso a la larga hace mal a mi estado mental, pero aún así, me gustaría que esos dos estuvieran más dispuestos a ayudarme a adaptarme y no a dejarme de lado, se que les preocupo, pero aún así quiero ayudarlos, aunque sea un poco.
La noche llego, como no había una aldea o algún lugar para quedarme, debemos de acampar, a mi me dejan hacer las comidas porque ellos están cansados, puedo entenderlo y por eso los dejo descansar mientras hago alguna sopa rápida para que disfrutes, como somos tres, nos reunamos para hacer turnos en la noche cada turno es de unas dos horas y media, en ese lapsus los demás descansan, cuando me toca, me pidieron que gritara si había algo raro, para despertarlos y que ellos pudieran reaccionar.
-La...Comida está....Lista- digo mientras comienzo a servir nuestra cena.
La sopa trae vegetales parecidos al cebollín, papas, zanahorias y una planta comestible pero que se parece a la rosa, Hope me dijo que esa le daba un sabor agradable a la comida y quería probarla así que la use en esta ocasión.
Los chicos se sentaron y tomaron el recipiente con la sopa, con una cuchara probé la comida la cual, al estar en mi boca, sentí un sabor parecido a la menta y la soya, sabores que no mezclaria en mi mundo pero que aquí, en Lucentail, por extraño que parezca, saben bien, además de que no hay que olvidar el sabor de las verduras las cuales eran idénticas a mi mundo natal.
La cena paso tranquila, me tocó hacer el primer turno de la vigilancia, ya que me ofrecí a hacerlo, los chicos se fueron a dormir, pero Hope me recordó que cualquier cosa, debía de gritar para que él y Presidió pudieran reaccionar a tiempo y no vuelva a pasarme algo como ser secuestrada de nuevo.
El cielo está despejado, las estrellas brillan de tal manera que nadie creería que esta maravilla existe, esta noche la luna no está pero aún así, todo brilla alrededor, el fuego de la fogata calienta mis manos y el viento que hay no es helado, más bien es reconfortante, el canto de lo que creo que son grillos es agradable y nostálgico....En el invernadero a veces podía encontrar grillos y me gustaba ir a escucharlos sobretodo en las noches que no podía dormir, ya que los sonidos y el tacto son cosas que relajan al corazón.