Capítulo 23

Oriana.

Termino de arreglar a las chicas y después me voy a mi cuarto a practicar hechizos, ultimamente se me esta haciendo mas fácil hacerlos,  estoy un poco más relajada y no se a que se debe. Me concentro en los objetos que tengo frente a mi los cuales se encuentran en mi cama, canalizo mi poder y digo en mi mente:

Phesmatos motus.

Los accesorios, libros y otros objetos se van elevando, sonrió victoriosa fijo mi mirada en un viejo libro de química y digo en mi mente.

Incendia.

El libro se incendia, bien Oriana ahora vamos con otro, me impresiona que pueda hacer dos hechizos a la vez, las cosas siguen levitando y el libro se sigue incendiando, apunto con mi mano a una caja de zapatos que está levitando me concentro y digo otro hechizo.

Phasmatos obscuras, Ex Luces Est Umbres

La caja desaparece, escucho pasos dirigirse a mi habitación, elevo mis brazos y los bajó de golpe deshaciendo todo, el libro está casi hecho cenizas, no permiti que el fuego se expandiera tanto pero igual tendre que barrer las cenizas que cayeron en el piso, las cosas que estaban levitando caen en partes diferentes de mi habitación y en ese momento entra Nath.

—Nath me asustaste ¿qué pasa? Creí que ya te habías ido —Está hermosa,  tiene un vestido ajustado negro brillante, un maquillaje muy coqueto y su pelo negro cae en hondas por su espalda, sus tacones son altos, no sé como Nath puede andar con eso toda la noche.

—Quería hablar contigo de algo antes de irme —oh, ya veía venir esto, se acerca y se sienta en mi cama.

—Samuel me dijo que te desmayaste en clase hoy ¿qué te pasó?- 

—Tenía tiempo libre y decidí practicar algunos hechizos, use mucho poder lo que me dejo doliendo la cabeza —Miento, Nath me da una mirada desaprobatoria.

—¿Que hemos dicho sobre practicar magia en espacios públicos? Sabes que es peligroso Ori, alguien pudo verte —Asiento jugando con mis dedos— Bueno eso era todo, te recuerdo que no tienes que usar mucho poder para hacer los hechizos nivel 2, son algo sumamente fácil no te sobrecargues que puede ser peligroso.

Nath se levanta de mi cama y se dirige a la puerta pero surge una pregunta que he querido hacerle.

—¿Qué pasó contigo y Samuel en la cocina? Se veía muy molesto cuando salió de casa —Nath se tensa por su mención, se voltea y su rostro está algo molesto.

—¿Desde cuando lo llamas Samuel? No creí que tuvieras tanta confianza con él —hago una mueca por la confusión ¿Qué le pasa? 

—Sabes que tengo mucha confianza con las personas, a demas a sido muy atento conmigo, cuando me trajo a casa fue muy animado, hablamos de varias cosas y eso me hizo entrar un poco en confianza con él —La expresión de Nath se endurece,  parece más molesta por lo que dije, inclino mi cabeza a un lado examinandola parece absorta en sus pensamientos.

—¿Nath? ¿Estás bien? ¿Dije algo que te molestara? —ella niega con su mirada en la nada.

—No, me alegra que tu y Samuel afianzaran lazos —Habló entre dientes y desapareció de mi habitación, me quedé mirando mi puerta con cara de estúpida, no entendía porque se comportaba así parecía… Parecía celosa.

¿Qué?  ¿Nathalie celosa por Samuel? Que estupidez estoy pensando, ella está con Michael no tendría que estar celosa… Aunque pensándolo bien cuando ella y Samuel están juntos hay una tensión increíblemente alta, ella no lo nota pero a veces se le queda mirando embobada y él la mira de una forma que no se como describirla, es muy intensa.

Borro esos pensamientos de mi cabeza y me concentro en ordenar mi cuarto para después ponerme a estudiar.

Llevo como 2 horas viendo los ejercicios de matemáticas que me mandaron a resolver y no entiendo nada, en parte fue mi culpa me dormí en esa clase, es que es tan aburrida y el profesor habla super lento. Me levanto de mi cama y busco un suéter para ponerme, por suerte consigo el de Luke que no se lo he devuelto,  debería peeero no quiero, es cómodo y me huele a él.

¡Qué mierda!

Sacudo mi cabeza, me pongo el suéter, un mono de cuadros para dormir y unos zapatos deportivos, necesito salir de aquí así que me iré a comprar un helado. Bajo las escaleras y me consigo a mamá de camino a la puerta.

—Hola cariño —me examina y frunce el ceño— ¿A dónde vas? —agarro las llaves de la casa y me apresuro a contestarle.

—Iré por un helado, regreso rápido —ella asiente, me despido y salgo de la casa.

Me encanta caminar, aunque se que la heladería queda lejos me gusta caminar, aclaro mis ideas y me siento libre. Me pregunto qué pasará con Neithan,  no vino hoy al instituto y tampoco respondió a mis mensajes, el en serio es lindo y me gusta aunque no somos nada oficial y hemos tenido una cita nada mas me gusta como es de tierno y atento conmigo, de tanto pensar en Neithan me acuerdo de la pequeña discucion que tuve con Luke.

¿Por qué se habrá molestado tanto? Solo le hice un reclamo no era para tanto, la verdad es que Luke fue mi crush cuando era niña como todas las demás desde que llegó al pueblo, el siempre fue muy sociable con todos y muy alegre, la mayoría de las veces se la pasaba conmigo y mi grupo pero cuando ya todos teníamos como 14 o 15 él se fue alejando un poco de nosotros,  se volvió popular, le empezaron a llover las mujeres por montones y conoció a Stacy, ay la perra de Stacy, siempre le caí mal y no se por que, me hacía la vida imposible pero yo no me dejaba y eso le molestaba más.

Llegó a la heladería como no hay fila compro mi helado rápido, voy comiendo mientras pienso en mi conversación con Samuel, fue muy entretenida,  yo hable más que él y él se mostraba atento a todo lo que decía.

—¡Lánzala! —alguien grita a un lado, cuando volteo para ver de quién se trata una pelota de basquet impacta en mi cara manchando mi cara de helado, el helado cae en el suelo y escucho risas a mi alrededor.

—¿Qué te pasa imbécil? —grito al chico que lanzó el balón él se aproxima a recogerlo entre risas, sus amigos lo acompañan.