Capítulo 9: Alguien Más Nos Ayudó

Chen Hao le contó lo que había pasado y Li Zhenguo le prometió arreglar el asunto de inmediato.
—¿Conoces a alguien por el nombre Ning Fan? Su familia es dueña de un restaurante en la calle
comercial —dijo Chen Hao arrugando la frente.
Él no era una persona siniestra. Pero Ning Fan fue quien había persuadido a propósito a Lu Chen y
Xu Nan para arrebatarle a Yang Xia y lo manipularon como a un tonto. Se preguntó qué pasaría si Ning
Fan y sus compañeros fueran pobres algún día.
—¿Ning Fan? Lo conozco. Su papá es uno de mis empleados. Ese restaurante en realidad es de tu
propiedad. ¿Te ofendió? —pregunto Li Zhenguo con seriedad. —Sé lo que debo hacer, Señor Chen.
¡Yo me encargo! —dijo después de un momento.
Chen Hao permaneció en silencio, no tenía idea lo que estaba planeando. En realidad, era porque no
tenía idea de qué quería. Esta era la primera vez que utilizaba su verdadera identidad para triunfar sobre
los demás. Aunque no los odiaba, se sintió incomodo y fuera de lugar después de que lo intimidaron. Ya
no quiso pensar más en ello.
Después de que guardó su teléfono, salió del baño y regresó al cuarto. Algo inconcebible estaba a
punto de suceder ahí. Apenas hace unos momentos, Zhao Yifan y Ma Xiaonan seguían marcando a sus
amigos y familiares para pedir ayuda.
De repente, Li Feihong entró corriendo al cuarto. Con mucho lamento, hizo una reverencia hacia
todos dentro del cuarto. Ya no había necesidad de que compensaran por los daños al acuario de peces
Feng Shui.
Todos quedaron perplejos, hasta que vieron que Ning Fan regresó al cuarto.
—¿Has resuelto el problema? —preguntaron las chicas llenas admiración.
Ning Fan estaba confundido. En realidad, salió para evitar meterse en problemas, pero cuando vio a
Li Feihong correr hacia el cuarto, él lo siguió. ¿Quién hubiera pensado que el problema estaba resulto?
—¡El Señor Feihong y mi papá son amigos después de todo! —dijo sonriendo y no lo negó.
—¡Ning Fan es el mejor!
—¡Ning Fan, eres tan asombroso!
El rebaño de hermosuras se convirtió en sus fanáticas admiradoras. Zhao Yifan le lanzó varias
miradas a Ning Fan. Se sentía muy atraída por él. Era uno de los dueños en la Calle Comercial Jin
Ling. ¡Seguramente recibía mucho respeto!
De repente la puerta se abrió y entró Chen Hao.
—¡Este cobarde regresa ahora que ya se ha resuelto el problema! —se burlaron las chicas mientras lo
miraban.
El rostro de Zhao Yifan estaba lleno de desdén.
—Xiaonan, me pregunto porque eres amiga de esta persona —dijo con un frío desprecio.
Solo entonces Chen Hao se dio cuenta que Li Zhenguo era muy eficiente y ya había resuelto todo.
Claro que tenía que estar resuelto. Esta era su propiedad. Al ver la mirada de la multitud, se dio cuenta
que ellos pensaron que fue el esfuerzo de Ning Fan. Malentendieron su motivo por el cual fue al baño
hace un momento.
«¿Debería explicarme ante ellos? Ja…», él había pensado que no habría necesidad de hacerlo.
La verdad es que inicialmente había creído que Zhao Yifan estaba muy bonita, pero ahora había
perdido todo interés por ella. Esta vez, ayudó a resolver el problema nada más por Ma Xiaonan.
Además, el creía que nadie confiaría en sus palabras, aunque se explicara. No quiso ponerse otra vez en
una situación humillante.
—Olvídalo. Ya que se resolvió el problema, ¡Tomemos otra ronda! ¡Yo invito!
Ning Fan seguía sin saber qué había pasado, siguió presumiendo y aplaudiendo. Miró a Zhao Yifan y
las chicas bonitas a su lado.
—¡Claro! ¡Vamos! —accedieron contentas las chicas.
Zhao Yifan mostró una sonrisa tímida.
En comparación con Xu Nan, ella pensaba que Ning Fan no solo era guapo, sino que también
maduro y confiable. Los más importante era que ese día ella había aprendido los beneficios de tener
buenos contactos. ¡El círculo social de Ning Fan era asombroso!
—¿Otra ronda? Son casi las cuatro de la tarde. Vayamos a casa… —el rostro de Ma Xiaonan se
oscureció.
Después del incidente ya no estaba de humor.
—Sí. Nosotros también nos vamos. Ustedes disfruten… —dijo Yang Hui y asintió.
Los compañeros de Chen Hao estaban muy decepcionados. Ya que habían pensado que podían
hacerse amigos de las chicas bonitas del dormitorio de Zhao Yifan en la celebración de cumpleaños. En
este momento era obvio que la presencia de Chen Hao y sus compañeros no era bienvenida.
—Jeje… Bien. El lugar a donde iremos no es un lugar al que puedas entrar así nada más. No puedo
traer a muchos a la vez. ¡Es mejor que no quieran venir! —dijo Ning Fan lanzando una fría mirada.
—¿Eh? ¿A dónde vamos? ¿No nos digas que vamos al hotel de tu familia?
Las chicas alzaron la mirada y preguntaron.
—No. Vamos a la Villa Balnearia. ¿Han escuchado de ese lugar antes? —Ning Fan negó con el dedo
mientras decía.
—¿Villa Balnearia?
—Quieres decir el lugar más popular en Calle Comercial Jin Ling, ¿el centro turístico al cual va la
mayoría de la gente rica? —dijo Zhao Yifan con incredulidad.
Ning Fan tenía razón. Había personas que nunca tendrían los recursos para ir. Zhao Yifan venía de
una familia decente. Alguna vez su papá la llevó allí por tener contactos con un familiar adinerado.
Nunca pensó que Ning fan tuviera tal privilegio.
—Señoritas, voy a traer mi auto. ¡Espérenme en la entrada! —Ning Fan se despidió y se fue.
En efecto la hermosura de Zhao Yifan había dejado pasmado a Ning Fan. Pensó utilizar la misma
teoría que le enseño a Lu Chen; invitarla a salir con dinero. Era de la idea de que ninguna chica lo
rechazaría si tenía suficiente dinero.
Zhao Yifan tomó el brazo de Ma Xiaonan.
—Xiaonan, no seas tan aguafiestas. Únete a nosotros. Después de todo, es tu cumpleaños. ¿No
habías dicho que siempre habías querido ir a la Villa Balnearia? ¡Esta oportunidad es única!
—Eso es cierto. Nunca hemos ido a la Villa Balnearia tampoco. Vamos juntos. ¡Tenemos esta
oportunidad gracias a ti! No te preocupes, Ning Fan está con nosotros. Nos va a cuidar sin importar lo
que pase en esta calle. Has sido testigo de su superioridad justo ahora, ¿qué no? —sonrió con esperanza
y dijo Xu Nan.
—No entiendo. Yifan, ¿no te sientes incomoda por lo que acaba de pasar? —dijo Ma Xiaonan
frunciendo el ceño.
—¿A qué te refieres con incómoda? ¿Hablas acerca del incidente con el acuario de pez Feng Shui?
—le contestó arrugando un poco las cejas.
—¡Sí! Li Feihong estaba muy enojado y lo ignoró al principio. No mostró ningún tipo de cortesía
cuando Ning fan estaba ahí, hasta tenía que hablarle con gran respeto. ¡Pero minutos después, la actitud
de Li Feihong cambio por completo hacia nosotros! Incluso regresó para disculparse y nos hizo una
reverencia. ¿No te parece extraño? —respondió con el ceño fruncido.
Después de escuchar a Ma Xiaonan, todos en el cuarto permanecieron en silencio.
—Tienes razón. También me parece extraño. Li Feihong no es alguien con quien te quieras meter. En
términos de estatus social, el papá de Ning Fan y el están en el mismo nivel. Es imposible que él
hubiera cambiado su actitud en tan poco tiempo. También hizo una reverencia hacia nosotros —dijo
Yang Hui.
—¿Quieres decir que alguien más nos ayudó?
Después de escucharlo, Zhao Yifan también se sintió incomoda. Había sido distraída por el encanto
de Ning Fan en ese entonces y no le había prestado mucha atención a la situación.