El Misterioso Caso de Nuevo Laredo

CAPITULO 6 "UN TRATO CON EL DIABLO"

Después de lo ocurrido el día de ayer, en toda la noche no pude dormir bien, pues en mis pensamientos tenia a esa mujer y a Julieta llegando a la casa en cualquier momento, cualquier sonido, ya sea de un perro o por el mismo aire golpeando los portones, me ponía en alerta, asi como Miguel y Abril, esta noche no la olvidaré fácilmente, fue un infierno. 

Jueves 13 de Agosto del 2020 | 10:08 am 

Desperté luego de casi no dormir en toda la noche, aun con todo mi cansancio el miedo me invadió por completo, Abril aun continuaba dormida, Miguel desperto primero y estaba en la cocina, al verlo le pregunté si todo estaba bien, me respondió de una manera tranquila diciendo que no había problema ya que reviso las cámaras y portones y no hubo ningún rasgo de presencia. Encendí el televisor y en las noticias estaban informando todo sobre el caso que ocurrió anoche, donde se informaba de un intento de toma de instalaciones, los medios estaban repletos de información acerca del tema, Miguel solo veía y se ponía nervioso al recordar lo que paso anoche. Abril desperto y de inmediato solicito estar al día con lo que decían los medios, en mi mente no podía creer nada de lo que paso, pero si tenía un extraño presentimiento, salí por unos minutos al patio y solo sentía el calor del día, me senté en una silla que estaba junto a la entrada y me quedé pensando en muchas cosas, en mi familia, mi pareja, mis amistades entre otras cosas, la finalidades era distraerme de los hechos ocurridos. 

Luego de un rato de descanso me quedé dormido en la silla, Miguel y Abril para no interrumpir me colocaron una sombrilla, mientras dormía tuve un sueño muy extraño, me veía en un lugar misterioso, un gran salón de reuniones, volteada a mi alrededor y no veía absolutamente nada, el cuarto estaba a obscuras, comencé a caminar por lo que podía apreciar, choque con varias sillas que estaban colocadas en forma de círculo, de ahí camine un poco más hasta que choque con lo que era la pared del salón, todo era muy extraño, hasta que derrepente un par de luces se encendieron y vi un escenario, las luces no eran demasiado fuertes, por lo que veía aun muy poco, camine hacia ese escenario y al llegar ahi, otro par de luces se encendieron y dieron como vista un poco mas del tamaño del cuarto, aunque había seis luces encendidas, éstas no generaban mucha luz para ver mi alrededor o buscar una puerta, después escuché una risa en las esquinas del cuarto, grite. — Quien es? Que quieren de mi?. Las risas se movían de esquina a esquina, incómodo de esto, me arme de valor y me acerque a una de esas esquinas donde provenía esas risas y al llegar una luz se encendió arriba de mi y me mostró una esquina vacía, confundido camine por la orilla del cuarto tratando de encontrar lo que originaba esas risas, pero no tenía éxito, en ese instante de nuevo se oscureció todo y quedé a obscuras nuevamente, sentía miedo en mi sueño, quería despertar pero algo me detenía, en un abrir y cerrar de ojos me volví a ver en lo que era en medio de ese salón, me fui alejando de ahí lentamente, poco a poco... En ese momento escuche un golpe fuerte en mis espaldas y al voltear no vi nada, pero de sorpresa las luces se encendieron, esta vez en su punto máximo y vi a una mujer vestida de bruja parada frente a mi con un cuchillo en la mano, el susto me hizo girar y correr en sentido contrario, de frente a mi había una puerta, corrí hacia ella queriendo huir de mi propia pesadilla, mientras mas corría, la salida me parecía eterna... 

Desperté de golpe cayendo incluso de la silla y soltando un grito de miedo, Abril y Miguel salieron corriendo directamente a donde estaba y preguntaron lo que había pasado y que si estaba bien, a lo que les dije que si, solo había tenido una pequeña pesadilla, vi mi reloj y observe que eran las 12:55 pm estaba un poco perdido y le pedí a Miguel un vaso de agua. Luego de recuperarme de esta pesadilla, llamé a Miguel y a Abril a la sala para hablar un poco de lo que íbamos hacer a futuro. 

— Bien muchachos, alguna idea respecto a lo que esta pasando aqui en Nuevo Laredo?. Les dije, Abril respondió primero diciendo. 

— La verdad no tengo mente para hablar sobre el tema, después de lo ocurrido el día se ayer por la noche, siento que es una trampa, tengo la sensación que esa tal Mariela es solo una cortina de humo, como si esa iglesia de donde provenía jugará a un juego, Julieta puede ser esa Mariela, hay muchas cosas que lo prueban, la manera en la que actúa, como se viste, su locura, puede ser posible eso chicos. 

Miguel la interrumpe. — La locura no es algo de una sola persona Abril, la locura es algo que todos llevamos dentro, a la hora de expresar un sentimiento, una acción, todo lo que sea diferente para las demás personas y para nosotros sea normal, a veces solo se necesita de un mal momento para caer en la locura, Julieta fue una de ellas, vio lo que podía hacer con esa fórmula creada por Mariela y así elevarse a la locura infinita. 

Luego de escuchar sus declaraciones al tema les dije. — Quizás debemos tomar unas vacaciones por el momento, no creen? Quizás el plan de esta mujer sea el tenernos con el interés en ella para asi volvernos locos, solo piensen un poco, lo que paso ayer era un ejemplo claro, pudimos enloquecer y perder la cordura, de suerte no pasó eso, pero imaginemos que si, probablemente nosotros estemos en prisión y ella libre... 

Abril interrumpió de nuevo aclarando huecos. — Si, regresemos... Para que? Para que ahora si se desvista totalmente de su locura y genere una masacre en la ciudad? Eso es parte de su juego Erick, quiere separarnos para asi tomarnos de uno en uno, puede que sea mujer, pero eso no implica que la mujer sea débil respecto a los juegos y misterios, Julieta es una mujer y mira lo que esta haciendo con solo una jeringa en sus manos... 




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