El nacer de una luna

Capítulo 2

El reencuentro...

Llegue como a las nueve de la noche a casa realmente no pensé que fuera a tomarme tanto tiempo llegar. Me acerco con mi maleta arrastrándola hacia la puerta decidía a tocar y darles esa sorpresa. Toco una primera vez y nadie contestó por lo cual intente una segunda, tercera , cuarta y quinta vez. Ya me estaba empezando a desesperar pero creo al fin alguien de mis padres escucho mis toquidos incesantes.

— En que le puedo ayu... – Dijo Fernando por inercia abriendo la puerta hasta que logró ver bien que era su hija quien estaba enfrente suyo. —¡Cariño! – dijo con tanta euforia. 

— Hola papá, me ayudas por favor con mi maleta – dije sonriéndole.

Entramos a la casa, mi padre dejo en la sala mi maleta y por consiguiente me abrazo soltanto unas cuantas lágrimas << no sabes lo mucho que te extrañamos aquí tu mamá y yo >>. No eran los únicos, igual me hacían mucha falta en cada uno de mis días. Realmente no quería que terminara ese abrazo pero tenías que ir por mamá que se encontraba durmiendo como siempre. 

Mi padre la levantó con tanta emoción que lo importaba que se enojara en ese preciso momento con él. –  !Mi amor , despierta Alicia está en casa! – dijo, no podía deje de emanar esas alegrías por tenerme de regreso.

Mi madre poco a poco se fue incorporando – ¿ porque tan bulla sabes que yo debo dormir sino será difícil que trabaje más tarde?– le dijo un poco molesta por tanto alboroto. << Cariño, mira quien llegó ... !Es Alicia! >>. Logra visualizar esa silueta que se encuentra recargada en la puerta de su cuarto siendo yo. Por consiguiente  salta de la cama de sorpresa y se dirige hacia mi dando otro caluroso abrazo como el que me dio hace unos momentos mi padre. Sin quedarse atrás se uno al abrazo mi padre fue lo más hermoso después de tanto tiempo...

Nos separamos por unos minutos, mi madre fue a cambiar su ropa, mi padre me ayudó a subir mis cosas a mi cuarto y yo me di un baño rápido para luego bajar con una nueva muda de ropa y contarles porque regrese.

A los poco minutos baje con una sobre en mano a la sala donde ellos me esperaban. Mi padre se tomó el tiempo de ir a la cocina para hacer té para todos. Ya sentada frente a ellos dejando el sobre en la mesa a lo que se vieron muy curiosos.

– Hija ¿Que traes en ese sobre? – dijo mi padre algo curioso.

–Dentro del sobre se encuentro unos documentos donde ... – dije dando un poco se suspenso a mis padres mientras abrí el sobre << Mamá ... Papá... oficialmente soy un mitólogo como ustedes lo son.>> Sorprendidos con la noticia se abalanzaron hacia mi con mucha felicidad. Acto seguido a ello, festejamos los tres juntos durante toda la noche , olvidando el trabajo...

 

 

Días más tarde...

Ya me había acomodado de nuevo en mi cuarto y me la pasaba apoyando a mi padre y madre con su trabajos respectivos. Salía de vez en cuando con Mariana todo iba realmente bien pero ... algo me decía que vendría algo malo a mi vida. No tardo mucho en suceder mi padre cayó enfermo de un día a otro. El doctor nos dijo que se debía a un sobre esfuerzo posiblemente relacionado con el trabajo a lo cual nos pidiero que lo tuviéramos en total reposo hasta que él pudiera mejorar. Creo fue una bendición el a ver regresado en esos momentos a la vida de ellos sabiendo que esta vez puedo serles de ayuda.

En estos momentos ayudaba más a mi padre con los hombres lobo que a mi madre pero ella comprendí la situación. Entre a la oficina a buscar unos documentos que se dejaron incompleto... cuando observe una carta totalmente cerrada con el nombre de mi padre pensando que es de trabajo decidí abrirla y leerla. Efectivamente era de trabajo...

“EstImado Don Fernando Montes...

      Le hago llegar esta carta de extremadamente urgencia, me temo que la alianza

      que teníamos de hace años con la manada Leoz  pronto llegue a su fin. Debido 

       a disputas de terreno por parte del nuevo alfa. Le solicito que venga lo más pronto

       posible y nos ayude a mantener la armonía que siempre hemos tenido. Le pido de

       favor que mantenga mucha discreción sin notificar por el momento al consejo ...

       sabe que puedo terminar mal antes de tiempo. Una cosa que debo comentar ...

       actualmente  he cedido mi puesto como alfa a mi hijo mayor Matthew por lo que

       le pido que también hablé con él y hagan las paces con el nuevo alfa.

                                                                                    Atte. Damián Prats ”

 

Alicia observe el sobre con detenimiento y noté que el sobre está fechado el mismo día que mi padre se puso grave de salud. Tras leerlo esperé a que diera la noche para mostrárselo a mi madre y me ayudara a encontrar una solución a este problema lo cual fue de mucha ayuda – hija, lo único que puedo decir es que debes ir y resolver como tu padre lo hiciera – dijo seriamente,esperando que sus palabras de apoyo. Lo cual realmente no lo fueron del todo.




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