El Nerd es el Chico del Tinder

Capítulo 10: La relación del año

Capítulo 10: La relación del año

 

Habían pasado varias semanas desde que me pelee con Chad en el cine, digamos que él cerro página puesto de que ahora Loren y él son novios formalmente. Y cuando digamos formal es que él le pidió en frente de todos que aceptara ser su novia, la chica estaba tan paralizada que se paso todo lo que quedo del día llorando porque no lo creía. Y créanme que yo también la entiendo. porque pensé que Chad jamás se rendiría, pero veo que me equivoque, Chad se rindió y eso significa que yo estaba ganado partida con Simone. Sorprendentemente las cosas con Simone van bastante bien, digamos que no dejamos de estar juntos, hasta se ha echo amiga de Max y ahora somos nosotros tres, contra el mundo. O bueno al menos eso decía ella, cada vez que salíamos los tres a ver una película o íbamos a la casa de ella a jugar billar. Si Simone tiene una sala de juegos y por desgracia esa sala se ha vuelto la adicción del pobre Max, cada vez que vamos a su casa siempre salía con el de;

Amigo terminare en el infierno por disfrutar de la sala de juegos de la chica a la que estamos destruyendo.

Pues fácil, no vayamos y así te evitaras lo caliente del infierno.

Pero la nana siempre me da minis pizza y minis jaleas – chillo observándome con horror.

 

Así que bueno él pobre estaba sufriendo por tal pecado. Ya yo estaba realmente reacio, me da igual las consecuencias que pague, por hacerle lo que le hago a Simone. Bostezo algo cansado caminando por el pasillo de la escuela, literalmente siento como mis ojos se cierra dado de que anoche me amanecí haciendo un ensayo para la clase de español, así que bueno ahora esto modo zombi en el medio del pasillo cuando siento como atropello a alguien con mi cuerpo. Abro los ojos algo aturdido cuando veo a una chica de pelo negro tirada en el suelo.

 

Joder lo siento, estoy muy cansado – murmuro tomando su mano ayudándola a ponerse de pie.

 

Joder, joder y mil veces joder.

 

Es hermosa.

 

Su color de piel me ha dejado loco, es como el chocolate dulce que me encanta comer en las noches cuando veo películas con mi madre, sus ojos son mieles y su cabello rizado. Tiene pecas en sus mejillas como en su nariz y sus labios son carnosos decorados con un dulce rojo. Es un poco pequeña pero no tanto, queda a perfección con mi estatura. Tiene curvas, tiene unas buenas piernas dándome a entender de que se ejercita puesto de que las tiene firmes junto a una cintura pequeña que la decora.

 

Te vas a quedar aquí parado ligándome o me vas a ayudar a encontrar el salón 114 de español – cuestiono ella sonriendo.

¿Me pueden recordar cómo se respira?

Claro – murmuro tan bajo que me sorprende de que me haya escuchado. Ambos caminamos hacia el salón 114 que pertenece a la clase de matemáticas. «Joder director, ¿no pudiste haberla puesto en mi clase?» Me reclamo mentalmente aturdido por tal mujer, quisiera mirarla toda la mañana, todo el día si me lo permitieran. Es muy bonita.

Aquí es – tartamudeo observándole, ella sonríe de manera natural y se acomoda su mochila con cautela.

Gracias, mucho gusto mi nombre es Keysi – dice ella dándome la mano, la tomo y siento esa pequeña electricidad de la siempre me mencionó mi madre las veces que me contaba como había conocido a mi padre. Siempre de pequeño le pedía que me la contara, la forma en que le brillaban sus ojos cuando me describía como sucedió era magia para mis oídos, siempre desee sentir algo así, era como mi señal de que todo estaría bien en mi vida porque tendría a alguien con quien estar para siempre. – ¿No te vas a presentar? – pregunta ella sin quitar la sonrisa de su cara.

 

Ella es tan bonita.

Lo siento, me llamo Hu… Jaylen – respondo rápidamente tratando de que no haya captado mi error.

Mucho gusto Hu…Jaylen – responde ella vacilando hacer algo avergonzando. Apostaría a que estoy rojo como tomate. «Vamos cabrón, cálmate» Me digo a mi mismo tratando de calmarme.

¿Nos vemos más tarde? – pregunta ella y me sorprendo a ver que lo dice en enserio. Asiento rápidamente y noto como sus ojos se ilusionan y sin decir nada entra sin quitar esa hermosa sonrisa del rostro. Me alejo todo emocionado y llego al salón del salón encontrándome con la chica de mis pesadillas, con mi chica.

Simone Jones.

 

Hola, cariño ¿estás bien?

Si, todo bien – respondo dándole un beso en su mejilla notando como el profesor comienza a dar la clase.

~*~

 

Camino hacia la mesa donde están sentados Max, Simone, Nova y Jordán, al sentarme al lado de Simone noto como ella comienza a darme besos en mis mejillas en signo de darme cariño. Últimamente se puesto así cada vez que estamos aquí, ella solo se sienta en mis piernas y se pasa todo el almuerzo tratándome como un oso de peluche. Hubo días que no me disgustaron incluso aunque me enoje admitirlo, esas veces la disfrute, y me cree en la mente de que de verdad éramos solo nosotros dos, sin nada de lo que nos rodeaba. Pero hoy era diferente.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.