Kitaro
Habíamos decidido descansar en un claro del bosque para almorzar, una vez que estaba todo listo Faren se dedicó a cocinar y a los pocos minutos nos encontrábamos comiendo unos deliciosos vegetales asados con arroz de acompañante.
Siento que me quite un gran peso de los hombros al contarles la verdad, sinceramente estoy sorprendido con sus reacciones, nunca me imaginé que este mundo fuera capaz de tener portales a otros mundos, esto… ¿Qué rayos acabo de pensar? Como sea, aún hay muchas cosas que desconozco y deseo aprender, eso me recuerda algo.
—Zoren.
-—¿Qué sucede? —coloca un bocado en su boca mientras me miraba.
—Ya cumplí lo que prometí ahora te toca a ti —parece que no se esperaba esa ya que se atragantó un poco con la comida.
—… —tosió un par de veces— Cierto que te prometí contestar tus preguntas respecto a lo de ayer. Bien... ¿Por dónde quieres comenzar?
Ya es el momento, debía responder un montón de dudas que tenía y sabia con cuales comenzar
—¿Qué son ustedes en realidad?
—Bien... —toma aire— ¿te acuerdas cuando me dijiste que era una especia de…? ¿Cómo le llamaste, todicia?
—Policía —le corregí—, y sí, me dijiste que eras alguien que tenía la tarea de mantener el orden ¿correcto?
—Es correcto, en realidad yo y Faren somos a lo que aquí llamamos "Guardianes", personas cuya labor es proteger este mundo y a sus habitantes de cualquier fuerza maligna que trate de dañarlos.
—No sé por qué, pero esto comenzó a sentirse como un juego de rol —pensé antes de hablar—. Entiendo, es sencillo de comprender. Ahora ¿cómo es que son capaces de dominar, en tu caso el rayo y en el de Faren el agua?
—¿Te acuerdas cuando Zoren te hablo de las energías que creaban los portales? —intervino Faren en esta ocasión— Bueno se basa en lo mismo, nosotros como guardianes somos capaces de manipular esas energías basándonos en los 5 elementos: Agua, Tierra, Viento, Fuego, y Rayo; debido a que son las que sustentan este mundo, dichas fuerzas son nuestra principal arma para enfrentarnos a quienes tratan de corromperlo.
—Eso no es exactamente lo que quería saber —dije en mi cabeza—. Aja, pero ¿cómo es que logran hacerlo? —insistí.
—Bueno veras la cosa es más simple de comprender, los guardianes se dedican la vida a comprender y sentir las fuerzas de este mundo para así poder manejar los elementos a su voluntad, pero eso es algo que requiere de mucho tiempo y trabajo duro en lograr. Pero todo el mundo no es capaz de llegar a tales puntos —me explico vagamente el lobo.
—¿Quieres decir que no todo el mundo puede ser guardián?
—Siendo más específicos, todos tienen el potenciar de serlo, como te dije se requiere de tiempo y trabajo y no todos tienen la cualidad para ello, a pesar de que cualquiera en el mundo puede ser capaz de llegar a ser guardián si se lo propone.
—¿A qué te refieres?
—Veras... todos los seres vivos tienen una naturaleza de los cinco elementos en su interior, pero solo aquellos que logran despertarla son capaces de manejarlas a voluntad.
—¡¿En serio todos pueden llegar a tanto?!
—Sí, incluso tu podrías hacerlo, pero solo si logras despertar tu elemento interior.
¡Esto es de locos! ¿¡En serio yo puedo ser capaz de algo así!? Este mundo sinceramente no deja de sorprenderme, en verdad, quiero saber más acerca de sus habitantes, no puedo evitar sentirme más emocionado a cada minuto.
—¿Te parece si continuamos mientras estamos seguimos cabalgando? Es mejor que no perdamos más tiempo descansando —me sugirió Zoren.
—Seguro.
Una vez que terminamos de arreglar las cosas nos subimos a los caballos y seguimos con nuestro camino a la capital.
—Entonces por lo que vi ayer, tu naturaleza es la del rayo y la de Faren es de agua.
—Correcto.
—En verdad los habitantes de este mundo son impresionantes sobre todo ustedes dos, jamás habría imaginado que alguien fuera capaz de cosas como esas.
—Nos estás dando mucho crédito Kitaro —aclaro Faren—, te costara creerlo, pero lo que hacemos es poco a comparación de lo que logran hacer los maestros guardianes.
—¿Maestros Guardianes?
—Así es, son los líderes de la orden y los más poderosos de la misma, su fuerza es tanta que podrían hacer desaparecer un pueblo sin mucho esfuerzo —quede con la boca abierta tras escuchar las palabras del elfo.
—T-tienes que estar bromeando —dije un poco nervioso.
—No lo estoy, el maestro guardián del viento es capaz de crear enormes corrientes de aire que podrían fácilmente arrasar docenas de casas.
—Y la maestra guardiana del rayo es capaz de recorrer distancias mucho más grandes a las que puedo logró yo en el mismo tiempo —agregó Zoren.
Es impresionante cuando vi a Zoren en acción recorrió en un parpadeo una distancia de varios metros, algo que a una persona normal le tomaría varios segundos en lograr, es increíble que exista gente así. Ahora que estoy pensando en eso....
—Eso me recuerda... El entara que casi me mata ayer... ¿También era una especie de guardián?
Tras hacer esa pregunta Zoren y Faren se pusieron serios, algo que me esperaba que sucediera.
—No exactamente, como te acabamos de decir los guardianes son aquellos que deben proteger este mundo a sus habitantes, en cambio aquel entara era todo lo contrario, era alguien que solo quería traer caos y desesperación por donde pasara —explicó el lobo frunciendo ligeramente el ceño.
—A esos sujetos les llamamos "Desertores" —indico el elfo— personas que logran manejar estos poderes, pero deciden hacer el mal, ellos son de las muchas cosas que tratan de corromper este mundo y nuestra labor es evitarlo.
—Así que esos "Desertores" eran las personas que me contaron que no tenían salvación y deben ser eliminadas para evitar que dañen a los demás.
—Es así... —Zoren suspiró ligeramente antes de continuar— Esa es otra razón por la que no todos pueden ser guardianes, no todo el mundo es capaz de matar aun si hay razones para hacerlo.
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Editado: 14.06.2020