Capítulo 24: La Maldición De Calista Contra Dos Novios

Ubicación: Cercanías Del Gran Bosque

Una pareja de enamorados se encuentran completamente abrazados y apoyados en un árbol del gran bosque, ambos se besan apasionadamente sin importarles correr el peligro contra alguna criatura. Se puede apreciar que ambos son los mismos que Heriberto encontró antes dentro del reino cuando se dirigía hacia la taberna de Yonju una mañana.

—Realmente te quiero mucho, querida —suena la voz del hombre mientras que abraza a su esposa apasionadamente.

Lográndose apreciar que ambos poseen las mismas ropas con las cuales Heriberto los había encontrado antes.

—Querido, siempre he soñado con estarnos moviendo libremente hacia nuestros alrededores, ¿por qué tenemos que estar encerrados en un maldito lugar? —inquiere la chica con tristeza mientras que su enamorado sonríe.

—No te preocupes —responde el sujeto mientras que decide besarla apasionadamente por unos momentos.

Quedando ambos unidos con el beso mientras que avanza el tiempo, aunque no se percatan de la presencia de Tsubaki, quien pasa cerca de ellos.

Dándose cuenta Tsubaki de su presencia, decide acercarse un poco hacia ellos, pero se percata que están en un momento especial, decidiendo invocar Tsubaki dos mariposas de color amarillas en su mano derecha; silenciosamente.

«Vaya, parece que tenemos un par de enamorados en este lugar peligroso »,piensa Tsubaki, logrando escuchar su conversación a lo lejos.

—Realmente quisiera que tengamos oportunidad para movernos libremente en un futuro hacia las afueras del reino —menciona la chica, lográndolo escuchar Tsubaki desde lejos, ya que se percata que ambos disfrutan su momento especial.

Comenzando Tsubaki a sonreír mientras que las mariposas comienzan a volar hacia su dirección, ambas comenzando a desprender un polvo dorado por medio de sus alas.

Decidiendo Tsubaki comenzar a alejarse de ambos para no llegar a llamar su atención.

«Realmente ese deseo se los voy a cumplir »,piensa Tsubaki sonriendo mientras que se dirige hacia el reino por otro rumbo.

No percatándose él que el demonio Naakro se acerca hacia ambos esposos con cautela, quien se da cuenta de su presencia desde lejos.

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(Momentos antes de que Tsubaki se retirara del Gran bosque)

«Estos par de estúpidos, jejeje, serán bastante fácil maldecirlos »,medita el demonio Naakro, acercándose hacia los enamorados, añadiendo—; «Van a ser malditos por desobedientes, ya que no deberían de estar afuera del reino ».

Percatándose que a lo lejos un extraño hechicero camina sin llamar la atención de ambos enamorados.

«¿¡Pero qué demonios!? », piensa el demonio, añadiendo—; «Vaya, vaya. Ambos tenían a un maldito entrometido, hmm, aunque más tarde lo alcanzo para maldecirle también, jejeje ». Dirigiendo su mirada hacia ambos enamorados para empezar a prepararse.

—Óiganme todas las criaturas que conforman este planeta, observen el poder que se me encomendó por medio de la diosa Calista para maldecir a toda criatura —dice en voz baja el demonio Naakro, comenzando su cuerpo a desprender un aura de color negra intensa.

«Excelente, llegó la hora de terminar con este hechizo, jejeje  »,suena la voz de Calista dentro de la mente del demonio Naakro, percatándose el demonio que dos mariposas se acercan hacia ambos enamorados para llamar su atención.

—¡Míralas! —suena el grito de la chica, siendo una distracción para el demonio quien deja de concentrarse en lo que estaba haciendo, ya que el demonio Naakro se percata que ambos insectos; desprenden un extraño polvo de color dorado hacia ellos.

«¿¡Pero que rayos es eso?! »,medita el demonio, añadiendo—; «Nunca ese polvo lo he visto en mi vida ». Dejando de concentrarse en el hechizo, ya que observa que la extraña chica alza su dedo derecho hacia arriba, mientras que su enamorado decide ponerse a un lado de ella con una sonrisa.

Sin dejar él de abrazarla en todo momento, percatándose ambos enamorados que una de las mariposas decide aterrizar en su dedo sin ningún problema. Distrayendo este acontecimiento al demonio, ya que observa estupefacto el acontecimiento.

—¡Mira querido, no se mueve! —grita la chica con una sonrisa, percatándose ella que el insecto de su mano; comienza a desprender más polvo dorado de sus alas que se dirige hacia ellos rápidamente.

No percatándose ambos que parte del polvo entra por sus narices sin ningún problema, mientras que la otra mariposa se dirige hacia el demonio sin que él se dé cuenta.

Percatándose momentos después el demonio de su presencia, quien decide dirigir su mirada hacia ese extraño insecto que vuela cerca de él.

«Nunca he visto ese insecto »,piensa el demonio, percatándose que el insecto comienza a desprender ese extraño polvo dorado por medio de sus alas.

—Nunca lo he visto —dice en voz baja, siendo interrumpido por un fuerte grito dentro de su mente.

«¡Maldito demonio incompetente, termina el maldito hechizo de la maldición! »,suena la voz de Calista dentro de la mente del Demonio Naakro, comenzando él a preocuparse en ese momento, ya que se está tardando demasiado contra ambos objetivos.

—Pe… Perdóneme ama, ahora mismo —dice en voz baja el Naakro preocupado, comenzando nuevamente su hechizo.

—Óiganme todas las criaturas que conforman este planeta, observen el poder que se me encomendó por medio de la diosa Calista para maldecir a toda criatura que yo desee, en el nombre de la diosa más temida de todos los dioses y futura a renacer; declaro que ambos sean malditos por ser desobedientes, ya que han salido de su reino. Desobedeciendo a sus padres por estar a escondidas. Así que aquella criatura que llegue a nacer de ellos será maldita mil veces —dice en voz baja el demonio con una sonrisa, añadiendo—. Todo aquel que observe a la criatura, sabrán su maldición y no se podrá eliminar, aunque muera la gran diosa Calista y avancen los años, esa criatura nacerá bastante débil e incompetente. —empezando el demonio Naakro a dirigir una de sus garras contra la pareja en ese momento—. ¡Sea Anatema aquella criatura que nazca de ustedes!