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Luis Mejia
Al estar frente a frente, Ringo le expreso todo lo que pensaba y sentía acerca de lo
que estaba sucediendo, su verdadera intención era hablar y desgastar a Belio
para tratar de detener la guerra absurda que estaba por comenzar, al expresar
aquellos sentimientos Belio entendió que la batalla que sostenían no los llevaría a
ninguna parte, también se dio cuenta que su voluntad era la misma que la de su
antecesor, evitar un derramamiento de sangre in necesario entre las tres
facciones.
Ambos se entendieron y se dieron cuenta que ninguno de los dos ganaría sino
expulsaban todo sus máximo poderes, luego de 50 días con sus noches de estar
luchando, llegaron al acuerdo de retirarse cada uno junto a sus soldados a su
mundo, dejando atrás la lucha que no dejaría ningún vencedor los dos sabían
de ante manos que cual quiera de los dos, podría partir el mundo en dos con un
solo blandir de su armas ambos llegaron a un acuerdo donde se prohibió a
cualquiera de sus habitante.
Producto de aquella batalla y al acuerdo que los dos llegaron acordaron que
ninguno de los héroes podría descender al paraíso, “como era considerada la
tierra” sin las ordenes de su líder. Lo cual no representaba ningún inconveniente
para ringo, ahora que los héroes estaban todos bajo el mando de un solo líder, no
abrían problemas entre la facción.
pero no todo estaba marchando a la perfección, aún estaba Belcebú, el líder de la
facción de los demonios, quien al ver lo que estaba sucediendo, no esperaría
hasta que uno de los dos decidiera iniciar la guerra; mientras las tropas heroica se
retiraban a su mundo junto a la de los dioses este blandió su espada demoniaca
Tan para abrir la puerta del inframundo al paraíso, dando la orden a sus hombres
de atacar a las dos facciones mientras estas se retiraba a su mundos
respectivamente, al sentir la presencia de los demonios; el cual era un poder
maligno que le provocó un escalofríos por todo su cuerpo junto a una sensación in
explicable que nunca había sentido, ya que esa era la primera vez que sentía un
poder lleno de odio, rencor, deseo de matar y de destruirlo todo. Ringo en medio
de aquella sensación cedió cuenta que la batalla contra este líder de facción no