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Luis Mejia
los cielos se desataron en lluvia y cada gota de agua era como si el universo
llorara la muerte del paraíso llamado tierra, se escucharon los volcanes que
hacían erupciones, los mares se agitaban, los vientos levantaban y arrasaban con
todo a su paso, >>el soplo del viento era como suspiros de dolor, cada terremoto y
erupción de los volcanes hacia parecer que el mundo gritaba pidiendo ayuda a
quien pudiera brindársela mientras que la lava se podría decir que era su sangre
que se derramaba con cada impacto de la espada sagrada gran y el hacha
demoniaca Kril, que estos dos monstros propinaban a sus armas al ver esto los
humanos quienes no entendían que era lo que estaba pasando y se encontraban
en un mundo diferente con seres que desconocían su existencia estaban
desconcertados unos gritaban, lloraban y sufrían al ver como llegaban dioses y
héroes al borde de la muerte, el caos era inmenso Clerk y Sena no daban abasto
organizando la llegada y recuperación de los heridos al reino entre el cielo y la
tierra y despachando a la guerra a los que se recuperaban y podían ayudar era
todo un caos.
los demonios que habían sido llevados hasta donde se encontraban los dioses,
héroes y humanos estaban a punto de crear otro campo de batalla con Speed hijo
de Belio y Street hijo de Belcebú por lo que Clerk se interpuso entre ellos, gritando
¡dejen la pelea y las discusiones para después este no es el momento para eso si
nos matamos unos a otros no abra lugar adonde podamos huir, aquí no hay solo
dioses, héroes, humanos y heridos también hay niños y niñas de las 3 facciones
en conflicto y una neutral miren a su alrededor la cantidad de muerto y destrucción
es enorme el olimpo, el inframundo y el paraíso están destruidos este es el único
sitio que nos queda para sobre vivir así que por ahora céntrense en la
recuperación de los heridos no importa de qué facción sean hay que salvarlo a
todos a como dé lugar!
Al ver que todo lo que la reina de los héroes les decía era verdad, decidieron
hacer una tregua con el fin de sobrevivir, por desgracia el número de soldados era