8. Problemas en el paraíso

Puede que solo sea una hermosa gata, pero hasta yo comprendía que algo malo estaba pasando, Industrias Kim era la empresa de Tae-sung, específicamente la empresa que él y su padre controlan, aquello significaba que el dinero que mi dueña supuestamente había robado jamás salió de la posesión de la empresa, por ello...nunca fue robado.

— Pero no lo entiendo...— la faz de Tae-sung estaba adornado con un mohín de confusión, parecía un niño pequeño cuya mascota acaba de morir pero es tan inocente que aún no comprende el concepto de la muerte, el dolor y el desconcierto provoco en mí un poco de lastima por él, pero es su culpa por no escucharla — mi padre me dijo que habías robado algunos millones de la empresa.

Mi dueña parecía igual de desconcertada, pero también indignada.

— Bueno, claramente el dinero esta en posesión de tu padre y no mía, señor Kim — el rostro de Tae-sung mostraba una gama de emociones sorprendentes, todas tristes y negativas.

Después de la llamada, Tae-sung tomó las manos de mi dueña y le rogo perdón. 

— Lo siento, realmente lo siento — Tae-sung comenzó a llorar —. Mi padre...mi padre me engaño.

Dios dice que debemos perdonar a quienes nos ofenden, yo perdone a Sama por atentar contra mi vida al bañarme, pero...¿Será Sama capaz de perdonar a Tae-sung por abandonarla? No es por creer en estereotipos, pero las mujeres colombianas — en especial santandereanas — son muy bravas y vengativas, son fuertes y valientes, no se dejan joder, ¡No señor! Ellas son capaz de derribar un ejercito con el poder de sus palabras. Para mi sorpresa, Sama tomó a Tae-sung de la mano y lo hizo entrar a mí casa — sin permiso, claramente — y lo sentó en el sofá, luciendo genuinamente preocupada por él.

— Quiero que me digas específicamente que te ha dicho tu padre.

Incluso cuando Tae-sung confeso que su esposa le había sido infiel y que sus hijos no eran suyos no se vio tan afectado como ahora, las lagrimas suicidas se precipitaron por sus mejillas hasta cristalizarse en el suelo.

— Mi padre...— Tae-sung inhalo profundo, llenando su boca con aire, como si tomará fuerzas para continuar su relato —. Cuando nos separamos, días antes de regresar a aquí, Corea del sur, mi padre me mostro una serie de transacciones que según él no autorizo, luego...— los dientes blancos y perfectos de Tae-sung mordieron sus rosados labios, cubriéndose el rostro con desespero y ahogado en el dolor — me mostro un video de la cámara de seguridad, en donde estabas tú en su oficina.

— ¡Pero yo estaba allí para recoger a Friga!

¡Eso es verdad! Yo testificaré a tu favor en el tribunal, humana, no dejaré que vayas a la cárcel. Puede que Samara se rabiosa, mentirosa, floja, mala cocinera y una estúpida por no comprender que los seres gatunos, y superiores nos bañamos con la lengua, ¡Pero jamás una corrupta!

Tae-sung sacudió la cabeza enojado.

— ¡El me mintió! — Él me mintió, Él me dijo que me amaba y no era verdad, Él me mintió. Tantos años en un país tercermundista me han afectado —. Me dijo que tu habías robado dinero a la empresa y la única forma en la no tomaría ninguna acción legal en tu contra era si yo regresaba a Corea, y me casaba con Eun-yeong sin protestar.

Aquello era una revelación terrible, literalmente el señor Kim había manipulado a su hijo más joven para que se casará con una mujer que no amaba y la cual resulto serle infiel.

Samara parecía comprender la situación, la tomó de la mano intentando calmarlo, Tae-sung siguió llorando, darse cuenta de que el hombre debía cuidarlo a toda costa, pero sobre todo cuidar su corazón, el señor Kim lo engaño, traiciono y manipulo de una forma tan cruel debía ser horrible, se supone que el señor Kim, siendo el padre de Tae-sung debía hacer lo posible e imposible por verlo feliz y prospero, en vez de eso se aprovecho de su inocencia y confianza que todo hijo deposita en su padre e hizo con él lo que quiso, sin importarle sus sentimientos o las consecuencias y por tomar decisiones tan crueles sobre su hijo lo termino destrozando, porque sí, Tae-sung esta destrozado, destrozado por un divorcio con la mujer que debía amarlo y respetarlo, la mujer que le juró fidelidad ante los ojos de Dios, debió serle fiel hasta la muerte, porque la muerte es solo un sueño hasta la segunda venida de nuestro señor Jesús.

— Tranquilo — Sama lo abrazo, lo envolvió en sus bronceados y suaves brazos, Sama posee esa clase de abrazos, esa clase de abrazos que son especiales, siempre son cálidos y pueden calmar el dolor, pueden hacer que cualquier persona se sienta como el ser más especial del planeta —. Todo estará bien, todo estará bien señor Kim.

Tae-sung se incorporó con sus ojos y nariz rojos por las lagrimas.

— Por favor, no me llames así, no soy como él.

Entonces no te comportes como él.

Parecía que sama pensaba lo mismo, pero cambio de tema, me hubiera gustado ver la reacción de Tae-sung al darse cuenta de que, lamentablemente, sí, se parecía a su padre, muchísimo más de lo que él cree.

— ¿Quién es Kim Se-jong? — Tae-sung abrió los ojos alucinado —. Según lo que dijo tu secretaria — ¡Sabía que era ella! — fue él quien tuvo por un tiempo la cuenta bajo su poder.

La faz de Tae-sung se ilumino por una revelación tan reveladora que yo no pude comprender lo que se le ha revelado, casi pude escuchar los engranajes de la maquinaria en su cerebro hacer click.

— Es el nombre de nacimiento de mi hermano mayor.

— ¿El hijo del primer matrimonio del señor Kim?

— Sí, él se cambio el nombre — la mirada de Tae-sung me hizo esponjarme del susto, Sama se mantuvo quieta, con el orgullo y la barbilla en alto —. Su nombre actual es Zhao Yi.