… (En la cocina) …
Grabiel: siento que en esta casa se va a llenar de alegría
Félix: como siempre se dice, la tercera es la vencida
Grabiel: estoy contigo (se bebe un trago)
Diego: ¿por qué tan alegres? (aparece y Grabiel escupe todo el trago)
Grabiel: ¿D-diego? (pregunta con un tono nervioso)
Félix: nos darás un paro cardiaco si no dejas de aparecer así
Diego: no cambien de tema, están actuando extraño, más de lo habitual
Grabiel: ¿qué pasa? Es un día alegre y maravilloso
Diego: no me la creo
Félix: yo de ti, estaría alegre
Diego: no me apetece y no tengo ninguna razón
Félix: entonces has lo que te apetece
Diego: (sonríe) ya que lo dices (abre la refrigeradora y saca una botella de su jugo y se lo sirve)
Félix: ¿sabes que a veces me da asco verte tomar eso?
Diego: (se lo toma) dijiste que haga lo que me apetece
Grabiel: ¡dejen de pelear!
Diego: (guarda el jugo y se limpia los labios) siento una presencia aparte de ustedes
Grabiel: que va, estás cansado eso es todo
Félix: buena jugada, si él la conoce en este estado de ánimo es mejor que no lo haga (pensó)
Diego: ¿es así?
Los dos: ¡claro! (dicen nerviosos)
………….
Anahí: (baja las escaleras y se dirige a la cocina, al llegar ve la presencia de ellos y se acerca) realmente es grande su hogar (todos la quedan viendo)
Diego: así que estoy cansado ¿no?
Los dos: hay una explicación (nerviosos)
- Fue en ese preciso momento, que conocí a mi prometido y mi futuro esposo...Diego Ruiz-
Anahí: ¿qué ocurre?
Grabiel: yo tengo una explicación (se relaja) Diego ella es Anahí, tu prometida
Diego: (la mira)
Anahí: (lo mira y se asombra) es aquel chico (pensó)
Diego: nos encontramos de nuevo
Anahí: si y gracias por la advertencia de aquel día
Grabiel: por lo visto, ya se conocían ustedes dos (sonríe de alivio) no abra ningún problema entonces.
Diego: padre (lo mira enojado) ¡te mencione mil veces sobre este tema y, aun así, no tomas en cuenta mi opinión!
Grabiel: claro que la tomo, solo que-
Diego: ¡no me interesa y no me obligaras a conocerla! (camina hacia la sala y todos van tras de él)
Grabiel: ¿qué pasa con tu promesa?
Diego: (se detiene) ¿vas a ponerlo como excusa? (voltea a verlo) realmente eres de lo peor
Anahí: (se le acerca a Diego y coge sus mejillas, estirándolas)
Diego: (agarra las manos de Anahí y trata que lo suelte) ¡déjame!
Grabiel: te dije que su actitud controlaría la suya
Félix: tuve suerte en no hacer ninguna apuesta (se susurran)
Anahí: te arrepentirás mucho por haberle faltado el respeto a tu padre